La Jornada 30 de abril de 1998

Credibilidad, el mayor activo de La Jornada: Carmen Lira a accionistas

La directora general de La Jornada, Carmen Lira Saade, señaló que en el cumplimiento de la ``misión fundacional'' del periódico --hacer oír las voces de quienes históricamente han sido marginados de todas las otras tribunas-- ``hemos actuado con una convicción: impedir en el país la guerra fratricida que, como todo el mundo sabe, llevaría décadas resolver''.

Al rendir su segundo informe ante la Asamblea General Ordinaria de Accionistas de la empresa Demos Desarrollo de Medios SA, editora del diario, subrayó que la preservación de los lineamientos de la política editorial de este medio genera una credibilidad ``que constituye, hoy en día, el más importante activo del periódico''.

Con quórum legal para sesionar, los accionistas de Demos se reunieron con el objeto de conocer, debatir y en su caso aprobar los informes anuales del Consejo de Administración, de la directora y de los comisarios de la empresa.

Se les informó que en el ejercicio fiscal correspondiente a 1997, el periódico incrementó sus ventas de publicidad, especialmente comercial, y abatió sus porcentajes de devolución de diarios, con lo que en la práctica incrementó su circulación.

Además, construyó una planta industrial para la imprenta y la distribuidora del diario y, según se informó en la asamblea ordinaria de accionistas de Demos, la empresa aumentó sus activos económicos. La directora informó asimismo del inminente cambio de domicilio del diario, de sus actuales instalaciones en Balderas, a la calle de Petrarca 118, colonia Polanco.

Al poner a consideración de los accionistas la autoridad y la trascendencia conquistada por este proyecto periodístico en la vida política y social de México, Carmen Lira manifestó la decisión de este colectivo de ampliar y extender esa influencia en el acontecer nacional y de contribuir ``a despejar las amenazas de la intolerancia y la violencia''.

Precisó que ante el conflicto chiapaneco ``hemos actuado con una convicción: impedir en el país la guerra fratricida que llevaría décadas resolver. Creemos en el diálogo, la negociación, en la paz con justicia y en la construcción de un país que incorpore a su vida económica, política y jurídica a todos sus habitantes y grupos sociales.''

Por ese afán, añadió, este diario se ha propuesto informar puntualmente de los riesgos para la preservación de la paz y demandar de la sociedad un involucramiento continuado en la búsqueda de la solución justa del conflicto.

Mantener la línea editorial independiente y crítica ha convertido a La Jornada ``en un contrapeso, solitario las más de las veces, a la uniformidad de los medios''.

En este contexto, la directora de La Jornada se refirió a las ``agresiones y calumnias'' padecidas por el diario desde su fundación, ``con la peculiaridad de que ahora una buena parte de los ataques proviene de otros medios''.

Señaló que ``el trabajo de los calumniadores ha sido constante y abundante'', y por igual ataca tanto al director fundador, Carlos Payán Velver (senador), como a colaboradores y corresponsales, quienes son ``objeto de amagos diversos''.

Ante ``esta tormenta nacional que parece no terminar nunca'', Lira reiteró las ``definiciones ineludibles'' de este proyecto: ``Apostamos a la paz incluyente y digna, a la plena democratización del país, al ejercicio de la soberanía nacional y al desarrollo económico con justicia y bienestar para todos''.

Hizo hincapié la directora en que si bien las relaciones del diario con el poder público son ``lógicamente tensas'', la autoridad federal ha actuado con ``respeto absoluto'' a nuestro trabajo y no ha tenido ni trato discriminatorio ni ha pretendido ejercer presión o insinuación alguna con el fin de modificar nuestras posiciones informativas y profesionales. ``Reconocemos el trato respetuoso que se nos ha brindado y estamos dispuestos a mantener una actitud correspondiente'', dijo.

Carmen Lira hizo un paréntesis para expresar un reconocimiento especial a Hermann Bellinghausen, enviado de este diario a Chiapas, a quien definió como ``historiador del presente''. La Jornada, dijo, ``debe felicitarse por la fortuna de tenerlo entre sus reporteros''.

Previamente, los accionistas escucharon, debatieron y aprobaron los informes del Consejo de Administración sobre el ejercicio social de Demos en 1997, y conocieron el dictamen de los comisarios de la empresa sobre los estados financieros. Ambos comisarios --Iván Restrepo y David Márquez Ayala-- fueron reelectos en sus funciones.