La Jornada 15 de junio de 1998

El Consejo de la Judicatura aceptó pagar más caro un inmueble en Puebla

Jesús Aranda Ť En una extraña operación inmobiliaria, el Consejo de la Judicatura Federal - mediante su presidente, el ministro José Vicente Aguinaco Alemán- cerró la compra de un inmueble en la ciudad de Puebla el 24 de febrero de 1998, sobre el cual existen dos avalúos elaborados por dos delegaciones diferentes de la Comisión de Avalúos de Bienes Nacionales (Cabin), los cuales, a pesar de haber sido suscritos con una semana de diferencia, presentan una diferencia de casi 7 millones de pesos. La compra se realizó con base en el avalúo más alto.

De acuerdo con documentación en poder de La Jornada, el primer avalúo fue hecho por la Cabin delegación Veracruz, donde se recibió la solicitud correspondiente para fijar el valor del inmueble el 21 de octubre de 1997 y estableció un costo máximo de 21 millones 473 mil 437 pesos; mientras que la misma Cabin, en sus oficinas centrales de la ciudad de México, recibió la solicitud el 23 de octubre pasado y anotó un valor comercial máximo de 14 millones 882 mil 580 pesos.

Además de esta diferencia, el avalúo más alto presenta una irregularidad, pues sólo fue signado por dos representantes -por parte de la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo, y por el Colegio de Ingenieros Civiles y de Arquitectos-; y el segundo, que sí tiene las tres firmas que establece la ley -de la Contraloría, del colegio de ingenieros y del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras)- es el que estableció un costo más bajo y el que finalmente no fue tomado en cuenta.

Al respecto, el artículo 10, fracción II del Reglamento de la Cabin ordena que cualquier avalúo de la dependencia debe llevar las tres firmas señaladas. Cosa que no ocurre con el que sirvió de base para que el Consejo de la Judicatura Federal comprara el inmueble ubicado en Hermanos Serdán número 2, colonia Real del Monte, en la ciudad de Puebla, Puebla.

De acuerdo con fuentes especializadas en la materia y funcionarios del Poder Judicial Federal consultados al respecto, es inexplicable que el Consejo de la Judicatura Federal haya adquirido un inmueble en esas condiciones. No sólo porque resulta extraño que haya dos avalúos tan diferentes sobre un inmueble y con unos cuantos días de diferencia, o por el hecho de que la Cabin no haya notificado al consejo sobre al avalúo que ofrecía un costo menor, sino por el hecho de que este último no hubiera negociado un precio más favorable para la adquisición del inmueble, máxime que, por lo regular, este tipo de pagos se hace en una sola entrega, lo que permite mayor margen de negociación.

El 16 de abril pasado, el Poder Judicial de la Federación anunció un recorte en su presupuesto de 105 millones de pesos para este año (es decir, 2.2 por ciento del presupuesto autorizado por la Cámara de Diputados), no obstante, llevó a cabo una operación como la descrita por un equivalente a la quinta parte del presupuesto que se decidió disminuir como una forma de ``participar en el esfuerzo nacional por racionalizar gastos ante la inevitable disminución de ingresos a que lleva la baja en los precios del crudo''.

Llama la atención cómo el Consejo de la Judicatura Federal, órgano encargado de la administración de todos los tribunales y juzgados del fuero federal del país, llegó a la compra de ese inmueble que desde un principio presentó características tan peculiares.

Así, el 21 de octubre pasado la Cabin en su delegación Veracruz, recibió una solicitud de parte de Ramón López Rubí, delegado regional del Infonavit. La Cabin respondió el 3 de noviembre de ese año y concluyó que el inmueble tenía un valor máximo de 21 millones 473 mil 437 pesos, desglosados de la siguiente forma:

Terreno: un millón 399 mil 502 pesos; construcción -edificio inteligente con planta baja y dos niveles- 18 millones 304 mil 855; e instalaciones y mobiliario, un millón 769 mil 079 pesos.

El segundo avalúo se originó en la solicitud recibida el 23 de octubre por la Cabin en el Distrito Federal, esta vez, solicitado por el Banco de Comercio Exterior. El avalúo fue emitido el 14 de noviembre de ese año: el área de construcción era la misma, 3 mil 016 metros cuadrados, pero le dieron un valor al terrreno de un millón 780 mil 435 pesos; a las construcciones 10 millones 238 mil 504 pesos; a obras complementarias 2 millones 102 mil 862 pesos, y al mobiliario 760 mil 779. Un valor total de 14 millones 882 mil 580 pesos.

Además, el avalúo de la delegación en Veracruz contaba únicamente con los dos firmas citadas, a diferencia del otro evalúo que sí cumplía con las tres firmas estipuladas en la ley. Sin embargo, ninguno de los dos interesados en el inmueble, ni el Infonavit ni el Banco Nacional del Comercio Exterior prosiguieron las negociaciones con la Inmobiliaria Zona Esmeralda, SA de CV, representada por Jesús González Nava.

Así, el 24 de febrero de este año se cerró el trato por conducto del ministro José Vicente Aguinaco Alemán, presidente de la Suprema Corte y del Consejo de la Judicatura Federal por un total de 21 millones 271 mil 101 pesos. ``Importe que la parte compradora paga a la parte vendedora al momento de la firma de esta escritura'' ante el notario público número 56 en el Distrito Federal Eduardo A. Martínez Urquidi.