Zedillo: se protegerán al máximo inversiones petroleras
Mireya Cuéllar, enviada, y René Alberto López, corresponsal, Villahermosa, Tab., 18 de marzo Ť En la ceremonia conmemorativa del 60 aniversario de la expropiación petrolera, el presidente Ernesto Zedillo afirmó que el gobierno federal se esforzará para proteger al máximo el programa de inversiones de Pemex, pero que espera el respaldo de los trabajadores y de su sindicato en las decisiones que habrá de tomar en los próximos días, como resultado de la ``depresión'' del mercado petrolero mundial.
Con gritos de ``¡petroleros con Zedillo!'', ``¡petroleros con Zedillo!'', el Presidente fue recibido por unos mil quinientos trabajadores que se concentraron en la explanada del centro procesador de Gas Nuevo Pemex -a unos 35 kilómetros de esta capital, en los límites con el norte de Chiapas- para participar en la ceremonia conmemorativa de la expropiación.
Les voy a tomar la palabra ``compañeros petroleros'', dijo el Presidente, para inmediatamente después -sin entrar en mayores detalles- advertir que en los próximos días habrá de tomar medidas para enfrentar la crisis mundial de los precios petroleros.
La conmemoración fue también el marco para reiterar que ``el petróleo es y seguirá siendo nuestro'' no sólo porque es la voluntad del pueblo de México y así lo manda la Constitución, sino porque es ``una convicción inquebrantable'' del gobierno de la República.
El Presidente hizo el recuento de lo que Pemex ha significado para el desarrollo del país: nos ha proporcionado vastos recursos que se han invertido en escuelas, hospitales, carreteras y caminos, en electrificación y en otros servicios básicos.
En 60 años de una industria nacionalizada, apuntó, México se ha convertido en el quinto país productor de petróleo en el mundo y tiene asegurado el suministro de los energéticos que necesitan las familias y la planta productiva del país.
Desde aquí, rindió un homenaje a Lázaro Cárdenas, quien ``con patriotismo y visión'' reafirmó la soberanía nacional sobre los recursos naturales de nuestra patria.
Rodeado de ocho secretarios de Estado -entre ellos la canciller Rosario Green, que padeció su vestido negro bajo 38 grados de temperatura- y cinco gobernadores; de Veracruz, Chiapas, Campeche, Tamaulipas y Tabasco, el presidente Zedillo exhortó a sindicato y empresa a trabajar juntos para que Pemex siga cambiando y sea una empresa de vanguardia.
Recordó que su gobierno propuso en 1996 el programa de expansión de Pemex más importante en las últimas dos décadas -que concentra las mayores inversiones en la exploración y producción primaria-, el cual se ha transformado en ganancias; ``incluso en las condiciones actuales de los mercados internacionales, esa rentabilidad se traduce en buenos recursos para financiar los programas de la justicia social''. Fue cuando se comprometió a que el gobierno hará todo lo posible por proteger el plan de inversiones.
A lo largo del acto, que duro poco más de una hora, Zedillo escucho uno que otro grito de apoyo de los petroleros -``señor Presidente, señor Presidente, que no le quede la duda, ¡aquí está su gente!''-, que no son más aquellos contingentes de efusivos gritones que gustaban de hacer sonar sus matracas, si bien recibieron y dijeron adiós al Presidente con un coro bien organizado de ¡petroleros con Zedillo! ¡petroleros con Zedillo!
En está, que fue la sexta visita del Presidente a Tabasco, se inauguró también la planta criogénica de gas número tres, ubicada en el mismo complejo donde se desarrolló la ceremonia conmemorativa, que sustituye a la que explotó el 26 de julio de 1996 y costó la vida de ocho trabajadores. El centro procesador de gas Nuevo Pemex está a ocho kilometros del complejo procesador de gas Cactus, donde ocurrió la explosión.
El Presidente realizó una apretada agenda durante su estancia en está ciudad. Firmó el convenio de desarrollo social 1998, el acuerdo de coordinación para la instrumentación del Progresa y el convenio de desarrollo social municipal 1998-2000, además de inaugurar varias obras.
Todas las ceremonias tuvieron un escenario impecable; porras para el presidente y el gobernador, pancartas de agradecimiento y en el puente Carrizal 4, que el Presidente inauguró, el gobierno del estado se esmeró tanto que hasta mando pintar de un verde intenso el pasto seco de otros días. Aquí hace ya 70 días que no llueve.
El Presidente se encontró durante sus traslados por la ciudad con bardas recién pintadas donde un fondo verde hacía resaltar el negro de las letras con frases como: ``Aprendí a servir a México en el PRI: Ernesto Zedillo''. Hasta la campaña periodística emprendida hace varios días en el diario Tabasco Hoy contra Pemex y su director general, Adrián Lajous Vargas, se detuvo. Amplios reportajes sobre corrupción en Pemex, y de la contaminación petrolera -con grandes fotos a colores-, así como los desaciertos ``y traición a México'' de Lajous Vargas al frente de esa dependencia, fueron destacados en las páginas del matutino de mayor cobertura estatal.
Al senador perredista Auldárico Hernández Gerónimo, cabeza de la Coordinadora de Lucha Obrera, Campesina e Indígena de Tabasco (Closiet), el gobierno del estado le entregó (liberó) a cuatro campesinos presos desde hace un año por manifestarse contra Pemex, a cambio de no echarle a perder la visita presidencial. Había amagado con bloquear pozos durante la visita presidencial.
Una cascarita de sólo 10 minutos
El Presidente se resistía -``luego las fallo'' -, pero no mucho. Un grupo de escolares le ofrecía el balón, lo invitaba a inaugurar la cancha de básquetbol del nuevo parque público 18 de Marzo con una demostración de sus habilidades deportivas. No quiso canastear en seco; a cambio, en dos segundos organizó un disparejo y formó los equipos.
El gobernador Roberto Madrazo capitaneaba uno y el Presidente Zedillo otro. Al fin casi niños, los jugadores no les dieron tregua ni al gobernador ni al Presidente. Agiles, de un salto arrebataban el balón a los mandatarios. Todo se armó tan rápido, que el Presidente no identificaba bien a bien a sus compañeros de equipo. Cinco intentos de Zedillo por hacer coincidir el balón con el aro. Hasta el sexto lo logró, y ahí concluyó el partido, casi 10 minutos después de haber iniciado.
El Secretario de Educación, Miguel Limón Rojas, estaba satisfecho. Fue él quien ánimo a los estudiantes para que hicieran la propuesta al Presidente y al final intentó reconfortarlo: ``buena canasta''. A lo que Zedillo respondió de buen talante con un ¿hasta la veintiqué?
Era ya media tarde.