La Jornada 10 de agosto de 1998

Centrales obreras darán a conocer hoy su postura sobre las enmiendas

Elizabeth Velasco Ť Los dirigentes del Congreso del Trabajo (CT) y de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) darán a conocer este lunes su postura en torno a las reformas a la Ley Federal del Trabajo (LFT). Están de acuerdo con la supresión del apartado B del artículo 123 constitucional, rechazan la contratación eventual y por tiempo determinado, y se manifiestan por la vigencia de los contratos de protección, entre otros puntos.

De hecho, todas las centrales del movimiento obrero organizado ya tienen listas sus propuestas. Así, CTM, CT, CROC (Confederación Revolucionario de Obreros y Campesinos) y UNT (Unión Nacional de Trabajadores) están listas para iniciar el debate y definir los artículos a reformar.

A su vez, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) plantea una propuesta que tiene como eje un nuevo proyecto económico, en donde el pivote de la recuperación se centra en el fortalecimiento del mercado interno, y para ello propone la sustitución de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos por un instituto que esté dentro de la estructura del Poder Legislativo, a fin de que dejen de ser el Banco de México y la Secretaría de Hacienda los que establezcan esas percepciones.

De acuerdo con un estudio comparativo de las propuestas de reforma a la LFT de la CTM, CROC y UNT, aunque estas organizaciones tienen más coincidencias, las diferencias se acentúan en puntos centrales.

Contratos de protección (en su mayoría firmados a espaldas de los trabajadores y de los cuales la CTM tiene 70 por ciento de 600 mil en el país), libertad, democracia y autonomía sindical, así como cláusula de exclusión (a través de la cual el líder sindical se reserva el derecho de despedir a los trabajadores), son algunos de los puntos que la CTM desea dejar intocables, mientras que UNT y CROC exigen que se eliminen.

La UNT está en favor de eliminar la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos y las Juntas de Conciliación y Arbitraje, lo cual es rechazado por CTM y CROC.

Otro punto en que difieren se relaciona con el movimiento escalafonario, el cual para CTM y CROC debe tener como base las aptitudes y la antigüedad en el trabajo, lo cual rechaza la UNT.

Sin embargo, estas centrales están en favor de la eliminación del apartado B del artículo 123 constitucional (relativo a la no huelga de los trabajadores al servicio del Estado), conservar el espíritu protector del artículo 123 constitucional, cuyos principios consideran irrenunciables, mantener la contratación colectiva, jornada máxima de ocho horas, derecho al salario remunerador, descanso semanal de dos días obligatorio, salario igual para trabajo igual y equidad en el trato, tope a la jornada laboral diaria.

La UNT plantea la reducción de la jornada laboral de 40 horas con pago de 56, y la CROC pide una reducción de 35 horas con pago de 56. La CTM no menciona nada sobre este tema. En cuanto a la huelga, aunque ésta central menciona que es intoncable, no exige la eliminación de la calificación de las huelgas, aspecto que añade UNT y CROC, así como la supresión de la requisa.

Todas las centrales coinciden en que el reparto de utilidades es un derecho del trabajador. Sin embargo, la CTM propone excluir la competencia de la Secretaría de Hacienda y asignarle a la Secretaría del Trabajo la facultad para resolver las objeciones obreras en materia de utilidades. En tanto que la CROC demanda modificar el reparto de utilidades y establecer un mínimo de 2 por ciento del activo fijo de las empresas.

Sobre la subcontratación y subrogación de servicios, la UNT pide la reglamentación de ``nuevas modalidades de trabajo'' y las señala como un derecho a las obligaciones derivadas del patrón efectivo y del sustituto, mientras que CTM y CROC se manifiestan en contra de dicha subcontratación, ya que ``mediante ese esquema los patrones pretenden evadir los compromisos laborales con sus trabajadores''. También, ambas centrales expresan un rechazo total a los contratos de prueba.

Otro punto escabroso se relaciona con la integración de la productividad en la relación laboral. La UNT plantea el establecimiento de mecanismos que permitan que los beneficios de la productividad repercutan en el bienestar de los trabajadores mediante su negociación. La CTM exige adicionar a la LFT un capítulo de productividad, la cual debe concebirse con un ``contenido económico y un carácter social'', en tanto que la CROC plantea una estrategia basada en la capacitación de la fuerza de trabajo, la readopción de nuevas formas de organización laboral y la introducción de nuevas tecnologías. Esta central rechaza la productividad lograda mediante la precarización del empleo, la sobreexplotación y la lesión a los derechos sindicales.

Dichas centrales están en favor de la defensa del contrato-ley y se pronuncian por hacer respetar el derecho a la sindicalización, entre otros puntos.

Por su lado, el PRD propone que desaparezca la CNSM y se forme un Instituto Nacional de Salarios, Productividad y Reparto de Utilidades, autónomo y descentralizado, que dependa de la Cámara de Diputados. Este instituto sería auxiliado por una comisión técnica que mediría el deterioro del salario y recomendaría cada trimestre un aumento salarial para restituir el poder adquisitivo perdido. Se trataría de establecer un nuevo esquema de medición del salario que no quedara en manos del Banco de México ni del INEGI, indicó la senadora perredista Rosa Albina Garavito.

Además, trimestralmente se tomaría en cuenta el aumento de precios para la nueva determinación del salario y cada año se recibiría el diagnóstico de cuánto creció la productividad para que, a su vez, este instituto recomendara a la Cámara de Diputados un incremento de las percepciones.