En paquete, la ruta ferroviaria del Istmo y dos terminales

Víctor Cardoso Ť La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) agrupó en un ``paquete'' único a la línea ferroviaria del Istmo de Tehuantepec junto con las administraciones portuarias integrales (API) de Coatzacoalcos y Salina Cruz, para conformar una empresa paraestatal operadora de un sistema de transporte multimodal.

El subsecretario de Transporte, Aarón Dychter Poltólarek, informó que a más tardar el mes entrante quedará conformada la nueva paraestatal administradora del Ferrocarril del Istmo, que a su vez estará en condiciones de concesionar a empresarios privados la operación de la vía de 380 kilómetros y las terminales de graneles y contenedores en ambos puertos.

Anunció que en tanto se conforma la nueva entidad, se tiene previsto invertir alrededor de 500 millones de pesos para mejorar y modernizar la infraestructura de vía con el fin de reducir los tiempos de despacho, elevar la seguridad y permitir mayores velocidades de tránsito y soporte de carga.

De igual forma, adelantó, la SCT tiene previstas otras inversiones para el equipamiento de infraestructura en los puertos de Coatzacoalcos y Salina Cruz, en otros proyectos de desarrollo regional e incluso dio a conocer que este mes comenzará a operar un nuevo aeropuerto en la ciudad de Ixtepec, Oaxaca.

Dychter Poltólarek recordó que la ruta del Ferrocarril del Sureste, originalmente previsto en el Programa de Cambio Estructural del Sistema Ferroviario Nacional, tuvo que ser modificada debido a que en particular la ruta del Istmo representa una área estratégica para el Estado mexicano.

De esa forma, añadió, se determinó la separación de la ruta Coatzacoalcos-Veracruz-México, también la que va a Mérida y la creación de la empresa paraestatal administradora del Ferrocarril del Istmo, y se planeó la integración de las terminales graneleras y de contenedores para conformar un sistema de transporte multimodal en la zona que al mismo tiempo le permitirá una mayor competitividad en el mercado internacional.

Adicionalmente, esa paraestatal estará en condiciones de concesionar, a su vez, la operación del ferrocarril y de las terminales marítimas a empresas privadas sin que el gobierno federal pierda el control de esa infraestructura.

La idea, dijo, es crear un polo de desarrollo dotado con servicios que atraigan más inversiones privadas, la generación de nuevas fuentes de empleo y, por consiguiente, permita elevar la calidad de vida de las comunidades indígenas en la zona.

El subsecretario del Transporte mencionó que algunas empresas privadas ya han realizado sondeos y análisis de factibilidad para realizar futuras inversiones en la región.