Vasta operación policiaco-militar en San Cristóbal; 13 detenidos
Elio Henríquez y Angeles Mariscal, corresponsales, San Cristóbal de las Casas, Chis., 8 de abril Ť Durante un operativo realizado esta madrugada, más de mil efectivos --entre soldados y policías estatales y federales que contaron con el apoyo de tanquetas-- catearon decenas de viviendas en colonias del norte de esta ciudad, donde se decomisaron armas, vehículos y se detuvo a 13 personas, entre ellos los dirigentes evangélicos de San Juan Chamula, Domingo López Angel y Manuel Collazo Gómez.
Por su parte, el gobernador Roberto Albores Guillén afirmó que las detenciones efectuadas ``son un mensaje y una señal clara de un estricto apego a derecho'' en el estado. Hace mucho tiempo, añadió el mandatario, que el pueblo de San Cristóbal era rehén de un grupo que atentaba en su contra y vulneraba las estructuras elementales y jurídicas.
De acuerdo con la agencia Notimex, Albores Guillén rechazó que las detenciones tuvieran un móvil político, pues se realizaron con base en órdenes de aprehensión giradas de antemano.
El procurador de Justicia en el estado, Rodolfo Soto Monzón, aseguró que los detenidos tenían en su poder autos robados y bombas de fabricación casera. Refirió que López Angel y Collazo Gómez, líderes del Consejo de Representantes Indígenas de los Altos de Chiapas (Criach) y la Organización de los Pueblos Evangélicos de Chiapas (Opech), respectivamente, son acusados de diversos delitos considerados como graves.
Luego de que el pasado viernes la Procuraduría de Justicia detuviera a Juan Pérez Heredia, segundo regidor de San Juan Chamula, y Mateo Jiménez Bautista, escribano de ese ayuntamiento --quienes poseían 13 granadas y dos lanzadores--, los policías y militares llevaron a cabo hoy el operativo Sampopo, que tuvo su centro de operación en la colonia La Hormiga de donde, según el procurador general de la República, Jorge Madrazo Cuéllar, ``salieron las armas hacia Acteal''.
Soto Monzón informó que a los detenidos se les decomisó una pistola calibre .38, un rifle .22, diez metros de cordón detonador, bombas de fabricación casera, 73 vehículos de ``procedencia dudosa'' y madera talada ilegalmente.
El subprocurador de Justicia para la zona Altos, Miguel Angel Yáñez Mijangos, precisó que los vehículos eran utilizados para el transporte público sin las correspondientes concesiones.
Nos agarraron dormidos: colonos
Según los habitantes de La Hormiga, El Paraíso y Getzemaní, el operativo comenzó antes de las cuatro de la mañana y durante cinco horas el Ejército y la policía establecieron ``un cerco y no podíamos entrar ni salir''.
Narraron que los habitantes de la zona fueron ``sorprendidos cuando dormían, pues de repente ya teníamos adentro de las comunidades y de las casas a los policías''. Expresaron que en varios casos, las puertas de las viviendas fueron derribadas para entrar y detener a los inculpados.
Emilio Pérez, dirigente de la organización denominada Vashakmen, dijo que los soldados y los agentes --que aparentemente eran encabezados por el general Isaac Jiménez García, comandante de la 31 Zona Militar-- ``catearon ilegalmente muchas viviendas, robaron las antenas y los radios de banda civil, y también dinero y grabadoras''.
Agregó que durante cinco horas, en La Hormiga, El Paraíso y Getzemaní --entre otras colonias habitadas en su mayoría por evangélicos expulsados de San Juan Chamula y otros municipios-- ``vivimos como en un estado de sitio, sin que se respetaran nuestros derechos''.
Pérez aseguró que los primeros en ser detenidos fueron el ex diputado local perredista Domingo López Angel, Juan Gómez Ruiz, también dirigente del Criach, y Manuel Collazo Gómez, quienes antes estuvieron presos y tenían otras órdenes de aprehensión por delitos graves como secuestro, homicidio, robo con violencia, despojo, violación calificada y lesiones.
También fueron capturados ``en flagrancia'' René Ruiz Bueno, Rafael Ruiz Bueno, Rafael Ruiz Jiménez, José Hernández Hernández, Juan Gómez Etzin, Mateo Gómez López, Fernando Hernández Gómez, Pedro Gómez Pérez, Francisco Ramírez Pérez y Agustín López Hernández, quienes a las siete de la mañana fueron trasladados en helicóptero al penal de Cerro Hueco, en Tuxtla Gutiérrez.
Hasta antes de las ocho horas, el cerco militar-policiaco impedía el acceso de los lugareños y periodistas a La Hormiga, cuyo cerro del mismo nombre estaba copado por decenas de militares fuertemente armados, quienes además estaban apostados en puntos estratégicos y en las bocacalles a bordo de tanquetas.
Desde hace un par de años, en que los dirigentes detenidos y sus organizaciones comenzaron a realizar actos como secuestros de funcionarios y ciudadanos, diversos sectores de la localidad habían solicitado al gobierno que se hiciera un operativo para decomisar armas y drogas, que eran comercializadas con el conocimiento y complacencia de las autoridades.
Entrevistado en sus oficinas de esta ciudad, el subprocurador de Justicia para la zona Altos, Miguel Angel Yáñez Mijangos, negó que las fuerzas del orden hayan realizado cateos ilegales, como denunciaron los indígenas. ``En este momento, no tenemos pruebas de que haya existido violencia ni se han presentado denuncias, y nosotros tenemos la autorización del juez para realizar los cateos'', manifestó.
Precisó que en la acción participaron 460 policías estatales, aparte de los soldados, cuyo número no especificó.
--¿Cómo se justifica legalmente la presencia del Ejército? --se le preguntó.
--Nosotros estamos haciendo una intervención mixta solicitando el apoyo logístico.
--¿Unicamente para seguridad?
--Si usted le quiere llamar así, bienvenido.
Los policías y soldados se retiraron a las 9:30 horas de La Hormiga, donde cientos de indígenas permanecieron concentrados analizando qué acciones van a tomar para exigir la liberación de sus dirigentes. Esta tarde, la zona estaba en aparente calma.
Al momento de retirarse, uno de los agentes federales llevaba tres fotografías enmarcadas, en las cuales aparece López Angel, por separado, con el obispo Samuel Ruiz García, el ex presidente Carlos Salinas de Gortari y con el ex secretario general de Gobierno, Eraclio Zepeda. ``Falta que detengamos a éstos, pero no se dejan'', bromeó el policía.
Varios dirigentes de las colonias mencionadas habían anunciado una conferencia de prensa para esta noche, pero de última hora fue cancelada sin explicación, pues viajaron a Tuxtla Gutiérrez para intentar hablar con los detenidos y las autoridades.
Por la noche, diversas organizaciones no gubernamentales consideraron que en el operativo participaron entre 2 mil 500 y 3 mil elementos. En un comunicado de prensa, los organismos subrayaron que los policías y soldados realizaron ``detenciones ilegales, allanaron domicilios y rompieron puertas, amedrentaron y amagaron a mujeres y niños''.
Domingo López Angel fundó la Criach el 7 de septiembre de 1984, a raíz de las expulsiones de evangélicos. En 1994 se afilió a la Unión Nacional Lombardista, compartiendo con su dirigente, Oscar de León González --preso en Cerro Hueco--, la diputación local por el PRD, misma de la que fueron desaforados en septiembre de 1996, luego de ser expulsados por ese partido. En los últimos meses, López Angel se vinculó con sectas musulmanas e incluso intentó donarles un templo evangélico, pero se lo impidieron los afectados.
Por su parte, Manuel Collazo creó la Opech después de confrontarse con López Angel y abanderó las demandas de los indígenas evangélicos que le siguieron.
Esta es la segunda ocasión, en menos de un año, que es detenido.
La familia Collazo es conocida por dedicarse al tráfico de armas y mantener el monopolio del transporte público en el estado de Chiapas.