Exigen PRD y CNC acciones urgentes de rescate al agro
Matilde Pérez U., Martha García y Víctor Ballinas Ť Por primera vez el PRI y el PRD coincidieron: el campo mexicano requiere medidas emergentes de rescate y de reactivación económica, ya que este año será el peor de la década para el agro.
En una carta que el secretario de Asuntos Agropecuarios del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, Manuel Ortega, entregó en la residencia oficial de Los Pinos, le insiste al presidente Ernesto Zedillo que declare zona de desastre al campo mexicano, pues los problemas y rezagos ancestrales --carteras vencidas, precios bajos, altos costos de producción, falta de créditos, entre otros-- combinados con las dificultades de ahora, permiten avizorar un panorama ``negro, dramático y plagado de consecuencias negativas en lo económico y social''.
Ortega dijo que es urgente que el gabinete agropecuario reconozca la delicada y grave situación. ``Los problemas no deben minimizarse, el gobierno tiene que recordar que los conflictos son producto del hambre y que es mejor tomar medidas para resolverlos antes de que estallen''.
Respecto al señalamiento de la Secretaría de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca (Semarnap) de que la mayoría de los incendios forestales son producto de quemas agrícolas, expuso que ``es muy aventurado acusar a los campesinos, se tiene que llamar al Ministerio Público para que investigue el origen de las conflagraciones. Hacer esos señalamientos es poner una cortina de humo a la falta de prevención e incapacidad. Los señalamientos son poco creíbles'', insistió.
Entre las once propuestas para el rescate del campo, el PRD destaca la entrega inmediata del Programa de Apoyo al Campo (Procampo), reducción en 50 por ciento de la tarifa 09 (destinada para la energía eléctrica para riego), reorientación del gasto público y una política de defensa de los granos básicos.
Se necesitan recursos extras: CNC
Por su parte, la dirigente de la Confederación Nacional Campesina (CNC), Beatriz Paredes, pidió al PRI su intervención ante las autoridades del sector agropecuario para conseguir recursos adicionales a los ya otorgados, ante la devastación del campo por la adversidad climatológica que impera en el país.
Un diagnóstico elaborado por esa central indica que este año las importaciones de granos y oleaginosas se incrementarán 12 por ciento. Precisa que la exportación de ganado en pie aumentó 30 por ciento respecto al año pasado, 604 mil cabezas al 8 de mayo de 1998 con un precio de venta al exterior ``significativamente mayor al del mercado nacional''; mientras para la producción de leche estima incrementos de 5 por ciento respecto a 1997.
Entrevistada al término de la reunión que presidió con dirigentes de todo el país para refrendar su apoyo a Carlos Rojas como secretario general del PRI, Paredes resaltó que la práctica de tumba y quema es una tradición milenaria de la agricultura mexicana, y que en estos momentos de emergencia por los incendios en el territorio las autoridades recomendaron suspenderla.
Agregó que el problema del fuego en el campo no es una cuestión de culpas, sino un asunto que ha combinado diversos factores de clima, sequía extrema, retraso de lluvias, insuficiente prevención y capacidad de respuesta inmediata.
Sobre el apoyo emergente, el estudio Impacto del clima en el sector agropecuario apunta que los recursos se han enfocado a productores de 22 estados dentro del Programa Emergente para Fenómenos Meteorológicos. Destacan 397 millones de pesos durante 1997 y 332.5 millones aprobados para el programa en lo que va del año.
Asimismo, indica que están en marcha las medidas para apoyar cultivos alternativos al maíz, que normalmente ocupa 65 por ciento del área sembrada, con productos básicos en el ciclo primavera-verano; sin embargo, considera viable compensar las pérdidas de alrededor de 750 mil toneladas de cultivos como el sorgo, trigo y cebada. De igual forma, el estudio calcula que la producción del ciclo podría reducirse a 19.2 millones de toneladas.
También precisa que en el ciclo primavera-verano se cultivan cerca de 12 millones de hectáreas, lo que equivale a 80 por ciento de la superficie, y que generan 70 por ciento de la producción.
Por su parte, el senador priísta Hugo Andrés Araujo manifestó que la sequía que atraviesa el país es grave. El problema que se tiene para afrontarla es que no se cuenta con recursos suficientes. Ante ello, ``es momento de revisar cómo quedaron los recursos para el campo después de los dos recortes al Presupuesto de Egresos de la Federación''.
Destacó que la comisión de Agricultura del Senado se entrevistó hace poco con el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural (Sagar), Romárico Arroyo, quién les informó que la situación es grave. En breve ``nos volveremos a reunir con el funcionario para presentarle algunas preocupaciones que tenemos los legisladores y buscaremos soluciones de coyuntura, porque no hay recursos suficientes''.
Los legisladores de todos los partidos, apuntó Araujo, ``hemos insistido que dentro del paquete presupuestal, aún con los recortes, se cuidara mucho la parte agropecuaria, tan es así que todos hemos insistido en el incremento de las partidas al campo. Sin embargo, en un marco de limitaciones, estas partidas no pudieron crecer más de lo que empujamos entre todos''.