La Jornada 28 de abril de 1998

Lesionados también, un judicial y un empleado en la comunidad Los Plátanos

Elio Henríquez y Angeles Mariscal, corresponsales, Comunidad Los Plátanos, municipio de El Bosque, Chis., 27 de abril Ť Un agente del Ministerio Público, su secretario y un policía judicial fueron emboscados y heridos hoy, cuando acudían a esta comunidad a dar fe de otro ataque ocurrido anoche, que dejó un saldo de un muerto y dos lesionados.

Esta situación ha generado una fuerte tensión en la zona, que es patrullada y vigilada por soldados y policías estatales, pues para este martes se espera la visita del presidente Ernesto Zedillo a San Cristóbal de las Casas, Ocosingo y otros municipios de la llamada zona de conflicto.

Los funcionarios habían sido notificados esta madrugada de la muerte de Humberto López Hernández y de las heridas que sufrieron Juan Ruiz Hernández y Miguel Núñez, priístas de la comunidad Los Plátanos, quienes según el comunicado de prensa número 503/98 del gobierno del estado, fueron agredidos presuntamente por miembros del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

El agente del Ministerio Público, Javier Hernández Peña; su secretario Francisco Antonio Estrada Villatoro; el agente de la Policía Judicial del estado, Ricardo César Guerrero Cejas, y tres policías estatales, se trasladaron al lugar para levantar el cadáver y tomar las declaraciones correspondientes a los testigos.

Nos dispararon desde un cerrito, narra uno de los lesionados

Estrada Villatoro --quien está internado en el hospital de Bochil-- explicó que a las 2 de la madrugada de este lunes, cuando les faltaban 500 metros para llegar a Los Plátanos, ``fuimos emboscados, disparándonos desde un cerrito''. En estos hechos resultaron heridos el declarante, el policía Guerrero Cejas y el Ministerio Público, Hernández Peña, quien presenta dos rozones de bala.

La camioneta blanca de la Procuraduría de Justicia del estado en que se trasladaban, presenta alrededor de 20 impactos de diversos calibres y varios cristales fueron rotos.

A su vez, el concejo autónomo de El Bosque negó que simpatizantes del EZLN hayan disparado. ``Lo único que nosotros esperamos es el cumplimiento de los acuerdos de San Andrés, y no estamos utilizando las armas porque no las tenemos, esas las tienen los uniformados y los paramilitares'', agregaron.

En un comunicado, expuso que las bases de apoyo del EZLN en Los Plátanos han sido ``amenazadas de muerte y perseguidas por los priístas'', lo que provocó el desplazamiento de 110 personas que tuvieron que abandonar sus casas, las cuales ``han sido saqueadas''.

Por su parte, el indígena Juan Ruiz Hernández --quien se halla hospitalizado en el vecino municipio de Bochil, a causa de varios impactos de bala-- explicó que ayer (domingo) a las 11 de la noche, cuando habitantes de Los Plátanos participaban en el novenario del también priísta Andrés López Hernández, asesinado el 18 de abril, fueron atacados por desconocidos. Dijo que a esa hora, protegidos por la oscuridad, varios hombres ``encapuchados'' dispararon y mataron en el acto a Humberto López Hernández y lo hirieron a él y a Miguel Núñez.

``Cuando oímos los balazos, yo ví que mi compañero cayó muerto; yo estaba herido, las mujeres gritaban y se tiraban al suelo con los demás compañeros'', añadió Ruiz Hernández, quien fue reportado como delicado de salud.

El origen inmediato de los sucesos sangrientos de anoche y esta madrugada tiene que ver con el asesinato del priísta Andrés López Hernández, el 18 de abril pasado. Después de ese fallecimiento, las aproximadamente 370 familias priístas demandaron que se hiciera justicia.

Ante la presión y ``amenazas de muerte'' en su contra, las 34 familias que simpatizan con el EZLN abandonaron la comunidad la madrugada del pasado viernes, sin que se sepa dónde se encuentran.

Los priístas dicen: ``Son ellos los que nos dispararon anoche, porque un día anterior andaban con sus rifles y habían amenazado con matarnos, pero no lo creíamos. Sí, son zapatistas porque estaban dando vuelta con sus rifles'', aseguró Juan Ruiz Hernández, en el hospital de Bochil.

Al mismo tiempo, en esta comunidad, el priísta Humberto López Hernández era velado en medio de un ambiente de tensión y de una fuerte presencia policiaca.

Divididos en pequeños grupos ``para evitar ser sorprendidos'', los enardecidos militantes del Partido Revolucionario Institucional recorren la comunidad, mientras decenas de agentes policiacos están en el centro fuertemente armados.

En evidente estado de ebriedad, muchos de ellos --aconsejados por José Arbolella, delegado de la Secretaría de Gobierno en esta región-- se negaron a dar declaraciones a los reporteros que estuvieron aquí por la tarde.

``Ya váyanse a chingar a su madre'', gritó uno de los indígenas a los comunicadores, desde el interior de la casa donde se realizaba el velorio.

Demandan la salida del Ejército en Simojovel

Por su parte, campesinos del municipio de Simojovel, colindante con el de El Bosque, demandaron la salida del Ejército de sus comunidades, tras considerar que los efectivos militares ``dividen y provocan enfrentamientos'' entre los pobladores.

Herminio Méndez Gómez, presidente del Frente Unificado Campesino y Popular de Simojovel, informó que desde 1994 --pero particularmente en los últimos meses-- la ``intromisión'' del Ejército Mexicano a las comunidades indígenas del municipio se ha incrementado.

En asambleas realizadas en diferentes poblados, decidieron demandar a las autoridades el retiro de los soldados, tras considerar que ``puede suceder un zafarrancho si el Ejército federal sigue entrometiéndose en las comunidades indígenas, porque es un acto de provocación aunque digan ellos que solamente transitan en la carretera'', concluyeron los campesinos.