Djorkaeff: ``ahogamos al país de referencia''

Marlene Santos A., enviada, París, 12 de julio Ť ``¡Ya está, lo hemos logrado! Es lo que todos deseábamos'', expresó entusiasmado el delantero Zinedine Zidane, autor de los dos goles que abrieron el camino para la victoria de Francia y la conquista del título del Mundial.

``Creo que hasta mañana, cuando veamos a toda la gente que nos ha animado, no terminaremos de creer. Tenía muchas ganas de marcar un gol y así devolverles a mis compañeros de equipo todo lo que me aportaron durante el campeonato; gracias a Dios pude anotar un primer gol que sirvió para desbloquear un partido que dominábamos sin claridad''.

Los jugadores de Francia, quienes recibirán por este logro entre 2.5 y 3 millones de francos, se mostraron felices con la victoria. Youri Djorkaeff indicó que no tenía palabras para describir sus sentimientos, ``lo resumiría en orgullo. El equipo llegó por primera vez a una final de Copa del Mundo y hemos sabido ir por ella ante un rival con el que muy pocos nos daban probabilidades''.

Djorkaeff aseguró que mentalmente fueron superiores ya que pudieron entrar a la cancha con serenidad y concentración sobre el juego que desplegarían. ``Hemos jugado una final perfecta, hemos ahogado a Brasil, que es el país de referencia. Lo que nos faltó durante la competición fue la comunicación con el público, al que sólo teníamos acceso durante los partidos. Mañana, cuando bajemos por la avenida Campos Elíseos, estaremos con toda Francia'', dijo el jugador, un poco en alusión a la frialdad de los espectadores más próximos a la cancha; agregó que la verdadera cita con la afición será este lunes, ``y ahí estaremos''.

David Trezeguet apuntó que llegó la hora de la celebración tras dos meses de fuerte trabajo. ``En el festejo pensé en mi familia, que estaba en el estadio, y lloré, porque ganar un Mundial organizado por Francia no es cosa de todos los días... mis amigos argentinos me llamaron antes para decirme que todo el mundo nos apoyaba para derrotar a Brasil y ganar la Copa'', indicó.

El defensa Marcel Desailly comentó que pasó del dolor y decepción por su expulsión, a la locura de sentirse ``el hombre más feliz del mundo. Quedará grabada en la mente de todos la imagen de Aimé Jacquet en nuestros hombros y con la Copa en sus manos''.