Se desliga Irán de la recompensa por ejecutar a Salman Rushdie
Afp y Reuters, Nueva York, 24 de septiembre Ť Irán anunció que retiraba su apoyo a la recompensa de más de 2 millones de dólares por matar al escritor indo-británico Salman Rushdie, por lo que Londres y Teherán dieron a conocer un acuerdo para mejorar sus relaciones diplomáticas.
``Significa la libertad para mí'', declaró Rushdie al conocer el acuerdo. El escritor ha vivido escondido en los últimos nueve años y bajo protección policial británica.
El 14 de febrero de 1989, el ayatola Roujullah Jomeini dictó una fatwa (decreto religioso) contra Rushdie e instó a los musulmanes de todo el mundo a matar al escritor por su libro Los versos satánicos, al que consideró blasfemo para el Islam y ofensivo hacia la imagen de Mahoma. ``La persona que muera por liberar al mundo de Salman Rushdie, es un mártir y va directamente al cielo'', indicó el fallecido máximo dirigente de la revuelta que terminó en 1979 con el régimen del sha Mohamed Reza Palevi, a quien Londres apoyaba.
Tres días después, Gran Bretaña anunció la congelación de sus relaciones diplomáticas con Irán, y después llamó a sus diplomáticos en Teherán; Irán replicó el 7 de marzo de 1989 y anunció la ruptura de las relaciones diplomáticas con Londres.
Tras una reunión al margen de la Asamblea General de Naciones Unidas, los cancilleres británico Robin Cook e iraní Kamil Jarrazi anunciaron un acuerdo para mejorar sus relaciones diplomáticas. ``El gobierno iraní no tiene la intención de tomar cualquier iniciativa que amenace la vida del autor de Los versos satánicos o de cualquier persona asociada a su labor'', declaró Jarrazi. Teherán, añadió, ``no alentará a nadie a hacerlo y se disocia de cualquier prima ofrecida para este fin''.
Cook consideró que estos gestos ``podrían hacer posible una relación mucho más constructiva con Gran Bretaña y la Unión Europea. Irán abre un nuevo capítulo en nuestras relaciones''.
Sin embargo, organizaciones fundamentalistas iraníes mantienen la recompensa por la cabeza de Rushdie, y han señalado que la fatwa se mantiene en pie porque el gobierno iraní no tiene la autoridad para revocar el decreto.
El miércoles, el presidente iraní, el moderado Mohammad Jatami, recordó que la fatwa no puede ser revocado por las autoridades políticas, pero que éstas consideran ``definitivamente cerrado'' el caso Rushdie. Jatami indicó que sólo los dirigentes religiosos --que han reiterado varias veces la sentencia de Jomeini-- están habilitados para tomar una decisión de ese tipo.
Con todo, la televisión estatal iraní anunció el compromiso del gobierno a no atentar contra la vida de Rushdie