Ya hay estrategia para un ``contacto directo'' con el EZLN: Labastida
José Gil Olmos, Jesús Aranda y Víctor Ballinas Ť Emilio Rabasa Gamboa, coordinador para el diálogo en Chiapas por el gobierno federal, consideró que la renuncia de Samuel Ruiz García a la Comisión Nacional de Intermediación (Conai) y la desaparición de ésta no es un triunfo para el gobierno. ``Tampoco motiva la descomposición del panorama en Chiapas'', aseguró.
Por su parte, el secretario de Marina, José Ramón Lorenzo Franco, señaló que con la dimisión del obispo de San Cristóbal de las Casas y la desaparición de la Conai la situación en Chiapas ``va por buen camino, porque al hacerse a un lado grupos que interferían en ocasiones, podremos dar pasos gigantes en mejorar las condiciones de vida en esos lugares''.
En tanto, el secretario de Desarrollo Social, Esteban Moctezuma Barragán, eludió comentar su posición respecto a la desaparición de la Conai. Sin embargo, manifestó que la alternativa para el conflicto chiapaneco es que todo el país debe tener una conciencia muy clara de que el desarrollo social requiere un compromiso permanente en materia de generación de oportunidades, de ingresos, de justicia y de empleo en todo el país y donde más se requiere, como pueden ser los estados del sureste, en particular Chiapas.
Desmentidos
Rabasa sostuvo que el modelo de mediación al que respondía la Conai ya estaba ``bastante agotado'' desde hacía algún tiempo, y que eso lo reconoció el propio Samuel Ruiz. Por ello, insistió en la necesidad de contar con un nuevo marco jurídico para el diálogo de paz en Chiapas, como lo sugirió a la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa), que tenga como criterios prioritarios la funcionalidad y la eficiencia. Empero, aceptó que el obispo ``era una pieza clave para la solución del conflicto en Chiapas''.
Antes criticó en conferencia de prensa el hecho de que el obispo Ruiz García habló de la desaparición de la Conai y de su renuncia en la homilía en la catedral de San Cristóbal de las Casas. ``Encuentro muy desafortunado, por decir lo menos, que se utilice el púlpito para un pronunciamiento de tipo político y respecto de un organismo civil. La liturgia merece el respeto de todos, máxime cuando se cuenta con canales de expresión expeditos y alternos'', manifestó el coordinador oficial para el conflicto chiapaneco.
Cuestionó la validez de la expresión del prelado respecto a que el gobierno se ha desistido del camino del diálogo en Chiapas ``al ejecutar unilateralmente lo acordado'' en San Andrés. En ese sentido, Rabasa aseveró que el obispo ``ocultó'' a sus feligreses los esfuerzos reiterados del gobierno por dialogar con el EZLN y las invitaciones que le hizo el presidente Zedillo para participar en el envío de la iniciativa sobre derechos y cultura indígenas al Congreso de la Unión.
También desmintió lo dicho por el obispo de San Cristóbal de las Casas sobre las ``agresiones gubernamentales'' a la mediación. Preguntó si fueron agresiones las reuniones que tuvo él con miembros de la Conai o el haber pedido una explicación a la desviación ``plenamente documentada'' de la instancia mediadora ``a favor de la parcialidad y la injerencia externa''.
En otra parte de un documento que leyó en conferencia de prensa, Rabasa rechazó las aseveraciones de la Conai sobre las acciones de desmantelamiento que hizo el gobierno en su contra.
El gobierno, afirmó, nunca retiró su reconocimiento a la Conai, simplemente la convocó a dialogar repetidamente sobre dos aspectos: parcialidad e injerencia externa, lo cual rechazó.
Aseguró que la renuncia de Samuel Ruiz a la Conai y la desaparición de este organismo ``es una determinación interna y autónoma, la cual nunca se platicó con las partes que de buena fe le extendieron su reconocimiento''.
A pregunta expresa, rechazó que el obispo haya recibido presiones gubernamentales de manera directa o través del Vaticano. ``No hubo presión, sino que hubo disposición de ventilar y de dialogar sobre esas diferencias'', aseveró Rabasa, luego de insistir en que nunca atacó ni acusó a la Conai, sino que se le invitó a discutir sobre su parcialidad y la incitación a la injerencia externa.
Rabasa rechazó que el presidente Ernesto Zedillo haya hecho referencia directa a Samuel Ruiz cuando habló de la ``teología de la violencia'' o de quitarse ``una piedra del zapato'' durante una de sus giras por Chiapas. ``Si él aplicó los términos y, como se dice, se puso el saco, esas es otra cosa'', argumentó.
Por otra parte, desestimó que la crisis en la Conai vaya a ``contaminar'' a la Comisión de Concordia y Pacificación, la cual se ha visto fortalecida por sus últimos trabajos y su gira a Chiapas. Además, quiso destacar que con esa comisión sí se ha mantenido un diálogo.
Dijo que se espera hacer un análisis de la situación, pero rechazó que se pueda aceptar la mediación de una instancia internacional. Finalmente, reiteró que la condición fundamental para el diálogo es la voluntad de las partes.
Entrevistado al término de la inauguración de la exposición Pauch Ambar de Simojovel, el titular de la Sedeso eludió responder en cinco ocasiones la pregunta sobre la desaparición de la Conai. Sin embargo, cada vez apuntaba que el apoyo a proyectos productivos en esa entidad van al origen de las causas de los conflictos, a los cuales ``se les tiene que buscar siempre resolver de fondo''.
Ante la insistencia de los reporteros, Moctezuma apuntó que en materia de desarrollo social hay mucho trabajo para organizar a las comunidades, con el fin de resolver el problema de la tierra y lograr que a través de actividades que respeten también a la propia naturaleza y al medio ambiente se tengan alternativas a productos con mayor valor agregado.
Añadió el funcionario que lo que va a crear un país armónico, en donde se reduzcan los conflictos, es precisamente el acompañar permanentemente la solución de dichos conflictos con el ataque a las causas que les dan origen, y que son realmente la marginación de muchos años, incluso de siglos de miseria.
``Para romper ese círculo vicioso de pobreza tenemos que hacer un esfuerzo especial para desarrollar actividades que les permitan a las comunidades llevar a cabo proyectos productivos sustentables'', manifestó el funcionario.
Angeles Mariscal, corresponsal, Tuxtla Gutiérrez, Chis., 8 de junio Ť El gobierno del estado de Chiapas consideró que la desaparición de la Comisión Nacional de Intermediación (Conai) ``no afecta a la negociación'' entre el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y el gobierno federal.
En un documento leído por la secretaria de Gobierno, Arely Madrid Tovilla, se acusa nuevamente al presidente de la ahora extinta Conai, el obispo Samuel Ruiz García, de realizar acciones ``con fines distintos al logro de la paz'', además de que la instancia que presidió a partir de 1994 ``desde hace mucho tiempo dejó de ser un instrumento útil para la negociación''.
A través de ese comunicado, el gobierno estatal hizo algunas precisiones a algunos puntos relacionados con el documento dado a conocer ayer por el obispo de la diócesis de San Cristóbal, en el que da a conocer la conclusión de su trabajo como mediador, así como en lo relacionado a la disolución de la Conai.
``Es falso que el gobierno del estado haya desistido del camino del diálogo, lo ha privilegiado y lo sigue buscando como una salida política al conflicto de Chiapas'', se indica en el texto.
Enseguida, considera que ``la Conai desde hace tiempo dejó de ser un instrumento útil para la negociación'', y considera que desde hace muchos meses dicha instancia ``no tuvo logros, acercamientos o aproximaciones que hicieran ver la efectividad de su intermediación en la solución del conflicto''.
La larga y pesada inactividad en las tareas de intermediación encomendadas a la Conai son las que hicieron innecesarias su tarea de mediación, el protagonismo a favor de una de las partes manifestado en diversos foros anularon su intervención en los trabajos de reconciliación, acusó el gobierno chiapaneco.
Y arremete directamente contra el presidente de la Conai: ``la defensa que hace el obispo Samuel Ruiz sobre los llamados municipios autónomos es prueba fehaciente de su parcialidad y desconocimiento de las normas constitucionales que nos rigen, y revela sus verdaderas inclinaciones a una de las partes'', por lo que calificó a estas acciones como unilaterales e ilegales.
En respuesta a las aseveraciones del obispo de San Cristóbal, cuando acusa al gobierno de que, como parte de las acciones en contra de dicha diócesis y de la propia Conai se ha expulsado a diversos sacerdotes, negado la residencia de otros tantos, encarcelado a unos más, y cerrado diversos templos, el gobierno asegura que en todo momento ``ha actuado conforme a la ley en el establecimiento del estado de derecho''.
Señaló a las propias comunidades de haber sido ellas las que cerraron los templos y haber acusado a dirigentes religiosos de la diócesis de ``provocadores de la violencia. En consecuencia, el gobierno no ha tenido ni tiene ninguna estrategia de guerra, lo que mantiene vigente e inalterable es una propuesta de reconciliación y paz. Chiapas no puede seguir siendo rehén de los caprichos de nadie'', recalca y puntualiza que las afirmaciones y acciones del obispo son ``con fines distintos al logro de la paz''.
Antes, el gobernador Roberto Albores había manifestado que la desaparición de la Conai ``era un secreto a voces'', y consideró que esta determinación no afecta al proceso de paz que se pretende llevar a cabo: ``es un acto muy, muy de la Conai, no pasa nada en la negociación'', afirmó.
José Antonio Román Ť Los obispos de México ``no pretendemos ni aceptamos'' desempeñar la función de mediación entre el gobierno federal y el EZLN, afirmó el presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Luis Morales Reyes. ``Reiteramos, más bien, nuestro deseo de ayudar a la instancia o instancias civiles bajo cuya responsabilidad pudiera caer, de ahora en adelante, la mediación'', precisó.
Dijo también que la jerarquía eclesiástica está dispuesta a seguir colaborando, desde su ministerio pastoral, en la promoción de la reconciliación y la búsqueda de la paz. En un comunicado, Morales Reyes estimó que la renuncia de Samuel Ruiz a la mediación del conflicto y la desaparición de la Conai, es el último capítulo de una etapa de diálogo y negociación que llega a su fin.
Ahora, agregó, se abre una historia nueva del proceso de paz en la que urge, por el bien de México y de todos los indígenas y campesinos, privilegiar las convergencias y no las divergencias, y optar eficazmente por el diálogo, maduro y fecundo, basado en la verdad y el respeto mutuo.
Por su parte, el nuncio Justo Mullor ofreció contribuir dentro del marco diplomático y pastoral que le es propio, en la búsqueda de un eficaz proceso de reconciliación y paz, mismo que corresponde sólo a los mexicanos y debe estar ajeno a toda violencia.
La renuncia del obispo Ruiz a la Conai y la desaparición de este organismo generaron dentro de la comunidad religiosa del país una serie de declaraciones, muchas de ellas de preocupación por el futuro del proceso de paz, donde aumentan --desde su perspectiva-- las condiciones para una salida armada al conflicto chiapaneco.
El obispo de Tapachula, Felipe Arizmendi, destacó que el comunicado emitido por Samuel Ruiz hace una invitación a la sociedad mexicana para que busque otros mecanismos que encuentren opciones viables para la paz. ``No se trata, por tanto, de que se quede el camino libre para acciones militares, sino de que el país haga funcionar las instituciones que tiene para afrontar la problemática nacional. Esa es la misión de los congresos federal y de los estados, sobre todo ahora que se va logrando una mayor pluralidad en los mismos''.
Dijo que la mejor manera de desarmar al subcomandante Marcos y al EZLN es que el Congreso haga suyos tanto los temas pendientes de San Andrés Larráinzar, como las demás necesidades del pueblo, para que, sin necesidad de las armas, se encuentren caminos viables de justicia y democracia, bienestar y desarrollo para todos, en particular para los más pobres, como son los campesinos y los indígenas.
``Nadie quiere la guerra, ni siquiera los zapatistas. Impidamos que se reanude buscando nuevos caminos de un diálogo nacional, para construir juntos el país que todos queremos'', dijo el obispo Arizmendi, quien señaló que Chiapas y México deben permanecer agradecidos a Samuel Ruiz por el desgaste de su vida y de sus energías a favor de la paz y la justicia. Señaló que lejos de permanecer al margen del problema y no complicarse la vida, el obispo de San Cristóbal de las Casas asumió su responsabilidad de pastor al dar la vida a favor de aquellos que le fueron confiados.
De igual forma, expuso que la decisión del obispo Ruiz se dio luego de un análisis realista de su tarea mediadora, pues por una parte el gobierno ya no le tenía confianza, y por otra, el EZLN ha optado por el silencio. Ante la imposibilidad de reunir a las partes decidió retirarse, no para buscar refugio en la comodidad de la inacción, sino para invitar a la sociedad a buscar nuevos mecanismos de diálogo y pacificación.
``Algunos querrían que tomara actitudes más de político que de obispo, y don Samuel prefiere mantenerse como pastor, en comunión con el Papa, con su representante en México y con sus hermanos obispos. Ante todo es pastor, es obispo, no político. Por esta decisión, cuenta con todo nuestro apoyo'', concluyó.
Martha García Ť La Comisión de Seguimiento del Congreso Nacional Indígena (CNI) advirtió ayer que la desaparición de la Conai sólo será fructífera si este suceso se traduce en la conformación de ``un cuerpo social más amplio, más activo y más participativo que abrigue alguna esperanza para detener la estrategia de guerra'', y en esa lógica emprenderá movilizaciones en todo el país.
Tras una larga reunión en la ciudad de México, los integrantes de esta organización elaboraron un pronunciamiento sobre las expectativas para los pueblos indígenas y la negociación en Chiapas, una vez disuelto el organismo presidido por el obispo Samuel Ruiz.
En su documento, el CNI afirma que el gobierno ``juega con el presente e hipoteca el futuro del pueblo de México, dentro de un negocio en que parecen estar la vida, la justicia, la democracia y la libertad que reclaman los zapatistas para todos los mexicanos''. De esta forma, hizo un llamado a las comunidades, organizaciones indígenas y sociedad civil a ``cerrar filas y apretar la lucha de resistencia en contra del mal gobierno y hacer frente al infame control de los medios de comunicación y la complicidad de las mentes mediatizadas por el circo del futbol''.
En tanto, Javier Elorriaga, integrante del Frente Zapatista de Liberación Nacional, expuso que la disolución de la Conai es la consecuencia de la campaña ofensiva gubernamental de golpear a la instancia de intermediación. Criticó el hecho de que las autoridades muestren alegría por una noticia que causa preocupación a los mexicanos que desean la paz.
Señaló que el FZLN continuará con sus actividades políticas así como la organización de las caravanas de ayuda humanitaria y de apoyo a los municipios declarados autónomos. En esa dinámica, anunció que esta agrupación realizará un foro nacional en Celaya, y analizará las estrategias a reforzar para presionar al gobierno federal a cumplir con los acuerdos de San Andrés.
De la redacción Ť Los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN), del Trabajo (PT) y Verde Ecologista de México (PVEM) lamentaron la renuncia del obispo de San Cristóbal de las Casas, Samuel Ruiz, a la Comisión Nacional de Intermediación (Conai), pues el organismo ``pierde a su principal signo y portavoz de interlocución política y social para la mediación en el conflicto en Chiapas''.
Por su parte, el Revolucionario Institucional (PRI) señaló que se deben ``fortalecer y renovar'' los mecanismos de diálogo y negociación directa entre el gobierno y el EZLN, con el apoyo de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) ``y la instancia de mediación que reconozcan, con el fin de que, sin pretender sustituirlas o convertirse en parte del conflicto, generen las condiciones e iniciativas políticas para acercarlas y dirimir controversias''.
La senadora priísta María de los Angeles Moreno y el vocero de la CTM, Nezahualcóyotl de la Vega, criticaron a Ruiz porque ``no fue un intermediario imparcial''. Consideraron que más allá del obispo puede haber mediación, pláticas y observación; ``la búsqueda de nuevas fórmulas no excluye a la Cocopa''.
En Oaxaca, el dirigente nacional del PRD, Andrés Manuel López Obrador, dijo que Samuel Ruiz seguirá siendo factor importante de mediación para tender puentes en la búsqueda de una salida negociada, pacífica y política al conflicto chiapaneco. Agregó que su partido y todas las fuerzas democráticas del país continuarán impulsando dicha salida.
Subrayó que en tanto no se consiga el PRD no participará en ninguna negociación para la reforma del Estado con el gobierno federal. ``El PRD está dispuesto a perder las elecciones del 2000 si el gobierno opta por una salida violenta, porque entonces actuaremos con más energía para protestar por el etnocidio''.
A su vez, el secretario de Asuntos Electorales del PRD, Eduardo Espinosa, y el subcoordinador de la fracción del PRD en el Senado, Mario Saucedo, advirtieron que la desaparición de la Conai es consecuencia ``de la escalada de la política de contrainsurgencia aplicada por el gobierno para justificar una acción militar en Chiapas''.
Responsabilizaron al secretario de Gobernación, Francisco Labastida Ochoa, y a su coordinador de asesores, Adolfo Orive, del ``vacío'' que deja la disolución de la Conai. Saucedo se manifestó a favor de la búsqueda de instancias internacionales que puedan mediar en la solución del conflicto. Espinosa pidió al presidente Ernesto Zedillo reconocer que sigue cometiendo errores en el tratamiento que ha dado a Chiapas y le exigió rechazar la estrategia de Orive para aislar al EZLN, eliminar a las instancias de coadyuvancia y su intento de legitimar una acción militar en esa entidad.
Porfirio Muñoz Ledo, coordinador de la fracción perredista en la Cámara de Diputados, pidió a los ex integrantes de la Conai que reconsideren su posición y al gobierno de Zedillo dar mayores garantías a una instancia que ha logrado sentar a los actores del conflicto en la mesa del diálogo, en lugar de atacarla y denostarla.
El pleno del CEN del PRD se reunirá este jueves para evaluar la situación política del país, ``la cual es grave no sólo por la desaparición de la Conai, sino por el resurgimiento del EPR, el asunto del Fobaproa y la incapacidad del gobierno para encarcelar a los defraudadores como Angel Rodríguez, El Divino. La situación es complicada y corre el peligro de complicarse más, sobre todo porque hay procesos electorales en marcha'', explicó Espinosa.
Para el CEN del PAN, la salida de Ruiz de la Conai abre el paso para que el Congreso de la Unión, a través de la Cocopa, se convierta en ``mediador formal'' del conflicto chiapaneco, y antes de iniciar la discusión en la Cámara de Diputados sobre las iniciativas en materia de derechos y cultura indígenas se realice un último llamado al EZLN y al subcomandante Marcos para reanudar el diálogo.
En Chihuahua, Javier Corral Jurado, vocero panista, comentó que el obispo ``atemperó los propósitos autoritarios de represión del régimen'' al inicio del conflicto chiapaneco. ``Su renuncia es el reconocimiento de que ha llegado la hora de legislar en materia de derechos y cultura indígenas, y por tanto la hora del Congreso''.
En un comunicado, el PAN subrayó que el Congreso debe asumir la solución definitiva de las causas que dieron origen al conflicto, y la Cocopa servir como instancia útil para la reanudación del diálogo.
Para el gobernador panista en Guanajuato, Vicente Fox, las señales de hostigamiento que envió el gobierno de Zedillo a la Conai y la ausencia de Marcos ``son muestra de que las partes en conflicto ya no quieren intermediaciones; por eso urge que de inmediato se arreglen para que terminen la zozobra y temores en el país''.
El diputado petista José Luis López López comentó: ``Se ven signos preocupantes de guerra. Ahora en la mira del gobierno está la Cocopa''.
Por su parte, el coordinador de diputados de dicha fracción, Ricardo Cantú Garza, comentó que la disolución de la Conai enrarece el clima de tensión en Chiapas. ``Las partes deben encontrar otras instancias que faciliten la mediación; una de ellas podría ser la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM)''.
Elio Henríquez, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 8 de junio Ť Gonzalo Ituarte, quien se desempeñó como secretario técnico de la hasta ayer Comisión Nacional de Intermediación (Conai), consideró que ``no es probable'' un diálogo directo entre el gobierno federal y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), por lo que en el futuro tendrá que surgir una mediación nacional o internacional, de algún personaje o combinada con representantes de ambas partes.
Al señalar que la desaparición de la Conai deja ``un vacío que llama a todos a reasumir la responsabilidad en el proceso'', Ituarte reiteró que la disolución del organismo creado en octubre de 1994 significa un paso ``positivo porque implica reconocer una realidad, y cuando eso ocurre se fundamenta en la verdad para plantear las nuevas etapas''.
Entrevistado en la sede de la diócesis local, el sacerdote dominico recalcó la necesidad de dar un paso adelante. ``No podemos quedar amarrados con la añoranza de lo que fue San Andrés; ese proceso ya no va a volver, descansa en paz''.
Sostuvo que al declarar su desaparición, la Conai ``formaliza lo que el gobierno no quiso formalizar, aunque lo expresó suficientemente en sus declaraciones'' en reiteradas ocasiones.
Luego dio a conocer que el gobierno federal y el EZLN serán informados oficialmente de la desaparición del organismo que presidía el obispo Samuel Ruiz García, ya que hasta hoy no habían tenido contacto con ninguna de las partes.
Sobre las declaraciones de la Secretaría de Gobernación respecto a que Ruiz ``incursionó en política en contra de la Constitución'', el también vicario de justicia y paz de la diócesis expresó: ``Existen unos 80 obispos en el país que hablan de política, pero cuando son a favor las declaraciones no son consideradas como intervención en política; sólo cuando hay un mínimo de espíritu crítico se hace la acusación''.
Interrogado sobre la posibilidad de que aumenten los riesgos de enfrentamientos entre el Ejército y el EZLN por la disolución de la Conai, Ituarte manifestó: ``El riesgo ha estado presente desde hace mucho tiempo; (los posibles enfrentamientos) están allí en función de la realidad que se vive en las comunidades''.