La Jornada 24 de marzo de 1998

Acataron 2 mil 500 choferes el segundo día de paro de transporte

Alrededor de dos mil 500 choferes afiliados a la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram) realizaron un paro a escala nacional, por segundo año consecutivo, en demanda de suspensión del pago de la tenencia vehicular y contra los aumentos en los combustibles.

Autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) rechazaron que el paro hubiera provocado algún tipo de conflicto en las carreteras del país -salvo en Tehuacán, Puebla, donde impidieron la circulación ``por unos minutos''-, pues únicamente detuvieron sus vehículos en los acotamientos.

Según informes de la Policía Federal de Caminos (PFC) el mayor número de unidades en paro se observó en las ciudades de Torreón, con 295; Monterrey, 258; Querétaro, 220; Guadalajara, 215; Gómez Palacio, 158; Acaponeta, 141; San Luis Potosí, 123, y Tehuacán, con 109.

También se presentó el caso de Morelos, donde los reportes de la PFC no informaron de un solo vehículo que se hubiera sumado al paro y otras ciudades, como Tamaulipas, sólo con seis unidades; Yucatán con 12 o Zacatecas, con 16 y la Zona Metropolitana del Valle de México con 50.

Las autoridades de la SCT informaron que no hubo incidentes durante el paro de camioneros, pero señalaron una ``baja representatividad'' porque el número de choferes que detuvieron sus vehículos ``no representan ni uno por ciento del total de unidades de carga que están registradas en todo el país''.

Indicaron que de los vehículos en paro, sólo unos dos mil 270 pueden considerarse como de transporte federal, ante más de 350 mil que existen como tales. Además, señalaron las autoridades de la SCT, en el paro también participaron choferes de microbuses (218), estatales de carga (321); 96 de servicios turísticos y 316 de pasaje.

En cuanto a una de las peticiones de los transportistas, la suspensión de la tenencia vehicular, se recordó que apenas la semana pasada el titular de la SCT, Carlos Ruiz Sacristán, hizo notar que esa petición debe ser presentada a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, pero sobre todo dijo que ``estos momentos no son los adecuados para hacer una derogación de este tipo'', porque ``es un impuesto que hay que pagar; se ha reducido de una manera muy importante en su monto con el propósito de facilitar a los transportistas el pago de ese impuesto y el reemplacamiento vehicular''.

Severas mermas al comercio organizado por los asaltos

El comercio organizado del país tiene elevadas mermas económicas, afectación grave en sus ganancias y altos costos de operación, por los cuantiosos y costosos robos que se cometen en la transportación de mercancías en el país, afirmaron la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) y la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México (Canaco).

Advirtieron que la situación es de escándalo, ya que se comete un promedio de 170 a 200 asaltos mensuales en carretera contra los transportes de carga, y la cifra va en ascenso; asimismo, hay un elevado número de intentos de atraco, además de los robos contra transportes de pasajeros.

En el último año -advirtió la Canaco de esta ciudad-, el volumen de incidentes delictivos se elevó 17 por ciento en promedio, sólo que estos son los robos reportados, y existen cifras indeterminadas de las cuales no se da conocimiento a las autoridades correspondientes.

De esta forma, el traslado de bienes se ha convertido en una ``pesadilla'' debido a la inseguridad que opera en toda la red carretera, e incluso en la zona urbana, mientras que los seguros de transporte se han elevado considerablemente e incluso algunas instituciones financieras se niegan a prestar este servicio, lo que eleva los costos para las empresas que no quieren ver perdida totalmente su mercancía.

Por su parte, la Concanaco señaló que se trata de robos muy organizados, en los que participan desde quienes los cometen hasta toda una red de distribuidores de la mercancía, la cual llega casi en su totalidad a manos dell comercio ambulante.

El negocio resulta tan jugoso que deja ganancias para todos los que participan en él, ya que se venden mercancías a bajos precios y sin haber hecho ninguna inversión mas que la compra de todo tipo de armas y además, es totalmente impune, pues aunque se expanda abiertamente en mercados públicos, no se da seguimiento a los casos, lo que ha hecho de estos delitos toda una industria de la economía subterránea, apuntó el organismo.

Según reportes de las organizaciones privadas del comercio, entre la mercancía que es robada con mayor frecuencia se encuentran: llantas, calzado, cigarros, jabón, mezclilla, productos de higiene personal, champús, cosméticos, ropa, medicamentos, vino, alimentos como huevo, aceite, maíz y azúcar, y hasta materiales de construcción como varilla. No hay límites.

Indican que anteriormente las carreteras eran las más afectadas por este tipo de delitos, pero ahora lo es igualmente la zona urbana, donde se supone que habría mayor vigilancia, y según las estadísticas que se tienen, prácticamente no hay mes en el que no se presenten estos casos. Además, hay semanas en las que el número de asaltos al transporte de pasajeros es mayor que al de carga.

La información establece que las autopistas que mayor incidencia delictiva tienen son: México-Querétaro; Oaxaca-Salina Cruz; México-Ciudad Juárez, en su tramo León-Celaya; Irapuato Guadalajara; México-Acapulco; Cuautla-Izúcar de Matamoros; Puebla en diversos puntos; Tampico-Barra de Navidad, y Guadalajara-Lagos de Moreno, pero la realidad es que no hay carretera segura.

En la zona conurbada al Distrito Federal, el mayor número de incidentes se da en el Municipio de Cuautitlán Izcalli; Naucalpan; Tlanepantla; Indios Verdes-Ecatepec y Ecatepec-Pirámides.

Descalifica agrupación afiliada a la CROC la protesta

El presidente de la Confederación Nacional de Transportistas -afiliada a la CROC-, Rodolfo Bastida, descalificó el paro nacional que realizaron ayer trabajadores del volante agrupados en el Consejo Nacional de Transporte.

Sostuvo que ``alguna mano negra'' está financiando ese movimiento y que, de acuerdo con sus propias fuentes de información, los paristas -encabezados por Elías Dib- fueron convocados a suspender labores a cambio de 500 pesos.

El objetivo, consideró Bastida, es desestabilizar al gremio porque sus peticiones (rechazo al pago de tenencia y reducción de cuotas de peaje, entre otras) ``son incoherentes y sin argumentos''.

Según cálculos del dirigente croquista, pararon, suspendieron actividades y bloquearon carreteras ``sólo 700 transportistas de miles que hay en gremio''. En la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos están afiliados 30 mil entre autotransportistas de carga y de pasajeros.

Bastida dijo que no existe ninguna organización de autotransportistas en el país que pueda realizar un paro en todo el país.

Dib y su gente están inflando cifras; por ejemplo, en San Luis Potosí participaron en el paro 125 unidades, en la salida de Pachuca 60 y en la de Querétaro 25, ``por lo que podemos asegurar que en todo este movimiento hay mano negra''.

El dirigente del sector transportista en la CROC dijo que existen otros mecanismos de gestión para resolver los problemas del gremio y que ``el paro, será el último recurso que se utilizará en este sector.

``En todo esto hay alguna persona que quiere armar un conflicto porque Elías francamente no tiene dinero para financiarlo. Es decir, alguien busca desestabilizar políticamente el programa de apoyo a transportistas'', expresó Bastida.

Destacó que diversas centrales ya lograron un descuento de hasta 60 por ciento en el pago de tenencias de los modelos 92 al 96, mientras que la Secretaría de Hacienda ``perdonó'' el pago de recargos de tenencias de 1992 a la fecha.

Por eso, reiteró, ``el paro de este lunes no tiene fundamento ni prosperará''. (Víctor Cardoso, Patricia Muñoz Ríos y Fabiola Martínez)