Resueltos, 5 de los 6 factores de inestabilidad, aseguró el secretario
Angélica Enciso Ť El secretario de Hacienda y Crédito Público, José Angel Gurría, advirtió que un retraso en la aprobación de las reformas al sistema finan- ciero, incluida la conversión a deuda pública de los pasivos en poder del Fobaproa, puede ser ``el único factor'' que cause una crisis económica a finales de este sexenio.
Aseguró que el gobierno federal ha resuelto cinco de seis factores que en esta administración podrían causar una crisis y sólo queda pendiente la reforma del sistema financiero.
Tradicionalmente, explicó, las crisis de fin de sexenio han sido causadas, primero, por la falta de disciplina fiscal, lo que ocasionaba que se recurriera al endeudamiento interno o externo; la segunda causa es la deuda pública, que actualmente representa 27 o 28 por ciento del PIB; aun si los pasivos de Fobaproa se incluyeran llegaría a 40 por ciento, una proporción ``muy baja'' entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos, cuya deuda pública es de 70 por ciento en promedio.
El tercer factor que Gurría Treviño mencionó es que México era un país monoexportador, ya que dependía exclusivamente del petróleo; sin embargo, se ha convertido en el décimo país exportador, más de 80 por ciento de sus ventas corresponden a manufacturas y ``ya no estamos sujetos a la vulnerabilidad''. Agregó que otra razón ha sido la falta de ahorro, que ya está en crecimiento gracias a las Afore y a la nueva Ley del Seguro Social, por lo que el ahorro interno puede tener un crecimiento de tres por ciento al año.
El quinto factor de las crisis recurrentes, según Gurría, fue haber mantenido tipos de cambio insostenibles, lo cual agotó las reservas. Ahora el régimen bancario es flexible y ello ha permitido tener las reservas más altas en la historia de México: cerca de 30 mil millones de dólares.
Al participar en la 15 asamblea general ordinaria del Consejo Nacional Agropecuario, el funcionario dijo: ``No es motivo de celebración, pero quisiéramos dedicar diez u once por ciento del PIB --lo que terminará costando el Fobaproa--, a obras sociales, a ayudar a crear infraestructura, más salud, más servicios, más educación. El hecho es que ante la crisis se actuó con oportunidad''.
Agregó que dejar que se colapsara el sistema bancario hubiera sido ``cinco o seis veces más caro, sólo para fines de costo fiscal y para el gobierno. Imagínense sin bancos a una economía que es la decimocuarta del mundo. Obviamente el costo no hubiera sido fiscal; habría sido un costo enorme para toda la sociedad, para toda la economía. El costo más importante hubiera sido en términos de la pérdida de confianza de propios y extraños durante mucho tiempo''.
Destacó que a través de Fobaproa se evitó la quiebra de bancos y se propiciaron la fusión, la consolidación ordenada y el reforzamiento del sistema bancario sin que un solo mexicano haya perdido un centavo de sus depósitos o de sus ahorros. ``Eso nos permitió salir de la crisis en un periodo relativamente breve, dada la importancia y la profundidad de la crisis''.
Mencionó que los países asiáticos están aprendiendo de México la lección de ``cómo manejar de frente, con oportunidad y con valor una crisis, cómo evitar más daño a su economía, porque a diferencia de nuestro país, ellos no enfrentaron a tiempo el problema de los bancos y al no hacerlo provocaron una multiplicación de los costos del mercado''.
Ante empresarios agrícolas, Gurría Treviño aseveró que es imperativo reforzar la regulación y la supervisión bancaria; ``debemos tener instituciones financieras más sólidas, afinar el sentido de los reguladores y de las autoridades para que no nos vuelva a suceder una crisis bancaria''. Insistió en que el costo del rescate fue ``una especie de seguro'' para evitar que incurriéramos en ``un costo mayor no sólo para los ahorradores, sino para todos los mexicanos''.
Advirtió que la aplicación de ``medidas congruentes'' será decisiva para evitar las crisis de fin de sexenio que han caracterizado al país desde hace dos décadas. ``Con frecuencia se nos pregunta qué vamos a hacer para evitarla, La respuesta es voltear hacia atrás, ver por qué tuvimos crisis y preguntarnos hoy si las razones que dieron lugar a ello en el pasado hoy han sido resueltas y legisladas''.
Gurría Treviño aseguró que el impacto de factores externos en la economía nacional ha sido ``relativamente menor'', pues durante el primer trimestre el PIB mantuvo una tendencia positiva al aumentar 6.6 por ciento; asimismo, el incremento de la actividad económica se ha reflejado en la creación de empleos, ya que hasta el primer semestre se habían creado 210 mil plazas de trabajo, y la tasa de desempleo se ubicó en 3.20 por ciento, contra 3.86 del año pasado.
Asimismo, dijo que la inflación tiende a bajar y las exportaciones no petroleras muestran un ``notable dinamismo'' con una tasa de 16 por ciento durante los primeros cinco meses del año. Las finanzas públicas, mencionó, tuvieron un ligero superávit en el primer trimestre, de mil 719 millones de pesos.
Agregó que esta información señala que éste ``será un buen año para la economía mexicana a pesar de la volatilidad y la incertidumbre que prevalecen en el ámbito internacional. Esperamos que el crecimiento real del PIB sea de entre 4.5 y cinco por ciento, que se generen más empleos y que tanto las tasas de interés como la de inflación mantengan su tendencia decreciente''.