Aclaración de Orso Arreola sobre el texto Usigli y Paz en París
Señora de mi consideración y respeto: Mucho le agradeceré la publicación de esta carta.
En mi calidad de autor del libro El último juglar. Memorias de Juan José Arreola de próxima aparición en la editorial Diana, me permito hacer una aclaración respecto al texto Usigli y Paz en París, publicado por ustedes el día 2 de julio del presente año, que motivó al señor Sheridan a escribir una desafortunada y patética carta en defensa de Octavio Paz.
El hecho por todos conocido de que Octavio Paz militó y realizó diversas actividades políticas en colaboración con comunistas y republicanos, tanto de México como de España, es algo que pertenece ya al dominio público. El propio Paz se encargó de hablar y de escribir ampliamente sobre este asunto, que lo relacionó en más de una ocasión con anécdotas poco felices como aquella en la que le tiró un golpe a Pablo Neruda, golpe que por cierto fue a dar a la mejilla del poeta Enrique González Martínez cuando estaban reunidos en céntrico café de la ciudad de México, y que tuvo que ver con la antología de poesía Laurel, en la que ni Neruda ni León Felipe quisieron aparecer por sus diferencias ideológicas con Octavio.
Para ser comunista o republicano no se necesitaba tener una credencial con fotografía en la mano. Octavio Paz hizo un trabajo político de primer orden: Asistió a congresos, ofreció recitales y conferencias, publicó artículos y, por si todo esto fuera poco, escribió el poema ¡No pasarán! Todo esto, señor Sheridan, y muchas cosas más, las hizo Octavio para apoyar y defender la causa de sus amigos republicanos y comunistas.
Decir que Octavio Paz estuvo inscrito en el Partido Comunista es una manera, una forma de decir las cosas, a la que mi padre no le tiene miedo, y para Juan José Arreola, Octavio Paz fue algo más que un militante, que un simpatizante. La palabra inscrito horroriza al señor Sheridan, la considera una blasfemia. Seguramente la palabra simpatizante es la más adecuada por su tibieza, por su indefinición. Creo que Sheridan tiene razón, tal vez la palabra simpatizante, que en política a la mexicana es vaga e imprecisa, sea la más conveniente para definir una conducta política.
Lo que debe importarnos es qué ideología tenía Paz en 1936 y 1937, qué amigos tenía y qué ideas profesaba. Juan de la Cabada y José Revueltas colaboraron con Octavio en sus revistas literarias, ¿no le da horror señor Sheridan?
No es un asunto de delirios, si así fuera usted sería ya un enfermo grave, su carta es una credencial que lo acredita como esquizofrénico.
Sheridan ignora que Juan José Arreola y Octavio Paz se encontraron en París en 1946 y sostuvieron largas, intensas conversaciones sobre la Guerra Civil Española y los poetas e intelectuales refugiados en Francia y trasterrados a México.
Sheridan ignora que mi libro está dedicado a la vida y obra de Juan José Arreola, y que su amistad con Paz es tratada de manera anecdótica, a diferencia de la amistad que tuvo mi padre con otros escritores e intelectuales como Juan Rulfo, Antonio Alatorre, Xavier Villaurrutia y Carlos Pellicer.
Por todo lo que ignora Sheridan, propongo que se le mande de embajador a Transilvania, para que deje de chupar sangre mexicana y olvide un poco, aunque le cueste trabajo, sus aspiraciones de lacayo.
Orso Arreola
PD: El libro El último juglar. Memorias de Juan José Arreola hace referencia, en varios pasajes, al poeta Octavio Paz, por lo que le recomiendo al señor Sheridan su lectura.
Preocupan acciones oficiales en Chiapas
Señora directora: Agradecemos la publicación de la siguiente carta: Doctor Ernesto Zedillo Ponce de León, presidente de México; licenciado Francisco Labastida Ochoa, secretario de Gobernación; licenciado Roberto Albores Guillén, gobernador de Chiapas:
Los abajo firmantes, ciudadanos y ciudadanas del estado de Yucatán, nos dirigimos a ustedes para expresarles nuevamente nuestra preocupación por las acciones que los gobiernos, tanto federal como estatal, llevan a cabo en Chiapas.
Tal parece que, en vez de diálogo directo, el gobierno busca el enfrentamiento directo y de paso golpea a quienes han apostado a la paz como vía y como lugar de llegada.
Sumamente preocupados por una política que parece encaminarse al etnocidio, les reiteramos las exigencias que como sociedad civil les hemos planteado, a saber: 1) Cumplimiento de los Acuerdos de San Andrés; 2) Retiro inmediato del Ejército Mexicano de las comunidades indígenas; 3) Liberación inmediata de los presos de conciencia, entre los que se encuentra nuestro compañero Luis Fernando Menéndez Medina; 4) Desmantelamiento de los grupos paramilitares; y, 5) Alto a las agresiones contra los municipios autónomos.
Atentamente
Antonio Peraza, Pía Gómez, María Luisa Medina, Claudia Martínez, José Rafael Menéndez, César Valera, Edelmiro Padilla, Isauro Kanxoc, Wilberth Flores, Adelaida Salas Salazar, Aída Puga de Padilla y 30 firmas más.
Homenaje a José de Molina
Señora directora: Con asombro y pena, el día de hoy, en el periódico que usted dignamente dirige, me enteré del fallecimiento inesperado --dado su vitalidad-- de mi amigo José de Molina; cantautor sonorense comprometido con las causas sociales y políticas de los obreros y clases populares más jodidas de México y el mundo.
Me uno a la pena que embarga a su familia, y a José de Molina, le despido rindiéndole un homenaje por sus muchos años dentro el canto de protesta, que a tantos nos sacudió la conciencia. Con profunda tristeza:
Raymundo Colín (Ajolote), cantautor y escritor nezahualcoyotlence.
Denuncia anomalías en reclusorios
Señora directora: Mucho agradecería la publicación de la siguiente carta dirigida a: Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, jefe de Gobierno; Leonel Godoy, subsecretario de Gobierno; Carlos Tornero Díaz, director de Reclusorios; Gastón Luque, contralor general.
Estimados funcionarios: El día miércoles 24 de junio el Consejo Técnico Interdisciplinario (CTI) del Reclusorio Femenil Norte, me sancionó suspendiéndome por un mes el derecho a visita a mi interna; al entrevistarme con la directora me informó que se debía a reportes de trato despótico de mi parte hacia los custodios, lo cual negué rotundamente y ofrecí probar que yo he sido el agredido por ellos. Las pruebas fueron enviadas el martes 30 y, pese a ello, al día siguiente la sanción fue ratificada. Deseo comentarles algunas irregularidades de esta sanción:
1. No existe en el Reglamento de Reclusorios artículo en el que se le den atribuciones al CTI para sancionar a alguien externo como lo es su servidor; la única situación prevista es cuando la suspensión es motivo de una sanción a la interna, no siendo este el caso, ya que la interna ha tenido una conducta excelente que incluso fue objeto de un reconocimiento del CTI.
2. En ningún momento se ha hecho una notificación escrita de la sanción o de la ratificación posterior, ni a mí ni a la interna, además que se nos ha negado la posibilidad de que seamos escuchados por el CTI, facultad que otorga el reglamento en su artículo 150 y sin lo cual no puede entrar en vigencia la sanción, ya que ésta afecta a la interna.
3. El que el CTI se niegue a valorar las pruebas que aporté para demostrar mi dicho e incluso exista un especie de empeño en que cumpla la sanción a toda costa; además que se ignoren las intimidaciones que he recibido del licenciado Raúl Domínguez, quien dijo a mi interna que iba a ser sancionado con la suspensión de la visita, lo que ya fue cumplido; y la más reciente, al decirle que ``de seguir con esa actitud, la sanción podría ser definitiva''.
4. Que a pesar que ha sido solicitado al CTI, se nieguen a investigar y en su caso a sancionar a los custodios que han mentido y a los funcionarios que con el conocimiento de que la sanción se basó en reportes falsos insistan en que la sanción sea cumplida.
5. Esta sanción no sólo estaría desacatando el Reglamento de Reclusorios sino que me priva de garantías que la Constitución otorga.
Como podrán darse cuenta, el procedimiento tiene muchas irregularidades, por lo que solicito su intervención para que la sanción sea levantada, se investiguen los hechos a fondo y tenga la garantía de que no habrá más represalias.
Juan Meza C.
Precisiones a una nota sobre los programas contra las lluvias
Señora directora: En relación con la nota publicada el 20 de junio del presente año en la página 41 del diario a su digno cargo, titulada ``Carecen delegaciones de programas contra desastres por lluvias: panista'', me permito hacer las siguientes consideraciones:
1. A partir del mes de mayo, la delegación de Cuajimalpa, a través de la subdelegación Jurídica y de Gobierno, llevó a cabo notificaciones a 426 familias ubicadas en zonas de alto riesgo.
2. Personal de la coordinación de Protección Civil impartió un curso, con el fin de orientar sobre riesgos en época de lluvias a quienes viven en zonas de alto riesgo.
3. Trabajadores de la subdelegación de Obras y Servicios Públicos limpiaron barrancas, así como cauces de ríos para evitar derrumbes y deslaves.
4. En la delegación se han destinado siete lugares como refugios temporales para brindar asistencia a quienes, por su voluntad, no hayan tomado las precauciones correspondientes y sufran algún accidente.
5. Los refugios se encuentran en: Gimnasio Chimalpa, Av. Camino al Tecnológico s/n, San Pablo Chimalpa. Gimnasio Morelos, Av. José María Castorena, San José de los Cedros. Centro de Desarrollo Social Acopilco, Leandro Valle s/n, San Lorenzo Acopilco. Centro de Desarrollo Social Zentlápatl, Puerto México s/n, Zentlápatl. Centro de Desarrollo Social La Navidad, Av. San José de los Cedros, Navidad. Centro de Desarrollo Social San Mateo Tlaltenango, Av. Mina s/n, San Mateo Tlaltenango.
Isaura Hernández Luna, coordinadora de Comunicación Social, delegación Cuajimalpa de Morelos.