La Jornada 22 de junio de 1998

Si no llueve habrá un desastre en el sector ganadero, afirma la CNG

Angélica Enciso L., enviada, Zacatecas, Zac., 21 de junio Ť El presidente saliente de la Confederación Nacional Ganadera (CNG), César González Quiroga, dijo que la sequía se ha convertido en un problema nacional para el sector, y que si en dos meses más no se regularizan las lluvias, en las regiones ganaderas habrá un ``desastre'' en el sector pecuario. A esta crítica situación, advirtió, se suma el incremento de importaciones de carne de bovino provenientes de Estados Unidos que se ha dado en los últimos años.

Previo al inicio de trabajos de la 62 asamblea general ordinaria de la CNG, donde los principales temas a tratar serán, entre otros, las importaciones de carne y el TLC, el dirigente precisó que tradicionalmente la sequía se había presentado en los estados del norte y centro del país, pero que desde el año pasado se han visto afectadas regiones como el trópico y la Huasteca, donde los más dañados son Veracruz y Tabasco; sin embargo, a escala nacional Zacatecas ha sido la entidad que más ha resentido el fenómeno.

En conferencia de prensa explicó que en Tabasco, antes de este año, los problemas para el sector ganadero eran el exceso de agua, pero desde el año pasado la sequía ha azotado la región, por lo que las pérdidas de ganado han sido altas, aunque dijo que aún no es posible cuantificarlas.

En este sentido precisó que a nivel nacional la organización no tiene información exacta de las pérdidas por la sequía, pero que en ganado bovino en los últimos años no ha existido un crecimiento, y el hato ganadero es de aproximadamente 28 millones de cabezas, aunque en otros sectores, como leche, porcicultura y caprinos, sí se ha dado un crecimiento.

En Zacatecas, señaló por su parte el dirigente de la Unión Regional Ganadera, Silverio López, hace casi un año que no llueve, ya que desde julio pasado se dio un periodo de sequía al que se sumaron tres meses de heladas, de diciembre a febrero, y casi cuatro meses más de sequía, por lo que la situación del ganado bovino es difícil, pues además de que se debe sacrificar antes de tiempo, su valor ha bajado en más de 50 por ciento, al pasar de 8 pesos el kilogramo en pie, a 5 pesos.

González Quiroga agregó que ante el panorama que ha dejado la sequía los productores ``están irritados'' por las pérdidas que han tenido, por la falta de forrajes para alimentar a los animales y porque la tierra de muchas regiones tardará años en recuperarse.

Sostuvo que los ganaderos debieron tomar medidas, como sacrificar ganado -sobre todo al más viejo- y se desteta a los becerros para proteger a las vacas. Explicó que la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (Sagar) ha destinado cerca de 280 millones de pesos para apoyar a los productores ante este fenómeno.

Destacó que otro problema igual de importante que la sequía son las altas importaciones de carne de bovino que se han dado en los últimos años, por lo que se buscarán soluciones para detenerlas.

Entre las acciones que consideró se deben tomar urgentemente está la aplicación de normas para esas importaciones, la mayor parte de las cuales se hace en condiciones de dumping.

Recordó que en 1995 las importaciones de carne de bovino fueron por 36 mil toneladas, en 1996 por 120 mil y el año pasado llegaron a las 250 mil toneladas. Además, los productores estadunidenses prevén que este año llegarán a las 500 mil toneladas, agregó.

Explicó que la Sagar y las secretarías de Salud y Comercio no se han puesto de acuerdo para el establecimiento de esa normatividad que permitiría que al mercado nacional entrara carne de mejor calidad y no de desecho de aquel país.

Aseguró que la falta de esa normatividad favorece las importaciones y que la aplicación de la norma de sanidad no se hace eficientemente, pues no existe la vigilancia adecuada por parte de las autoridades de Sagar y las aduanas.

Destacó que se requiere la adopción de una norma de etiquetado para que en el producto que ingrese se defina el tiempo de congelamiento y la clase de carne de que se trata, además de la norma sanitaria para fijar la calidad del producto.

Al contrario de lo que ocurre en México, la vigilancia que Estados Unidos hace del producto que ingresa a ese país es sumamente estricta, dijo.

Aunque consideró que ``el gobierno tiene interés y capacidad, no da soluciones''. Dijo que en Secofi ``hay rechazo para hacer esas normas con agilidad'' y que la Ssa también debe involucrarse.

La Confederación Nacional Ganadera, aseveró, prevé el establecimiento de una demanda en contra de las empresas estadunidenses que realizan importaciones en condiciones dumping.