EXTRAÑA MUERTE DE DECENAS DE AVES EN LA COLONIA ROMA

Elia Baltazar y Ricardo Olayo Ť Literalmente clavaron el pico en el concreto 70 palomas torcacitas, que aquí se conocen como tórtolas. Todavía no se determina la causa que provocó su muerte: si fue por la contaminación, por que alguien utilizó un plaguicida funesto para ellas, por envenenamiento o, tal vez, por tristeza. Por lo pronto, el secretario del Medio Ambiente del gobierno capitalino, Alejandro Encinas, adelantó que esta vez la contaminación nada tuvo que ver y presume, en cambio, que pudo tratarse de intoxicamiento por plaguicida, según declaró.

Descubiertas por los vecinos la mañana de ayer frente al número 384 de la calle de Colima, en la colonia Roma, algunas de las aves fueron trasladadas a la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional Autónoma de México y al Centro de Investigaciones Biomédicas del Instituto Politécnico Nacional, a fin de determinar la causa del deceso, dijo el funcionario.

Hubo una fumigación en casa contigua

Leonor Guerrero Sentecal, propietaria de la casa donde cayó el mayor número de pájaros, no descartó la posibilidad de la intoxicación, pues comentó que en días pasados fumigaron una casa contigua a la suya, lo cual quizá contaminó el alimento de las aves. Por lo demás, dijo, ``desde hace 15 años los vecinos acostumbramos a darles granos''.

También el presidente de la Asociación de Portección de Aves Urbanas, Francisco Beranzuza, descartó que la muerte de las tórtolitas se debiera a la contaminación ambiental y destacó el cuidado que los vecinos de la Roma siempre han mostrado por las especies del lugar. No obstante, habló de la posibilidad de que alguien las haya envenenado, dado que hace 8 años, en las Lomas de Chapultepec, murieron gorriones ingleses a causa de envenenamiento.

Por su parte, la directora del Centro de Salud Anastasio Garza Ríos, Leticia Hernández, quien participará en el análisis de las posibles causas de la muerte de las torcacitas en el Laboratorio Nacional de Salubridad, dijo que a primera vista se aprecia que las aves fallecieron por envenenamiento.

Enterado del acontecimiento, durante una gira por la delegación Magadalena Contreras, en la que acompañó al jefe de gobierno capitalino, Cuauhtémoc Cárdenas, el secretario de Medio Ambiente aclaró que los contaminantes en la zona de la colonia Roma no mostraron altas lecturas y que, al contrario, se mantienen dentro de la norma.

Encinas recordó que durante la regencia de Manuel Camacho también hubo pájaros muertos y el fenómeno, dijo, equivocadamente se relacionó con la mala calidad del aire, cuando en realidad habían consumido plaguicida, según lo establecieron los estudios.

Según informes del gobierno capitalino, los primeros datos indicaron que las aves no fallecieron al vuelo, sino al salir de un predio ubicado en la azotea del número 382 de la calle Colima, donde se concentraban diariamente para pernoctar en sus nidos, que ayer quedaron vacíos.