La Jornada 26 de mayo de 1998

Fobaproa es ya parte de la deuda pública: Ortiz

David Carrizales, corresponsal, Monterrey, NL, 25 de mayo Ť La deuda neta total del país se elevará a 39 por ciento del producto interno bruto, al agregar los 550 mil millones de pesos del Fobaproa, que ``forma ya parte de la deuda pública y de las obligaciones del gobierno federal'', puntualizó hoy aquí el gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz Martínez.

El ex titular de la SHCP aseveró que sería una interpretación extrema y absurda decir que el gobierno desconocerá los pagarés que entregó a los bancos por la compra de cartera vencida.

Además, en caso de desconocer esta deuda, se ocasionaría un problema muy serio, ``porque una parte importante de los activos de los bancos los representarán esos pagarés del Fobaproa''.

Pero esto no se va a dar, ``porque ningún partido político está pensando en arriesgar un quiebre del sistema financiero'', dijo durante su participación en el décimo Foro Nacional del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas.

Ortiz insistió en que el costo del Fobaproa se está informando al país desde 1995, y en 1997, en los Criterios de Política Económica que acompañaron a la iniciativa del presupuesto para el 98, se informó que el costo fiscal sería de 11-11.5 por ciento del PIB.

En ese entonces el Congreso aprobó una partida para el servicio de la deuda del Fobaproa, dijo Ortiz.

El gobernador del Banco de México puntualizó que ciertamente el costo fiscal para el país es enorme, y al sumar la deuda del Fobaproa al resto de los pasivos se elevará la carga a 39 por ciento del PIB, pero expuso que si se hubiera dejado quebrar a todos los bancos, el costo hubiera llegado a 69 por ciento.

Afirmó que hasta hoy ningún país ha dejado que quiebre su sistema bancario, porque son devastadores los efectos en la economía.

Aseguró que en Indonesia, por no actuar a tiempo, el costo del rescate bancario significará 60 por ciento de su producto interno bruto. Aquí se evitó un daño sobre la economía en su conjunto.

En otro orden, Ortiz Martínez reconoció que la privatización de la banca tuvo algunos errores, porque se entregaron a ``pillos'' algunas instituciones, ``pero se hizo lo que se pudo para evitarlo conforme a la legislación vigente, pues entonces no podíamos vender la banca a extranjeros''.

Destacó que el país empieza a ver la recuperación, y en lugar de salida, hay entrada de capitales. Agregó que el Banco de México tenía previsto un crecimiento de mil millones de dólares en las reservas internacionales para todo 1998, y de enero a abril se incrementaron en dos mil 400 millones de dólares.

Ortiz Martínez declaró que el hecho de que el gobierno federal reconozca la deuda del Fobaproa, no implica que se vaya a dar ``borrón y cuenta nueva, o que se vayan a parar las investigaciones que tengan que hacerse para castigar irregularidades.

Destacó la importancia de que el Congreso apruebe cuanto antes el paquete financiero enviado por el presidente Ernesto Zedillo, pues afirmó que entre mayor sea la tardanza, mayor será el costo económico para el país.


Fabiola Martínez Ť Funcionarios del Banco de México (BdeM) hicieron un llamado a los legisladores para que apliquen ``rápidamente'' la auditoría al Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa).

Señalaron también que la única opción para restablecer la fortaleza del sistema bancario es que el gobierno convierta en deuda pública los adeudos derivados del rescate a las instituciones crediticias.

``Tarde o temprano se tiene que atacar este problema y a nuestro juicio sería prudente `agarrar al toro por los cuernos' y no dejar que la bolita de nieve vaya creciendo y nos haga más daño'', expresaron.

Antes de viajar a Monterrey, los funcionarios -colaboradores cercanos del gobernador del Banco de México, Guillermo Ortiz consideraron que cualquier opinión previa a la auditoría es irresponsable. ``Que sean los auditores quienes deliberen; que sean la ley y los procesos legales los que hablen por sí mismos, lo demás son especulaciones totalmente fuera de la realidad''.

Implicados en la operación del Fobaproa desde la SHCP, los funcionarios aseguraron en entrevista que ``el que nada debe nada teme'' y reiteraron que el fondo referido ya cumplió su compromiso de evitar un colapso financiero en el país, por lo que ahora toca absorber los costos implícitos como deuda pública.

-¿No hay otra opción?

-No, porque implícitamente eran adeudos del gobierno federal, entonces, la alternativa es convertirlos en deuda pública y de este modo lograr un financiamiento natural y colectivo para un buen mercado secundario.

Los entrevistados, quienes prefirieron se omitiera su nombre ``porque sólo el gobernador puede emitir opiniones públicas'', recordaron que el rescate total al sistema bancario representó para el país 14.4 por ciento del PIB; esto es, 552 mil millones de pesos -sin incluir venta de activos- y a las instituciones a las que se les destinaron mayores recursos fueron, justamente, las que quebraron, Unión, Cremi y Confía, así como Serfin y Banpaís.

El Banxico, en su calidad de operador ``en cuenta y orden'' del gobierno federal, está convencido que el Fobaproa fue la mejor alternativa ante la crisis bancaria de 1995.

``No es la solución que nos deja más contentos o nos satisfaga, pero no había otra sopa, lamentablemente así son las cosas: dolorosas pero necesarias, los platos se rompieron por la crisis''.