Apoyan sindicatos la creación de un fondo de rescate para las universidades públicas
Claudia Herrera Beltrán Ť Más de 80 sindicatos universitarios del país se sumaron ayer a la iniciativa de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados de crear un fondo de rescate para las universidades públicas y anunciaron un movimiento nacional para impulsar un incremento salarial de emergencia.
Durante la inauguración del Primer Foro Nacional de Sindicatos Universitarios por el Fortalecimiento de la Educación Superior Pública Media y Superior, los líderes de las tres organizaciones que aglutinan a los sindicatos universitarios coincidieron señalar que las universidades públicas han tomado medidas, como la renta de espacios, para hacer frente a las carencias económicas ocasionadas por un presupuesto bajo para la educación superior.
A través del dirigente del Sindicato de Trabajadores de la UNAM, Agustín Rodríguez, el gremio universitario rechazó la política gubernamental en materia de educación superior y se pronunció por una reestructuración del gasto social para incrementar los recursos destinados al sector educativo.
El también miembro de la dirigencia de la Federación Nacional de Sindicatos Universitarios (FNSU) auguró que de continuar el actual modelo gubernamental en materia educativa, la universidad pública se debilitará aún más y continuará creciendo el número de instituciones privadas de educación superior. En ese sentido, mencionó que ahora existen 42 universidades públicas y 50 privadas.
Al evento que concluye hoy en el Centro de Convenciones del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social, acudió el presidente de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, Armando Chavarría, quien explicó que a mediados de abril quedará lista la propuesta para constituir un fondo para el rescate de las universidades públicas que permitirá a por lo menos 15 de éstas resolver algunos de los problemas económicos que padecen.
El diputado perredista señaló que pese a los recortes presupuestales a causa de la baja en los precios del petróleo, es posible dar apoyos adicionales a las universidades públicas, pues se espera una mejora en la situación económica del país.
Chavarría explicó que esta propuesta cuenta con la anuencia de varios rectores y podría beneficiar a las universidad de los estados de Tabasco, Guerrero, Oaxaca, Chiapas, Jalisco, Querétaro y Nuevo León.
En su oportunidad, el senador Francisco Javier Salazar, secretario de la Comisión de Educación de ese órgano, invitó a los sindicalizados a hacer causa común para impulsar un incremento gradual al presupuesto educativo de manera que represente ocho por ciento del producto interno bruto, como lo recomienda la Unesco.
Alejandro Vega, secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM, expuso por su parte que harán un llamado al resto de los sectores universitarios para que defiendan el papel social de las universidad públicas y demanden un aumento de recursos.
Expuso que hay una confrontación con la política oficial porque se dice que la disminución del presupuesto no afectará el sector educativo, siendo que en la primera ocasión sí hubo este problema. Por ello, señaló que es ``suicida'' que continúe restringiéndose el gasto educativo cuando se pone en juego el futuro del país.
Por otra parte, el diputado Chavarría indicó que el secretario de Educación Pública, Miguel Limón Rojas, ya fue citado a comparecer ante la Comisión de Educación de ese órgano legislativo para que aclare el monto de la disminución del presupuesto, que según los legisladores es superior a los mil 500 millones de pesos, pero según cifras oficiales es de 960 millones de pesos.
Para el dirigente de la Coordinadora Nacional de Sindicatos Universitarios de Educación Superior (Contu), León Gutiérrez Navas, existen amplias posibilidades de que surja un movimiento nacional de sindicatos en demanda de un incremento salarial de emergencia como sucedió el año pasado, cuando se rompió el tope de 12.5 por ciento de incremento en las percepciones hasta llegar a 17 por ciento.
Gutiérrez Navas, secretario general del sindicato académico de la Universidad Autónoma del Estado de México, indicó que pugnarán por la conformación de un fondo de resistencia para las universidades que se encuentran en severos problemas económicos y con riesgo de dejar de realizar sus funciones sustanciales.
Sobre la decisión de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) de alquilar sus espacios con un espíritu más comercial, las opiniones de los sindicatos se dividieron. Por un lado, Alejandro Vega enmarcó esta estrategia de financiamiento en un proceso de privatización y, por otro, Agustín Rodríguez y Gutiérrez Navas coincidieron en que es positivo pero no resuelve los problemas económicos de las universidades públicas.
Vega dijo en entrevista que la comercialización de inmuebles universitarios es una tendencia creciente en todo el país que es congruente con las políticas que ha promovido el gobierno federal y que los rectores han aceptado sin mayor cuestionamiento.
De esa manera, añadió, los titulares de las universidades públicas hacen a un lado el problema central de la educación superior que es la obligación del Estado de proporcionar un financiamiento suficiente a las instituciones educativas.