La Jornada 3 de junio de 1998

Debernardi fue un alto mando en la gestión de Salgado Cordero

Bertha Teresa Ramírez Ť El secretario de Seguridad Pública, Rodolfo Debernardi Debernardi, perteneció al equipo de militares que, bajo el mando del general Enrique Salgado Cordero, estuvieron al frente de esa dependencia por más de un año y medio, señaló el vicepresidente de la Comisión de Seguridad Pública de la ALDF, Víctor Manuel Soto Camacho. El legislador dijo que de acuerdo con un informe de un alto mando de la SSP, Debernardi habría ocupado el cargo de director de la cuarta sección del Estado Mayor Policial, puesto que habría desempeñado hasta septiembre de 1997, mes en el que dejó la responsabilidad y posteriormente reapareció como secretario de Seguridad Pública.

El legislador pidió que se haga una investigación y señaló que dicha investigación se hace necesaria toda vez que la SSP puede encontrarse inmersa en una oculta situación de ``relaciones peligrosas''. Dijo que es difícil entender el porqué Debernardi llegó al mando de la SSP así como es difícil entender porqué ha hecho caso omiso a todos los señalamientos que se le han presentado y no ha corregido los errores''.

Mientras tanto, los abogados del secretario Debernardi tramitaron un nuevo amparo al vencerse el anterior, ante el juez quinto de distrito con sede en el Reclusorio Norte, Arturo García Torres. Como se recordara, el jefe policiaco había interpuesto un amparo provisional contra la orden de arresto administrativo de 36 horas inconmutables, decretado por la juez de Distrito Lilia Mónica López Benítez, debido a que el funcionario, acusado de desacato, ha rechazado comparecer ante las autoridades. Dicho desacato se le imputa a Debernardi debido a que no presentó ante el juzgado octavo a dos policías que habían sido citados a un diligencia como testigos de cargo en un juicio por portación de armas de fuego.

Los abogados del titular de la SSP, María Esther Fuentes y Víctor Santoprieto, tramitaron un nuevo amparo a fin de que el funcionario siga sin responder a la sanción adminsitrativa. De esa forma, los abogados esperarán entre siete y 14 días a que el juez García Torres decida si le otorga el amparo definitivo.

La policía se encuentra de brazos caídos al ver frustradas sus expectativas de cambio dentro de la corporación, agregó el vicepresidente de la Comisión de Seguridad, quien además censuró que tras la denuncia presentada por subalternos ante la ALDF, contra la jefa del sector 8 de la policía en Venustiano Carranza, Esperanza Galicia, ésta sólo haya sido transferida a Tláhuac; y en el caso de Francisco Cue Sarquís, jefe de Motopatrullas, y de Pastrana, jefe de Granaderos, también se esté pensando sólo en transferirlos, cuando la solución no es rotarlos, sino iniciarles una investigación a fondo que permita corregir las prácticas de corrupción que se siguen dando dentro de la policía capitalina''.

Soto Camacho dijo que los militares deben estar fuera de la SSP, ``reiteró que las funciones de la fuerza castrense están en la seguridad nacional y agregó que para él fue una sorpresa cuando se anunció que Debernardi estaría al frente de la policía capitalina, ``porque se trataba nuevamente de un militar, indicó que partir de ese momento planteó que tal designación era incongruente ``y que yo como diputado y vicepresidente de la Comisión de Seguridad Pública no estaba de acuerdo''.

Sin embargo, señaló: ``Le dimos el beneficio de la duda, pero al paso de los meses no creemos que sea la persona más idónea para estar al frente de la Secretaría de Seguridad Pública, le hemos hecho varios señalamientos y tal parece que a partir de que se siente descubierto busca la forma, ya ni siquiera de justificarse, sino de cómo mantener a la gente en los mismos puestos. Tenemos grandes problemas de corrupción; tenemos el caso de motopatrulas y de algunos sectores, así como de gente nefasta que no debía de ocupar cargos dentro de la policía''.

Hoy, por ejemplo, nos enteramos de que hubo una rotación de mandos y de que una de las personas que nosotros señalamos, Esperanza Galicia, como de los mandos que venden protección en la Venustiano Carranza, lo único que hizo fue cambiarla a Tláhuac; sin embargo, dijo el legislador, sería mejor que investigaran a los mandos que sean detectados en prácticas de corrupción a fin de que se les finquen responsabilidades, para sanear a la policía.