La Jornada 22 de mayo de 1998

Rechazo zapatista al llamado a volver al diálogo; ``antes cumplan''

Elio Henríquez y Juan Balboa, corresponsales, La Ilusión, Chis., 21 de mayo Ť En respuesta a la invitación que hizo el presidente Ernesto Zedillo de sostener un diálogo directo, dirigentes zapatistas reiteraron que no regresarán a la mesa de negociaciones hasta que se cumplan los acuerdos de San Andrés, firmados el 16 de febrero de 1996.

``Los zapatistas seguimos en nuestras posiciones como pueblo y seguimos manteniendo los municipios autónomos; mientras no nos cumplan lo firmado en los documentos, no vamos a acercarle ninguna plática'', declaró un dirigente rebelde encapuchado que se identificó como Salvador.

--El Presidente los invitó a un diálogo directo hace dos días en Chanal...

--Eso dice él, pero nosotros no así estamos pensando, porque no hay cumplimiento de los acuerdos de San Andrés que están en los documentos firmados; mientras no cumplan seguiremos en pie de lucha --respondió.

Con un pasamontañas negro y un sombrero verde tipo militar, y sin portar armas, Salvador manifestó que el gobierno ``ha tratado de dividirnos, pero la mayoría seguirá luchando y en resistencia; no nos vendemos por un kilo de frijol o de harina minsa, lo que queremos es que respeten nuestra dignidad''.

Niegan que haya habido deserciones en las filas zapatistas

El dirigente dijo lo anterior en esta comunidad, donde hoy se concentraron más de dos mil indígenas tojolabales que simpatizan con los zapatistas --la mayoría mujeres--, pertenecientes al municipio autónomo y rebelde Miguel Hidalgo.

Durante un mitin, varios líderes negaron que 500 integrantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional hayan ``desertado'' la semana pasada, como publicaron algunos medios, y con lo cual, supuestamente, había sido desmantelado el municipio autónomo.

``Nuestro municipio sigue trabajando como siempre, no ha sido desmantelado porque los únicos que se salieron son cinco o seis traidores'', dijeron.

Desde temprano, cientos de tojolabales de las 18 comunidades que integran el municipio autónomo de Miguel Hidalgo, cuya cabecera se encuentra en la vecina comunidad de Zaragoza, empezaron a reunirse en la localidad de Nuevo México.

De allí, encabezando la marcha con una manta que exigía el cumplimiento de los acuerdos de San Andrés y con vivas al EZLN y al subcomandante Marcos, los más de dos mil tojolabales --cubiertos del rostro con pasamontañas o paliacates-- caminaron varios kilómetros hasta llegar a La Ilusión.

En el acto político, Irene señaló que llegaron hasta La Ilusión para demostrarle a los priístas ``que somos mayoría, que no necesitamos migajas del mal gobierno, pues nuestra lucha es más profunda, es porque nuestros hijos ya no se mueran de hambre y no vuelvan a la esclavitud''. Luego exigió a las autoridades que respeten la autonomía de los pueblos indígenas.

Por su parte, Jeremías manifestó que el gobierno trata de ``acorralar a la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC-independiente), pero por cada uno que detengan nosotros vamos a agarrar a cinco''.

En tanto, Salvador dio a conocer que algunos integrantes del concejo municipal autónomo de Miguel Hidalgo aparentemente tienen orden de aprehensión, porque la policía los anda buscando. ``Pero si los encarcelan accionaremos también, aquí somos policías todos, vamos a entrar hasta las ciudades a como dé lugar para que el gobierno no nos siga chingando como indígenas'', advirtió.

``No es cierto que el gobierno de Roberto Albores Guillén traiga la reconciliación, sino que trae la destrucción de las organizaciones sociales y allí puede tronar ese gobierno, porque nosotros no queremos que nos siga chingando a cada rato, queremos que cumpla los acuerdos; mientras, no lo vamos a dejar; civilmente vamos a accionar'', dijo.

El gobierno, subrayó el dirigente zapatista, ``nos quiere acabar pero no nos vamos a dejar; nosotros nos podemos gobernar solos, por eso hemos buscado a nuestros representantes''. Después de la marcha y del mitin, los indígenas --integrantes algunos de la Unión de Ejidos y Pueblos Tojolabales-- regresaron a sus comunidades sin que se haya reportado ningún incidente, a pesar de que policías estatales recorrían la carretera para actuar en caso de algún bloqueo vehicular.