Refuerza BdeM medidas para frenar embates especulativos

Roberto González Amador Ť Con el fin de contener ``el efecto perverso'' de los factores externos sobre el tipo de cambio, la inflación y las tasas de interés a mediano y largo plazos, el Banco de México decidió anoche reforzar las medidas de restricción monetaria aplicadas a partir de marzo.

En dos comunicados divulgados ayer por la noche, el instituto emisor anunció que a partir del 2 de septiembre, un día después del Informe del presidente Ernesto Zedillo al Congreso, entrará en vigor un mecanismo mediante el cual se alargan los plazos en los que el Banco de México recibe financiamiento de las instituciones de crédito, con el fin de aumentar la capacidad de ese organismo para influir en la evolución de las tasas de interés de corto plazo, que esta semana se dispararon a 27 por ciento, los mayores en dos años.

El banco central explicó que en los últimos días los mercados financieros nacionales se han visto afectados por la inusitada y prolongada volatilidad en los mercados internacionales, tanto financieros como de mercancías (como ocurre con el petróleo).

``Las expectativas de inflación mayor han impulsado al alza las tasas de interés, sobre todo las de largo plazo. De continuar esta tendencia, las perspectivas futuras sobre el abatimiento de la inflación y el crecimiento económico se verían comprometidas'', advierte.

Ante estas circunstancias, la Junta de Gobierno del instituto central consideró necesario reforzar los instrumentos de la política monetaria.

El mecanismo que entrará en vigor el 2 de septiembre funcionará de la siguiente forma:

Las instituciones de crédito estarán obligadas a depositar cada día hábil mil 250 millones de pesos a plazo indefinido en el Banco de México, hasta alcanzar un monto de 25 mil millones de pesos. Dichos depósitos devengarán una tasa de interés equivalente a la tasa de interés interbancaria de equilibrio (TIIE) a 28 días. La distribución de dichos depósitos entre las instituciones de crédito se hará en función de sus pasivos totales al cierre de junio.

En términos prácticos, esta medida es un retiro de liquidez al sistema financiero.

Además, el Banco de México repondrá toda la liquidez que retire mediante operaciones de mercado abierto a muy corto plazo, con lo que el monto de recursos en el mercado no se alterará.

El comunicado señala que la junta de gobierno del banco central ha detectado que los participantes en los mercados financieros han enfrentado dificultades para ``rebalancear'' su exposición a los riesgos de variabilidad de tasas de interés de su cartera de valores debido a la gran volatilidad. Esa situación, de acuerdo con operadores independientes, ha llevado a algunas instituciones a tratar de contrarrestar las políticas de restricción del Banco de México para evitar pérdidas futuras en sus tenencias de valores por el alza de las tasas.

Tal situación, continúa el comunicado, ha interferido con la efectividad de la política monetaria. Para resolver esta distorsión, el Banco de México facilitará a los mercados financieros el ``rebalanceo'' de la exposición al riesgo de sus carteras de valores gubernamentales mediante el intercambio (swaps) de recursos a tasa fija o real por flujos a tasas de interés flexibles (TIIE a 28 días).

El monto máximo del intercambio será de 25 mil millones de pesos y la asignación se realizará mediante subastas, en las cuales las instituciones de crédito serán las postoras. Cada banco podrá presentar posturas hasta por cuatro veces el monto total del depósito acumulado que tendrá que constituir en el instituto central.

En otro comunicado, el Banco de México informó que la Comisión de Cambios, integrada por funcionarios del banco central y de la Secretaría de Hacienda, determinó ajustar el esquema de ventas contingentes de dólares por parte del Banco de México.

El banco central recurre a las ventas contingentes de dólares para contener durante las jornadas diarias la depreciación del peso. Este mecanismo, consistente en ofrecer 200 millones de dólares mediante una subasta, se puso en marcha ayer y durante este año se ha aplicado cuatro veces.

Con la finalidad de aumentar la eficacia de este esquema, señaló, la Comisión de Cambios ha decidido que el Banco de México pueda efectuar hasta tres subastas durante el día, sin aumentar el total a subastar durante todo el día (200 millones de dólares).

La primera subasta se abriría entre las 9 y las 9:15 horas; si no se agotan los 200 millones de dólares, se abriría una segunda entre las 11 y 11:15 horas, por un monto máximo de 200 millones de dólares, menos lo que se hubiera asignado en la primera oferta del día; por último, si los 200 millones de dólares no se hubieran colocado en las primeras dos subastas, se abriría una tercera entre las 13 y 13:15 horas, en este caso por el monto remanente de los 200 millones de dólares.