Político, el interés de algunas ONG en Chiapas, acusa Zedillo

Alonso Urrutia, enviado, San Juan de Sabinas, Coah., 14 de mayo Ť El presidente Ernesto Zedillo volvió al tema de Chiapas y censuró las campañas de observadores internacionales ``que pretenden proyectar una imagen de un país autoritario y represivo'', mismas que, dijo, son alentadas por algunos grupos mexicanos. En tal sentido, cuestionó a aquellas organizaciones no gubernamentales que, bajo el argumento de representar a la sociedad civil, ocultan sus verdaderos objetivos y no se animan a decir: mi interés es político, estoy en la lucha por el poder.

Ante medio millar de mujeres coahuilenses reunidas en el Club de Leones de esta ciudad, y que se dijeron ``indignadas'' por la imagen distorsionada de nuestro país que se promueve en el extranjero, Zedillo sostuvo que estas organizaciones no participan en la lucha por el poder ``con las reglas de la democracia'', sino que lo hacen de manera encubierta, inventando una causa supuestamente humanitaria ``para desde esa causa no decir, sino hacer y promover su causa política''.

El mandatario subrayó que estas organizaciones utilizan a organismos extranjeros afines para promover sus objetivos, invitándolos a ver sólo una realidad parcial de nuestro país y, a partir de ella, suponer una realidad general. ``Sería bueno que quienes están detrás de esas visitas dieran la cara''.

En Chiapas, insistió, no sólo hay 10 mil indígenas, sino casi un millón de ellos. ``¿Por qué no les preguntan a los otros 990 mil qué piensan de vivir bajo el amago de la violencia? ¿Qué piensan de vivir bajo el amago del fanatismo religioso? ¿Qué piensan de vivir bajo el amago del fanatismo político?''.

A lo largo de su gira, Zedillo también habló del proceso democrático de México, en el cual se han registrado aceleradas transformaciones del sistema político y se han consolidado nuevas instituciones. Sin embargo, subrayó que la democracia no es solamente derechos sino también responsabilidades, por lo que convocó a los poderes del Estado y a los partidos a asumir su responsabilidad.

Chiapas, otra vez

En su visita a Coahuila, Zedillo sostuvo, entre otras actividades, sendos encuentros con universitarios y mujeres coahuilenses que, por separado, aludieron al conflicto chiapaneco. ``Sabemos que México no es un solo estado; que México no es un solo problema; sabemos que México no es sólo Chiapas'', le dijo Alfonso Yáñez, estudiante de derecho, en su encuentro matutino realizado en Piedras Negras.

Por la tarde, ya en Sabinas, Laura Eraña se dijo ``indignada'' por la imagen que se está proyectando de México en el exterior y sugirió que los medios de comunicación ``están manipulando la información sobre las irregularidades que han existido en Chiapas, situación que han aprovechado observadores extranjeros que, además, no han sabido corresponder a los derechos que se les han otorgado'', afirmó.

Sería en su encuentro con las mujeres donde Zedillo abundaría en el tema chiapaneco el que, dijo, es una fibra muy sensible para los mexicanos y en donde se ha aprovechado la ``tolerancia y generosidad para abusar de la cortesía y de las libertades inamovibles que hay en México''.

El Presidente aseguró que las autoridades no caerán en las ``provocaciones'' de estos grupos, por lo que se no actuará con violencia porque ``eso le haría un daño terrible al país''. Por el contrario, consideró que el gobierno ha actuado con cierto margen de tolerancia en la aplicación de la ley. Esas personas --continuó-- saben muy poco o nada de la importancia de las garantías individuales y los derechos humanos en el país.

``Efectivamente, nos molesta y a veces nos ofende esa campaña que se ha desatado, por cierto, provocada por algunos mexicanos, por algunos grupos de interés muy especial, para dibujar a México como un país de represión, como un país de violencia'', dijo.

Señaló que en Chiapas ``hay un problema en algunos municipios y comunidades que vamos a resolver con nuestros propios medios, pero es ofensivo que a partir de ahí se quiera presentar el problema como general de todo el país, y en el que algunos grupos están especialmente empeñados en destacar una imagen de autoritarismo que es absolutamente falsa''.

El mandatario pidió honestidad a las organizaciones no gubernamentales que promueven las visitas de observadores extranjeros que, ``con buena o mala fe, pero ciertamente con un enorme grado de ingenuidad, vienen a nuestro país nada más a ver un pedazo de nuestros problemas''. En todo caso, concluyó, ``no se preocupen, la soberanía de México nadie la toca''.

Crítica a los medios electrónicos

En el encuentro con las mujeres, Zedillo fue cuestionado por Catalina de la Peña por la ``incompatibilidad de intereses'' de los medios electrónicos y de la sociedad. Acusó a los primeros de promover la violencia, razón por la cual demandó una más adecuada legislación en materia de medios de comunicación.

``Compartimos el principio, pero no el método'', respondió Zedillo. ``Efectivamente, con frecuencia los medios electrónicos se alejan del interés colectivo y es el caso actual, en el que la sociedad enfrenta una verdadera crisis de seguridad, que contrasta con los contenidos de los programas que lejos de inducir el rechazo al crimen, en más de un sentido lo alientan''.

Sin embargo, el Presidente dijo que jamás promoverá que desde el poder público ``tratemos de determinar lo bueno o lo malo, lo que la gente quiere o no quiere, porque estaríamos pisando un territorio muy peligroso, y es el territorio de la libertad de expresión''.

Es cierto, agregó, que en ocasiones el respeto a la libertad de expresión deriva en que a veces se escuchan críticas que podrían no ser correctas o incluso hasta no serían éticas. ``Con frecuencia las sufrimos, pero prefiero mil veces que esas opiniones se den sin cortapisa a caer en la tentación de limitarlas o inhibirlas''.

No podemos --insistió-- comenzar a censurar a los productores de radio o televisión, porque el problema es dónde vamos a trazar la línea y en dónde vamos a acabar, y ``si seguimos por ese camino creo que podríamos llegar a minar seriamente las bases de nuestra democracia fortalecida, que tanto trabajo está costando a los mexicanos construirla''.

El tema de la democracia ya había sido abordado en su encuentro con los universitarios en el Instituto Tecnológico de Piedras Negras. En su respuesta a los estudiantes aludió a las transformaciones del sistema político mexicano, a las nuevas reglas que garantizan ``los valores esenciales de la democracia''.

Zedillo agregó que la democracia también plantea nuevas obligaciones a los actores políticos para su consolidación. ``No podemos tomar solamente el lado de los derechos, de las libertades individuales y políticas. La democracia no es un asunto de un solo hombre, no es un asunto de un solo partido o de un solo sector; la democracia es un asunto de todos los mexicanos, de todos los partidos políticos, de todos los niveles de gobierno; es un asunto de todos los poderes de gobierno; nadie puede sustraerse al ejercicio, al cumplimiento de sus responsabilidades''.

En la reunión con los jóvenes apenas se esbozaron algunas críticas sobre la necesidad de superar una economía que ha generado la exportación de mano de obra, y la demanda juvenil de no conformarse con su inserción en las maquiladoras. Algunos otros reconocieron avances en la recuperación económica del país.

Apretada gira de trabajo que comenzó por la mañana con los dislates de Olivia del Angel Calles, representante vecinal de Piedras Negras, en la presentación del Programa Estatal de Saneamiento Ambiental. De la bienvenida al ``presidente de los Estados Unidos''.... (Mexicanos, alcanzó a corregir alguien, ante la evidente molestia de Zedillo), la lideresa pasó al desbordado proselitismo hacia el gobernador Rogelio Montemayor de quien, dijo, ``si se pudiera, lo reelegiríamos''. Entonces vino la corrección del Presidente: ``En nombre del señor gobernador y en memoria del más grande hijo de esta tierra (Francisco I. Madero), digo: sufragio efectivo, no reelección''.

En este estado que padece una prolongada sequía, el presidente Zedillo anunció que ha dado instrucciones al secretario de Agricultura, Romárico Arroyo, para llevar a cabo programas de ayuda, pero que no se queden sólo en paliativos.