La Jornada 14 de agosto de 1998

Lo que dije de De Prevoisin es fama pública; no lo supe como abogado

Juan Manuel Venegas Ť Abogado de Inver World a partir del último trimestre de 1994, Diego Fernández de Cevallos afirma que no tuvo acceso a la averiguación previa que la Procuraduría General de la República (PGR) había empezado contra Gerardo de Prevoisin, y que su papel como representante de la intermediaria financiera texana se limitó a informar ``sobre los depósitos que Aerovías de México había hecho en Inver World; nunca tuve conocimiento de las operaciones que en su vida hubiera hecho'' la compañía aérea, ``ni menos del señor De Prevoisin''.

Insiste en el punto: ``en expediente, no tuve acceso a ninguna investigación de la PGR; supe que la procuraduría investigaba la administración de Aerovías en manos del señor De Prevoisin, pero jamás se habló o se sugirió siquiera de recursos que hubieran ido a dar al PRI. Eso lo puede constatar la propia procuraduría. Además, la empresa que yo representé, tal y como lo he venido diciendo, nunca transfirió fondos de De Prevoisin o de Aerovías a favor del PRI''.

En entrevista con La Jornada, el ex candidato presidencial del Partido Acción Nacional ofrece su versión, precisa situaciones y fechas, y detalla el papel que desempeñó en el tema de la polémica: su participación como abogado de una empresa estadunidense ligada en operaciones crediticias back to back a Aeroméxico, cuando esta empresa estaba dirigida por Gerardo de Prevoisin, acusado de un fraude por más de 72 millones de dólares y de haber aportado 8 millones a la campaña presidencial del Partido Revolucionario Institucional en 1994.

Una nota periodística aparecida en La Jornada el miércoles, que dio cuenta de su presunto conocimiento de esas aportaciones en la campaña en la que él mismo contendió por la Presidencia de la República abanderando a Acción Nacional, originó su respuesta.

Su papel en Inver World.

--En la entrevista que otorgó a Joaquín López Dóriga hace dos días dijo usted que como abogado de Inver World respondería a la investigación que llevaba la PGR. Como abogado, ¿cómo respondió a la procuraduría si dice que no sabía lo que estaba investigando?

--Lo que por cuenta de la empresa que representé investigaba la procuraduría eran los depósitos que se habían hecho en Inver World, no todas la operaciones que en su vida hubiera hecho Aerovías, ni menos De Prevoisin. Aerovías es una empresa internacional que tiene cuentas con muchísimas instituciones de crédito, y yo sólo iba y podía responder por lo que se refería a Inver World, que era mi representada.

``No podía yo responder por todo lo que había hecho Aerovías, no podía yo saber todo el mundo de los negocios de esa empresa y de su presidente de consejo. Por tanto, cuando yo accedo a la procuraduría para conocer qué quieren saber de Inver World, proporciono los datos que a nosotros nos constan, los que mi cliente me proporcionó y nada tenía que ver, ni podría tener que ver, con traslados a favor del PRI de cantidades multimillonarias, si a través de mi empresa no se hicieron.''

--Entonces, ¿en qué se basó para hacer su afirmación de que De Prevoisin había pasado recursos al PRI, si como dice no tiene la información para probarlo?

--Me baso en dos elementos que son del dominio público y que por lo tanto, virtualmente, no necesitan mayor demostración. Primero, porque lo han confesado grandes empresarios y banqueros como Carlos Cabal Peniche, como el señor (Angel Isidoro) Rodríguez, apodado El Divino, y como el propio De Prevoisin lo ha hecho, ellos han declarado públicamente mucho tiempo después, que parte de lo que ahora se les incrimina fue a dar al PRI, en eso me baso, en el dicho de ellos, no desmentido por el partido oficial, y porque es del dominio público que los grandes empresarios de este país, generalmente, han dado docenas y cientos de millones de dólares al partido del gobierno, y particularmente a la campaña del señor Zedillo.

--Sin embargo, como lo planteó en la entrevista del martes, pareció que como abogado disponía de información que sostuviera su dicho.

--Ustedes, como periodistas, mejor que yo saben que el señor De Prevoisin hace mucho tiempo declaró que había entregado dinero al PRI; que el señor Cabal Peniche también lo ha declarado, él o sus apoderados; y porque el señor Rodríguez también lo ha dicho. Con base en ello me consta, en convencimiento de toda una sociedad, que el señor Oscar Espinosa Villarreal pasó de Nacional Financiera a la Secretaría de Finanzas del PRI, y pasó la charola a muchos importantes empresarios. Tengo la convicción moral de que los grandes empresarios de este país, salvo excepciones, financiaron a la mala la campaña de estos bandoleros.

--A usted se le ha entrevistado como abogado de Inver World, y como abogado se le ha pedido que explique el papel que desempeñó. Como abogado, también, usted afirmó que el PRI recibió 8 millones de dólares de De Prevoisin. ¿Que no el que afirma prueba, por qué no entender que si el abogado está afirmando es porque tiene los elementos para sostener su afirmación? Usted dijo que se jugaba la cabeza, apostando a que así había sido.

--Sí, por supuesto aposté la cabeza (en la entrevista con López Dóriga) y la vuelvo a apostar hoy, y la apostaré siempre, porque si ellos mismos como banqueros y empresarios han hecho esta afirmación y no ha sido desmentida por el propio partido político involucrado que es el PRI, tengo motivo legal y político para sostener mi dicho; lo que no se desprende de ello es que yo conociera este hecho, esta circunstancia, esta entrega de dinero millonario en el año de 1994, como lo afirmó el encabezado de La Jornada del miércoles pasado.

--Bueno, pero usted en 1994 tuvo la representación legal de Inver World.

--Sí, pero de allí no se concluye que en esa fecha supiera lo que ustedes como comunicadores hicieron del dominio público años después.

El ex candidato presidencial fue insistente a lo largo de toda la entrevista realizada en las instalaciones de este diario, de que él sólo tuvo conocimiento de las aportaciones de De Prevoisin al PRI hasta 1995, ``cuando, si la memoria no me falla, lo hicieron del conocimiento público'' los medios de comunicación.

--Antes ¿no supo nada?

--Nunca, jamás. Pero no habría ni motivo ni razón para que yo lo supiera.

Las razones privadas de un político

Nuevamente en el ojo del huracán, como antes lo estuvo en los casos de las llamadas concertacesiones, la quema de boletas electorales de los comicios de 1988, la adquisición de terrenos en Playa Diamante en Guerrero, y en la quiebra e intervención hacendaria del Grupo Anáhuac, el político de extracción panista dice, grita, gesticula retador: ``Jamás he relacionado mi vida pública con mi desempeño profesional, y al que pueda demostrarme lo contrario ya lo estoy esperando''.

--No pareciera que a veces se confronta su posición política de oposición, que pregona ciertos postulados de transparencia, de democracia, con su actividad como abogado relacionado, por su tarea, con estos escándalos.

--La pregunta puede implicar indirectamente una recriminación. Yo reclamo que si hay alguna duda se me diga a qué caso se refiere, para dar una respuesta en concreto.

--No; no se le está incriminando, se le está preguntando. ¿Se puede representar un interés que resulta contrario a lo que se dice en el discurso?

--No.

--¿Cómo selecciona a sus clientes entonces?

--Como me lo dicta mi conciencia. Y si tienes alguna duda al respecto, hazme una pregunta concreta.

--Bueno, es en términos generales...

--Yo acepto que no se pueda representar un interés privado o público que esté en contra de tu discurso político o de tu conciencia, pero para hacerme la incriminación que pide derivarse...

--Le estoy haciendo una pregunta.

--Pero la pregunta puede implicar una recriminación, ¿a qué caso se refiere para poder dar una respuesta en concreto...?

--Concretamente, ¿hasta donde le beneficia o le daña, como político, su éxito como abogado que le permite tener terrenos en Playa Diamante, pero que a la vez lo mete en tantos escándalos?

--Como todo en la vida, y si alguien considera que me beneficia mi posición política, yo diría que me necesita mantener el que me cuestione. Al que no le cuadre mi trabajo de abogado o de ranchero, pues que me saque de trabajar y me mantenga, porque yo no vivo y nunca he vivido de la política.

``De la difamación y del escándalo no tengo la culpa yo, sino el que lo hace. No manejo los medios de comunicación. No puedo entrar a responder por lo que otros, a la mala, puedan decir de mí, lo menos que puedo hacer es que si alguien de algo me incrimina, exigir que aporte pruebas.''

--¿Pero a qué atribuye...?

--A que soy un hombre público, a que estoy presente en la vida nacional, a que hablo de frente y a que lastimo al gobierno y a mis demás adversarios.

--Un poco para conocer al abogado y deslindarlo del político. ¿En qué premisas se basa para aceptar un cliente, bajo qué condiciones?

--No tengo varias premisas para aceptar asuntos profesionales, tengo una: estar plenamente convencido de que puedo contribuir a la justicia, me paguen o no me paguen. Y ya que me preguntas de este asunto, te puedo asegurar que de diez asuntos que llevo en mi despacho, nueve no los cobro, por supuesto debes imaginar que el que cobro, lo cobro muy bien.

--El que esté en el ojo del huracán en diversos acontecimientos, ¿afecta al PAN?

--Tal vez. Eso pregúntaselo al PAN. Y el día que yo no le sirva como militante me lo pueden decir y obramos en consecuenciaÉ