El Correo Ilustrado

La Jornada miércoles 2 de septiembre de 1998

Aclara José Pagés que no se ha reunido con Monsiváis, Fuentes y Homero Aridjis

Señora directora: Le ruego hacer pública esta carta con la finalidad de que me dé oportunidad de hacer la siguiente precisión: En ningún momento, como se transmitió el día de ayer por los servicios noticiosos de Radio Red, los prestigiados intelectuales Carlos Monsiváis, Carlos Fuentes y Homero Aridjis consumieron o ingirieron algún tipo de bebida o sustancia tóxica en mi compañía. Quiero dejar en claro que hace mucho tiempo que no veo a los escritores mencionados, que son personas de una vida pública irreprochable y que ellos gozan de todo mi respeto y consideración. Esta información fue tomada del expediente que se integró a partir de mis declaraciones ante el Ministerio Público en un momento en que no gozaba de óptima salud física y emocional. Le agradecería la publicación de esta misiva para no dejar duda alguna sobre la imagen de esos tres grandes mexicanos.

Atentamente

José Pagés Rebollar


Llamado de auxilio de indígenas de la Patagonia argentina

Señora directora: Las comunidades mapuche painemil y kaxipaiñ de la provincia de Neuquén, en la Patagonia argentina, ubicadas en el paraje llamado Loma de la Lata, quieren informar sobre el grave riesgo que corre su salud física y cultural a causa de la contaminación de sus aguas. Estas comunidades se hallan en la zona de explotación petrolera de la privatización Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF). Por la irracionalidad de la empresa en la extracción y posterior manejo del petróleo, las capas freáticas de la zona se hallan contaminadas con metales pesados (plomo y mercurio). Esta es el agua que inevitablemente tienen que consumir los habitantes de la zona.

Ante una primera denuncia, Salud Pública realiza un estudio sobre la población menor de 16 años y mayor de 55. Se debe tener en cuenta que los expertos en el tema señalan que las consecuencias de los metales pesados sobre el organismo y sistema nervioso humanos es de especial gravedad en la etapa adulta, que abarca de los 20 a los 40 años que, oh casualidad, no fueron incorporadas en el estudio de Salud Pública.

De todas formas, este análisis del organismo oficial dio como resultado que ``el grado de contaminación no es de la gravedad que se preveía'', quitando trascendencia al primer resultado que mostró riesgo de vida humana y la vida en general, tanto animal como vegetal. La petrolera YPE, para lavar su culpa y su conciencia, entrega a los habitantes de las comunidades aguas envasadas, que de todas maneras sólo alcanza para un vaso por persona.

Se demanda:

1. La construcción de un acueducto que garantice el agua a dos comunidades que no resisten la broma de mal gusto de estar provistas de agua mineral para el consumo humano, cuando la flora y la fauna continúan muriendo. Este acueducto debe ser tomado río arriba para garantizar la calidad del agua. Oficialmente se afirma que ante el resultado de los análisis efectuados pors Salud Pública, al no existir la supuesta contaminación no se justifica la construcción de la toma, que genera gastos innecesarios y se debe realizar de la misma costa de la comunidad.

2. Se hace urgente la realización de un análisis biológico de sangre y suelo, que esté liberado del manoseo sufrido hasta ahora de parte de la inconciencia estatal, que ve como precio lógico la vida mapuche. Es más urgente aún, un análisis garantizado de todo soborno y la presión que ha provocado YPF sobre los laboratorios que han trabajado sobre la sangre y la orina de las comunidades afectadas. La denuncia ante las autoridades de la provincia fue acompañada por la propuesta de un laboratorio suizo; el gobierno argumenta un problema de presupuesto y, en caso de ser cubierto el costo, surge una nueva piedra en el camino: sacar sangre humana del país al extranjero es un problema de política exterior que debe resolver la cancillería. Cabe aclarar que hace poco más de un año, sacaron la sangre de 120 mapuches para patentar la secuencia genética rumbo a la Universidad de Pennsylvania; aquí no se habló de soberanía violada porque hubo retribución económica a cambio. Son dos comunidades que ya no soportan tanta agresión, están dispuestos a resistir con dignidad y no quieren morir envueltos en el polietileno de los pozos abiertos en los patios de sus propias rukas (casas). Este río de muerte no empieza y termina allí, sigue su curso destructivo hasta desaguar en el Atlántico, poniendo en peligro la vida de miles y miles de personas y degradando la naturaleza. El centro geográfico de las comunidades tiene el privilegio de ser el lugar donde está ubicada la mayor reserva gasífera del país. El afán de lucro de este sistema ha llevado a crear un proyecto de muerte denominado ``Proyecto MEGA'', una planta separadora de gas que trasladará a través de 600 kilómetros el recurso del territorio mapuche al polo petroquímico de Bahía Blanca.

Esa cuchillada de 600 kilómetros a nuestro Wall Mapu abrirá a la madre naturaleza y provocará un daño ecológico sin remedio al ecosistema mapuche. Este recurso posee una reserva de diez años al ritmo de explotación actual. Nada cuesta imaginarse lo que quedará luego de que YPE abandone nuestro lugar.

Atentamente

Jorge Nahuel, warken de la Coordinación de Organizaciones Mapuche


La paz, compromiso de todos, incluida la Iglesia

Señora directora: Solicito a usted la publicación de la presente.

Doctor Ernesto Zedillo Ponce de León

Los Pinos

Señor Presidente:

En todos los corazones de México ha crecido definitivamente la esperanza de paz y el compromiso por construirla. Ya no hay espacio ni justificación alguna para que alguien quiera y pretenda actuar la violencia.

Hago mía la palabra de los señores obispos de la Comisión Episcopal por la Paz y la Reconciliación en Chiapas. Todos los mexicanos somos actores de la paz. Nadie puede excluirse de este compromiso de la historia. En su reciente visita que hicieron a Chiapas, nos han hecho sentir que la Iglesia en México es una sola desde el Río Bravo hasta los límites del Usumacinta y del Grijalva. Cualquier lectura o interpretación equivocada sobre nuestro trabajo eclesial o cualquier atropello, golpeará el corazón de esta Iglesia única. ¿Por qué la ``usurpación de funciones'' eclesiales o religiosas, como la que se está dando en Chenalhó? Esto no construye nada. En cambio, sí obstaculiza irresponsablemente el proceso de paz.

Nuevamente, ahora con la Peregrinación Nacional de las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) por una Paz Justa y Digna, puede llegar hasta el corazón, aún doliente, de Acteal, ``Tierra sagrada de Mártires'', convertido ahora contradictoriamente en santuario de perdón y de resurrección y también en mensaje vivo de la esperanza de construir muy pronto un México más justo. Con los pobres y dolientes, unidos en la misma fe, celebramos esta esperanza.

En Acteal, México entero ha dado la espalda para siempre a la violencia, a la tortura, a la injusticia y a la impunidad. Ante nosotros se abre ahora solamente el horizonte posible de un México de vida para todos. La Historia nos juzgará --ya nos está juzgando-- de nuestra respuesta positiva o negativa a este compromiso. Como Iglesia, estamos doblemente comprometidos a seguir haciendo lo que a nosotros corresponde a favor de la paz. Lo seguiremos haciendo.

Atentamente

Joel Padrón González, párroco de Simojovel