La Jornada 31 de marzo de 1998

Donde falta más asistencia social existen menos recursos: DIF

Angeles Cruz Ť Un aumento de la pobreza -incluso en sectores medios- y el desempleo en las zonas marginadas son fenómenos cada vez más evidentes en México, afirmó Mario Luis Fuentes Alcalá, director del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), y destacó que la política de asistencia social está en un ``círculo perverso'', pues en los lugares con mayores carencias y reclamos son menores las capacidades de atención.

Las principales consecuencias, abundó, se reflejan en la desintegración familiar y en una mayor vulnerabilidad de mujeres, niños y adultos cuya condición es, por sí misma, un factor de riesgo. Por eso existe la urgente necesidad de articular los procesos de apoyo a la población que más lo necesita, dijo.

Al encabezar la quinta Reunión Nacional de Directores Estatales del DIF, Fuentes Alcalá destacó que los cambios tendrán que empezar con el fortalecimiento del nivel municipal y con la transferencia no sólo de recursos, a través de la descentralización, sino también de la capacidad de concertación con otras instancias del ayuntamiento y el estado de que se trate.

``La pobreza es falta de oportunidades e impacta de manera más virulenta a los miembros frágiles de la sociedad, afectando su proyecto de vida, y por tanto su estima como persona'', argumentó durante su intervención.

El director del DIF también subrayó la importancia de que la asistencia social sea concebida como un factor de prevención y pueda evitar, por ejemplo, la desintegración de la familia. Una vez fracturado este núcleo, ``empieza un proceso de abandono y fragilidad que ya no es posible compensar con ninguna política pública''.

Ante los titulares del DIF de toda la República, Fuentes Alcalá propuso la creación del Sistema Nacional de Asistencia Social y Pública, que deberá tener capacidad para articular acciones en los tres niveles de gobierno, en el marco de la descentralización y el esquema federal.

El sistema nacional referido tendrá que incluir estrategias de desarrollo -hasta ahora inexistentes- para las zonas más frágiles y excluidas, víctimas del maltrato, abandono, la violencia intrafamiliar e incluso, la desnutrición.

Dijo que el reto principal de la asistencia social en su nuevo concepto es lograr que los grupos vulnerables tengan autonomía y capacidad de autogestión.

En el mismo evento, José Carlos Cuentas-Zavala, representante del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) en México, señaló la importancia de impulsar acciones que lleven a la movilización social en favor de la defensa de los derechos de la infancia. Dijo que el organismo internacional siempre estará dispuesto a colaborar para que esto pueda realizarse.

Lo más importante será coordinar acciones que luchen contra la prostitución infantil y la situación desfavorable de los niños migrantes, explicó. En entrevista posterior, Cuentas-Zavala, reiteró que el problema más grave de la población infantil en México es la desnutrición.

La situación familiar determina 40% de la eficiencia escolar

Comentó que hay fenómenos nuevos en el mundo y México no escapa a ellos, como son la prostitución, fenómeno que es controlado desde los países desarrollados y para el cual habrá que diseñar las estrategias necesarias para abatirlo.

Al señalar la importancia de evitar o prevenir la desintegración familiar en favor del desarrollo de los niños y niñas, Mario Luis Fuentes comentó que diversos estudios internacionales han concluido que la eficiencia escolar está determinada en un 40 por ciento por la situación de la familia del menor.

La reunión de directores estatales que se prolongó durante todo el día tuvo como principal objetivo realizar un diagnóstico inicial sobre las tareas que tendrán que emprenderse a fin de transformar y privilegiar la política de asistencia social como estrategia para el bienestar de la sociedad. A la fecha, el DIF nacional ha organizado este tipo de reuniones en siete estados, abarcando un total de 255 municipios.

De esta experiencia, Mario Luis Fuentes comentó que a nivel de municipios, el problema ha sido que no se da a la asistencia social ``el peso debido. Se considera más como una acción personal de la esposa del Presidente, que una política de gobierno municipal''.

De hecho, abundó, existe una confusión sobre el papel de la presidenta del DIF municipal y el carácter honorífico del cargo. Este asunto se analiza con detalle, toda vez que ``al considerar la asistencia como una práctica voluntaria, (los munícipes) ofrecen un escaso y discrecional financiamiento''.

En algunos casos, en el DIF municipal se desconoce qué tipo de estructura tiene, recibe recursos tanto del gobierno federal y el estatal y no hay claridad sobre si le corresponde o no una aportación directa del gobierno municipal.