La Jornada 1 de julio de 1998

Buscaremos unir, no fracturar al PRI: Corriente Renovadora

David Aponte Ť Ayer nació la Corriente Renovadora (CR) del Partido Revolucionario Institucional con tres postulados fundamentales: autorreforma del partido, autonomía política frente a la Presidencia, gobiernos estatales y municipales, y apoyo condicionado a los gobernantes surgidos de las filas del tricolor, así como la elección democrática interna de los aspirantes a puestos de elección popular.

``No hablamos de meros arreglos cosméticos, superficiales o aparentes, que finjan cambiar algo para que en el fondo todo siga igual. El priísmo necesita del cambio para recuperar la iniciativa política y que vuelva a ser el impulsor de las reivindicaciones sociales''.

La reforma del PRI es ``impostergable'' de cara a la desigualdad y pobreza que vive la nación y frente a las presiones externas, definió.

El vocero de la CR para el mes de julio, Sergio García Ramírez, dijo que no existe el peligro de una ruptura al interior del partido con el nacimiento de la nueva corriente de opinión. ``Somos militantes del PRI. Creemos razonadamente en la declaración de principios de nuestro partido. Por eso hemos propuesto cumplir la declaración del partido. No nos proponemos fracturarlo ni debilitarlo, sino unirlo y fortalecerlo en la medida de nuestras propias fuerzas'', manifestó.

Los integrantes de la CR celebraron una breve reunión en las instalaciones de la Fundación Colosio, para dar a conocer sus motivos y propuestas de reformas al PRI. Antes de las 13 horas llegaron Agustín Basave, David Ibarra Muñoz, Gabino Fraga, Luis Dantón, Rodolfo Echeverría, Jarmila Olmedo y Julio Zamora, entre otros militantes priístas.

En el patio de la casona de Polanco, Dantón Rodríguez dio lectura a uno de los documentos que justifican el nacimiento de la nueva corriente. México vive días difíciles y está sujeto a inadmisibles presiones externas y a conflictos internos capaces de malograr el proyecto histórico de nación, comenzó.

El país requiere un partido nacionalista y popular dispuesto a acelerar el proceso democrático y combatir la injusticia social en forma decidida, un instituto político capaz de luchar por preservar la identidad nacional y el respeto a los derechos de las minorías, continuó.

``No partimos de cero. Al lado de errores y deficiencias, excesos y corrupciones -que no negamos y que tenemos que corregir de manera radical- hay un saldo positivo: la herencia histórica de la Revolución Mexicana, importantísimo componente de nuestra identidad, es la plataforma de lanzamiento de los cambios profundos exigidos por el país para ingresar así, en serio y a fondo, a los ámbitos de una democracia en verdad modernizadora de la política y de la economía y de nuestra vida social y cultural'', expuso.

Dantón Rodríguez agregó que la sociedad mexicana ha cambiado en los últimos años. Entonces, el PRI tiene que cambiar, porque no puede ofrecer viejos métodos y rigideces propias de una pesada burocracia interna, que no permiten el debate y la posibilidad de tomar decisiones en los momentos exigidos por las circunstancias.

En ese contexto, explicó que la CR propone una ``autorreforma'' que haga posible un partido moderno y renovado, con autonomía política frente a la Presidencia y los gobiernos estatales y municipales, ``No podemos ser la retaguardia aplaudidora o el remolque de los gobiernos. Aquí está la clave: autonomía del PRI'', lanzó.

El priísta abordó en su discurso otro de los objetivos de la nueva corriente: elección democrática de los aspirantes a puestos de representación popular. Los métodos deben perfeccionarse para que los militantes, los priístas, elijan a sus candidatos. ``Ya elegirá la sociedad a sus gobernantes'', expresó.

La próxima asamblea general de delegados -fecha por definir- constituye la oportunidad, irrepetible y crucial, para iniciar la reforma democrática del partido, agregó.

Posteriormente, García Ramírez detalló en forma breve el trabajo y la organización de la CR. La labor será pública, entre los correligionarios y a la vista de la sociedad, con fundamento en los documentos básicos del partido -la declaración de principios, programa de acción y estatutos-. ``No tenemos jefes en la corriente. Contamos con una mesa de coordinación colectiva'', manifestó.

En cuanto a las propuestas, señaló que es necesario el cumplimiento de la declaración de principios y que el programa de acción ponga énfasis en que la inserción de México en la globalización no afecte la defensa de la soberanía nacional; que la política económica sea ajena a viejos y nuevos dogmas y esté orientada a lograr el bienestar social de los mexicanos, y que haya una reivindicación de la preeminencia de la política en la conducción del país.

Los priístas mostraron los fundamentos legales mediante los cuales tienen derecho a fundar la CR. Luego, mencionaron que buscarán una reunión con el dirigente nacional del partido, Mariano Palacios Alcocer, para dar a conocer sus objetivos.

Durante un breve intercambio de preguntas, hablaron de la necesidad de que el partido tome su distancia del Ejecutivo como parte fundamental de la reforma interna. David Ibarra Muñoz dijo que ``la cercanía o lejanía'' entre el partido y los gobernantes no es una situación estática, no es inamovible, tiene que modificarse conforme avanza la sociedad.

``Pero si queremos modernizarnos, hacernos democracia, tenemos que ir avanzando en invertir esa relación. El partido que gane las elecciones debe guardar la distancia para poder exigirle (a los gobernantes)'', manifestó.