La Jornada 22 de julio de 1998

La negociación con zapatistas no resolverá rezagos en Chiapas: Labastida

Carlos Camacho, corresponsal, La Jornada de Oriente y José Gil Olmos Ť El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) debe pasar de las palabras a los hechos concretos, advirtió el secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa, tras demandar a la dirigencia rebelde ``congruencia'' con el deseo expresado en sus últimos comunicados y sentarse a dialogar para alcanzar una salida política al conflicto en Chiapas.

Por otra parte, durante sendas visitas a Hidalgo y Puebla, el secretario de Estado descartó la presencia del Ejército Popular Revolucionario (EPR) en ambas entidades y aseguró que sus apariciones son esporádicas y meros actos ``propagandísticos'', ya que de un año a la fecha sus fuerzas han disminuido y se localizan sobre todo en Oaxaca y Guerrero, donde un número importante de sus integrantes ha sido apresado.

Luego de firmar los convenios sobre seguridad pública en Hidalgo y Puebla, Labastida Ochoa insistió en separar la solución de los problemas en Chiapas y la reanudación del diálogo con el EZLN, ya que son problemas independientes y el gobierno federal no detendrá la atención de las necesidades sociales de los chiapanecos mientras se reanudan las negociaciones con el grupo rebelde.

El secretario de Gobernación dejó en claro que los ``hechos concretos'' que se le piden al EZLN son, principalmente, sentarse a dialogar y resolver con ``tranquilidad'' los conflictos no sólo en Chiapas sino en otras regiones del país.

El diálogo con los zapatistas no es la solución de los problemas en Chiapas, pues se debe avanzar en resolver los rezagos, independientemente de que se llegue a una solución con el EZLN, manifestó en Puebla.

Antes, Labastida Ochoa estuvo en Pachuca, Hidalgo, donde apuntó que los apoyos y el desarrollo social en Chiapas continuarán porque ``ni Marcos ni nadie lo impedirá'', y subrayó que Sebastián Guillén ``es un personaje que se dedica a hacer comunicados, nada más''.

Agregó que en aquella entidad del sureste mexicano ``vamos a impulsar el crecimiento económico para generar más empleos y mejorar el nivel de vida, y desde luego vamos a apoyar la aplicación de la ley que el gobierno de Chiapas está realizando''.

Labastida Ochoa también se refirió al Ejército Popular Revolucionario. Reconoció que a pesar de que la mayoría de sus integrantes ``están detenidos'', el movimiento todavía ``no está desactivado'', por lo que el gobierno federal lo combatirá ``con toda energía y decisión, dadas sus actividades terroristas''.

Manifestó que ``la capacidad del EPR y su número de miembros es mucho menor a lo que era hace un año; están detenidos buena parte de sus miembros de las dos células más importantes localizadas en los estados de Guerrero y Oaxaca'', dijo en Hidalgo, y al retomar el tema en Puebla aseguró que algunos miembros de ese grupo que fueron detenidos han participado en algunos de los secuestros más importantes realizados en el país.

Según el secretario de Gobernación, de vez en cuando los eperristas realizan actividades propagandísticas al presentarse a algún lugar donde hacen alguna manifestación, pintan paredes o reparten volantes, ``con la intención de hacer ver que son más grandes de lo que realmente son''.

Advirtió que el gobierno federal nunca bajará la guardia en el combate a los grupos armados porque siempre existe el riesgo de que aparezcan otros.

Diálogo sin intermediarios

El diálogo con el EZLN deberá realizarse sin intermediarios para evitar ``protagonismos'' y que sólo se ``quiera salir en fotos'' tan vistosas que algunas personas se sacaron, pues lo importante es trabajar efectivamente y no ``mandarnos tantos mensajes por los medios de comunicación'', sino sentarse a platicar, insistió Labastida Ochoa.

Aclaró que la próxima visita que realice el presidente Ernesto Zedillo a Chiapas no será en respuesta a una declaración, ``mucho menos a una declaración de este tipo'', pues el Ejecutivo federal tiene la ``convicción'' de solucionar todos los problemas que se registran en ese lugar y su presencia es para que los programas marchen bien y aceleradamente.

Apuntó que el gobierno mexicano nunca le solicitará a la Organización de Naciones Unidas su intervención en el conflicto chiapaneco, pues la ``internacionalización'' del conflicto representaría la incapacidad del país para solucionar sus problemas. ``Sería una conclusión muy triste'' pedir ayuda a algún organismo extranjero. La Comisión de Concordia y Pacificación regula la situación y ``nos vamos a atener a ella''.