La Jornada 25 de julio de 1998

Presuntos judiciales federales mataron a un joven durante un cateo en Juárez

Rubén Villalpando, corresponsal, Ciudad Juárez, Chih., 24 de julio Ť Un comando de ocho hombres con uniformes de la Procuraduría General de la República (PGR) cateó al menos seis viviendas en el poblado fronterizo de Palomas (conocido también como Rodrigo M. Quevedo), donde detuvieron y mataron a un joven, al que dejaron abandonado en una brecha.

Los hechos ocurrieron a las 15:00 horas de ayer. La víctima es Gilberto Ramírez Figueroa, de 25 años, a quien confundieron con un narcotraficante que trataban de encontrar en Palomas.

Sobre lo ocurrido, el delegado estatal de la PGR, teniente coronel con licencia Juan Figueroa, señaló que ellos no realizaron operativos en ese poblado y que la última vez que estuvieron en el lugar fue dos semanas atrás.

Existe la posibilidad, dijo, de que otras personas hayan utilizado uniformes de la PGR para cometer las referidas irregularidades, y aseguró que si los habitantes del poblado identifican a algunos agentes de esta corporación serán detenidos y consignados.

El vocero de la PJE, Horacio Nájera, aseguró que los responsables del homicidio vestían uniformes de la PGR, y que actualmente realizan los retratos hablados de los responsables, para cotejarlos con los elementos comisionados en la zona.

El presidente seccional de Palomas o Quevedo, Alfonso Vázquez García, dijo en una entrevista por televisión que fueron agentes federales los que sometieron a varias personas y asesinaron a Ramírez dentro de su casa.

Asimismo, expresó que los uniformados se llevaron el cuerpo, el cual fue localizado anoche a las 20:00 horas en una brecha, dentro de un vehículo blanco, a 150 metros de la carretera que comunica con Casas Grandes.

El jefe de la policía seccional, Manuel Enríquez, dijo que fueron agentes federales quienes detuvieron a varios miembros de la familia y que mataron al joven por causas desconocidas.

La Procuraduría de Justicia Estatal envió esta mañana un grupo de agentes para investigar estos hechos. De acuerdo a las primeras investigaciones que realizaron, los agentes federales llevaron al hombre herido a las instalaciones del IMSS para tratar de salvarle la vida sin éxito.

Por otro lado agentes de la PJE detuvieron a 2 hombres que intentaron ejecutar a Julio Rodríguez Rentería, quien presuntamente tiene una deuda con narcotraficantes.

Esa persona fue baleada en dos ocasiones y su cuerpo abandonado en un terreno baldío, donde pudo pedir auxilio y denunciar a los hombres que lo dieron por muerto.

Los supuestos sicarios fueron identificados solamente como Luis y Roberto y los agentes encontraron documentos a nombre de Francisco Vargas Martínez, Angel Martínez, Fernando Vargas y Fernando Rivas, así como pasaportes mexicanos a nombre de Rafaela Aldama y María Teresa Martínez Vargas.