Annan: la ONU, atenta a Chiapas y a la indagación sobre Acteal
Elio Henríquez, corresponsal, Acteal, Chis., 22 de agosto Ť Al cumplirse hoy ocho meses de la masacre, 550 representantes de 40 diócesis del país exigieron al gobierno federal que cumpla los acuerdos de San Andrés para evitar ``un baño de sangre'' y se logre una paz con justicia y dignidad en beneficio de las comunidades indígenas.
Asimismo, le pidieron que para solucionar el conflicto se acuda a ``la voz de la razón, el diálogo y los valores humanos'', y se destierre ``la impunidad, el hostigamiento y la discriminación. Esperemos que de ahora en adelante la muerte, el dolor y el sufrimiento no vuelvan a imperar''.
Junto a más de mil indígenas católicos de la diócesis de San Cristóbal que llegaron acompañándolos, los 550 miembros de la Peregrinación Nacional, pertenecientes a las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) de 40 diócesis del país, acusaron al gobierno de haber ``alimentado la presencia de los grupos paramilitares induciéndolos a cometer el pecado de matar a sus hermanos''.
En el contexto de esa visita, Antonio Gutiérrez, dirigente de la agrupación de la sociedad civil Las Abejas -a la cual pertenecían las 45 víctimas de Acteal- dio a conocer que la Organización de Naciones Unidas (ONU) les informó que su secretario general, Kofi Annan, ``está enterado de la situación que se vive en Chiapas''.
En un mensaje recibido apenas este día, un asistente de Annan le informó a Las Abejas que el secretario general de la UNO ``sigue atentamente la evolución del conflicto chiapaneco y las investigaciones'' de la masacre de 45 indígenas en Acteal, el 22 de diciembre pasado.
El breve mensaje de la ONU llegó en respuesta a una carta que hace cuatro días enviaron los dirigentes de Las Abejas, para pedir su intervención con el fin de que haya justicia y paz, ``y la sangre de los 45 mártires de Acteal (21 mujeres, 15 niños y nueve hombres) no sea en vano''.
En la misiva de una página, la agrupación le expresó a Annan: ``Se ve claro que igual que Julio César Ruiz Ferro, el actual gobernador Roberto Albores Guillén sigue asesinando y encarcelando a indígenas inocentes que luchan por una vida digna''. Y añadió: ``La vida de nosotros sigue siendo de un gran sufrimiento e injusticia por culpa de Albores Guillén''.
Al dar a conocer el mensaje, Antonio Gutiérrez aseveró que al gobierno ``no le gusta que nos quejemos y acudamos a instancias internacionales, pero tenemos que hacerlo porque en México no hay solución: no han sido castigados los autores intelectuales y materiales de la masacre, los paramilitares siguen sueltos, el gobierno no ha cumplido los acuerdos de San Andrés y las comunidades están llenas de militares; sólo en Chenalhó, con 33 mil habitantes, hay más de 2 mil soldados''.
El de hoy fue particularmente un día triste en Acteal, porque en el interior del santuario construido sobre la tumba colectiva fueron colocadas 34 fotografías de los tzotziles masacrados. De las restantes 11 personas aún no se han encontrado imágenes gráficas.
Pegadas en la pared, las fotografías tienen un pequeño pie con el nombre y la fecha de nacimiento del difunto. Mientras con lágrimas en los ojos los visitantes caminaban por el salón para ver las imágenes de cómo eran los ``mártires'' antes de morir, los deudos formaban pequeños grupos frente a las placas a colores y daban explicaciones sobre la matanza en medio de un llanto incontenible.
Las fotografías fueron colocadas hace unos días para que las vieran los visitantes de las CEB, explicó una religiosa. Y en lo que será una tradición de hoy en adelante, se les entregó una pequeña bolsa blanca artesanal con un poco de ``tierra sagrada de Acteal'', como recuerdo y testimonio de su presencia en este lugar.
Esta tarde se celebró una misa con la presencia de una veintena de sacerdotes de las diócesis local y foráneas. Los peregrinos regresaron esta noche a San Cristóbal y mañana se distribuirán en grupos hacia las siete zonas pastorales que encabeza el obispo Samuel Ruiz, en un acto de ``acompañamiento'' a los católicos de la región.