El encarcelamiento como
negocio
``Si las construimos en el lugar correcto, los prisioneros vendrán'', afirmó David Myers, ejecutivo de la Corrections Corporation of America, al celebrar la construcción de la tercera prisión privada de su empresa. El negocio: poner tras las rejas a la creciente población encarcelada de California, donde el número de condenados seguirá superando al de camas disponibles en las prisiones estatales. La empresa también espera contar con contratos de la migra. El pueblo de California City también está contento: económicamente devastado por la clausura de una base militar, ahora espera los 500 empleos que creará la prisión.
Pero cuidado con los
carceleros...
En Nueva York un guardia de la prisión federal en esa ciudad fue acusado de conspiración junto con un narco encarcelado por tramar un robo de más de 100 kilos de cocaína a otro traficante. El negocio empezó cuando Roy Thomas, a cambio de mil 500 dólares, entregó contrabando al reo, y de ahí hablaron de su próxima operación.
Arte censurado I
La prestigiosa productora de obras de teatro Manhattan Theater Club decidió cancelar el estreno de Corpus Christi, del reconocido dramaturgo Terrence McNally, después de recibir amenazas anónimas de muerte contra el personal y el autor, y de incendiar el teatro. McNally expresó su disgusto con la decisión y el dramaturgo sudafricano Athol Fugard decidió no permitir que ese teatro presente su próxima obra en protesta. La Liga Católica por Derechos Religiosos y Civiles encabezó la protesta -aunque rechazó usar la violencia- contra la obra, que, sostiene, presenta a un tipo de Cristo involucrado en relaciones sexuales con sus discípulos.
Arte censurado II
El famoso dúo Indigo Girls, ganador del premio Grammy, se sorprendió cuando tres de cinco conciertos programados en preparatorias fueron cancelados por administradores de los centros educativos. La razón: versos ofensivos y quejas de padres de familia. Los estudiantes protestaron en las escuelas en Tennessee y Carolina del Sur, y ocho fueron suspendidos por sus acciones. Los jóvenes y representantes del dúo sospechan que sus funciones fueron canceladas más bien porque las Indigo son lesbianas.
Tres momentos del presidente Ernesto Zedillo:
Octubre 5 de ese mismo año: ``Lamento mucho haberme tomado esas libertades de lenguaje. Ya entendí que el Presidente no debe hacerlo por el peso que tienen sus expresiones. Trataré de no ser demasiado coloquial''.
El pasado jueves: `` Tenemos que limpiar a Morelos de ratas inmundas. Vamos a sacar de este estado a los narcotraficantes, vamos a sacar de este estado a los secuestradores, vamos a sacar de este estado a los asaltantes, pero no los vamos a llevar a otros estados, ¡los vamos a llevar a que se pudran en la cárcel!''
Tras esas palabras, la versión estenográfica registra: (Aplausos).
Puede que se tarde, pero el gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva, sabe cumplir sus amenazas.
El 29 de agosto de 1994 mandó un avión a Cancún y esperó a los pasajeros en Chetumal. Javier Sánchez, Isidoro Mendoza y la diputada Virginia Betanzos fueron sentados en una sala de espera. El gobernador Villanueva entró hecho una fiera: ``Ya no quiero que estén chingando porque los voy a meter a la cárcel acusados de estar involucrados con el tráfico de drogas, y si no entienden hasta puedo ordenar que los desaparezcan. Le voy a demostrar a Salvador Ramos Bustamante quién tiene más güevos''.
Ramos, entonces dirigente de una expresión -digamos la menos charra- de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), había caído de la gracia de su antiguo compañero mesero del restaurante Rivolí, Alberto Juárez Blancas.
Siguieron más amenazas, cárcel y balazos para los croquistas seguidores de Ramos, quien, con el paso del tiempo y aislado, terminó brincando al PRD.
El lunes pasado, Salvador Ramos fue detenido en Yucatán y llevado en avión a Cancún. Hoy es huésped del reclusorio local, mientras el antiguo mesero Juárez Blancas se dedica a declarar que Manuel Bartlett sería el mejor candidato en el 2000.
Cuauhtémoc Cárdenas que en una reunión con reporteros afirmó que el perredista ``casi no es un gobierno, sino una campaña''?
Bueno, para que luego no digan que hay
una campaña contra el gobierno capitalino.
Aceptado. Adolfo Orive no era como lo dibujó José Hernández en nuestro número 18 (del 22 de marzo). Cuando se dedicaba -según su ficha oficial- a la ``asesoría en varios estados de la República Mexicana a organizaciones económicas de productores rurales'' (1972-1982), Adolfo Orive era más o menos como se le ve en la foto*.
*Foto tomada del libro sobre el Comité de Defensa Popular de Durango, de Gabino Martínez.
*Detalles en la página de Internet más anunciada por televisión: www.gobernacion.gob.mx