El gobierno, al rescate de ingenios privatizados: cámara del ramo
Angélica Enciso L., enviada, Oaxaca, Oax., 27 de marzo Ť En unos días se publicará en el Diario Oficial un decreto en el que se establece que la Secretaría de Hacienda restructurará la deuda de 2 mil millones de dólares que tiene la industria azucarera y el anuncio de la pignoración de 600 mil toneladas de azúcar para estabilizar el mercado interno, anunció Alberto Santos de Hoyos, nuevo presidente de la Cámara Nacional de la Industria Azucarera y Alcoholera (CNIAA).
Aseguró que a mediano plazo se buscará a exportar a Estados Unidos los excedentes de producción (que el año pasado sumaron 750 mil toneladas), ya que ese país consume diez millones de toneladas de azúcar al año, y México sólo cuatro millones de toneladas. Se insistirá en que Estados Unidos respete el espíritu del TLC.
Luego de tomar posesión ante los miembros del consejo, entre quienes estaban importantes productores de azúcar como Aarón Sáenz y Enrique Molina --dueño del grupo Escorpión--, Santos de Hoyos explicó en entrevista que la industria azucarera originalmente acordó que la deuda contraída con Financiera Nacional Azucarera se pagaría en diez años, pero una empresa que busca ser sana, dijo, no puede hacer eso.
Dijo que los plazos para el pago de la deuda se ampliarán y la restructuración de los adeudos colocados en Udi se negociarán individualmente, ya que la situación de cada ingenio es diferente.
Aseguró que los ingenios no requieren subsidios fiscales sino mayor plazo para liquidar sus adeudos, pues ``no se trata de ahogarlos sino de darles los plazos necesarios para que cumpla sus obligaciones''.
El sector azucarero, afirmó, ha vivido en crisis durante los últimos años a raíz de la privatización de los ingenios, sobre todo ``porque no tenemos un programa nacional como otros sectores'' y se puso en peligro la subsistencia de ``20 o más ingenios''.
Sin embargo, dijo, se ha logrado un acuerdo entre trabajadores, productores de caña e industriales, con apoyo de las autoridades, para ``esbozar'' con el decreto un programa nacional para la industria azucarera que ``nos dará certidumbre y nos permitirá subsistir''.
Con el decreto que se publicará en breve se certificará que los excedentes acumulados en años anteriores se debieron a la falta de un programa azucarero y por la introducción de alta fructosa, que desplazó en los últimos tres años casi un millón de toneladas de azúcar del mercado mexicano.
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