GALERIA Ť Edmundo Chávez Cossío
La curiosidad, base de la investigación
La investigación se basa en la curiosidad y su objetivo es contestar preguntas esenciales. Sin embargo, desde la era espacial existe una sin respuesta: ¿cuál es el mecanismo por el que las mitocondrias transportan el calcio en las células del cuerpo humano?
Edmundo Chávez Cossío, jefe de Investigación en Ciencias Básicas del Instituto Nacional de Cardiología, compite para ser uno de los primeros en obtener esa respuesta después de más de 30 años de competencia internacional.
``La función del calcio dentro de la célula es muy importante, pues sirve como mensajero de múltiples reacciones en el metabolismo. Muchas enzimas son moduladas por las concentraciones de calcio. Por ejemplo, las células excitables en el corazón necesitan calcio para el proceso de contracción''.
Ahora se sabe, plantea, que si las mitocondrias se llenan de calcio se rompen y las células mueren. En las mitocondrias se sintetiza la mayor parte de energía que utilizamos para cualquier actividad. De ahí la importancia de saber cómo captan el calcio.
Chávez Cossío (ciudad de México, 1935) explica que al abordar sus estudios desde el punto de vista básico, observó también que los doctores clínicos tienen el problema de hacer pasar la sangre a una zona de infarto, un padecimiento muy frecuente en cardiología que se convirtió en objeto de su investigación.
``Cuando hay un infarto que deja de pasar la sangre a los tejidos, las mitocondrias no tiene oxígeno para producir adenosín trifosfato (ATP) y el músculo está paralizado.
``Generalmente se abre el músculo para que pase la sangre y haya ATP, lo que produce contractilidad. Cuando la sangre penetra otra vez en esa región lo hace con oxígeno y calcio. La cantidad de oxígeno que llega bruscamente a la zona isquémica produce la formación de radicales libres que son muy reactivos. Estos dañan las membranas de la célula y el calcio entra masivamente en las mitocondrias.''
La disyuntiva clínica es saber de qué sirvió abrir la arteria para que se irrigara nuevamente, si esa parte del corazón permanece después casi sin contraerse. ``Se daña más por la llegada del oxígeno y el calcio, pero es un procedimiento que tiene que hacerse''.
¿Cuáles son las alternativas? ``Encontrar la manera de proteger contra el calcio que inunda las mitocondrias y contra el oxígeno que produce los radicales''.
Vicepresidente de la Sociedad Mexicana de Bioquímica y con estudios de posgrado en la Facultad de Química de la UNAM, Chávez Cossío explica que ``las investigaciones del transporte de calcio se iniciaron luego de que los primeros astronautas viajaron al espacio y regresaron descalcificados, con los huesos doblados y en sillas de ruedas''.
Se estudiaron las mitocondrias y se encontró que eran capaces de capturar cualquier cantidad de calcio. ``Ahora estudiamos todas las proteínas que se encuentran en la membrana interna mitocondrial -que son más de 50 distintas-. Creemos que por lo menos tenemos identificadas unas tres, y una de ellas podrían ser la transportadora de calcio''.
El doctor Edmundo Chávez señala que los posibles resultados de esa investigación abarcan dos aspectos importantes. ``El primero es elemental: nos interesa conocer cómo es el mecanismo de transporte y contestar la pregunta, ya que el avance del conocimiento ha sido a través de la ciencia básica. También podríamos diseñar -ya conociendo la estructura de la proteína que transporta el calcio- un inhibidor, un compuesto permeable a la membrana celular y capaz de llegar hasta las mitocondrias''.
``Lo básico -subraya- es tener curiosidad. Uno empieza a cuestionarse leyendo libros; entonces, se hace investigación''. (Mirna Servín) (Fotos: José Carlo González)