SHCP: se harán todos los recortes necesarios
Rosa Elvira Vargas, enviada, Santiago de Chile, 16 de marzo Ť Ante empresarios de Chile y México que afinaron aquí nuevos mecanismos de inversión y de apertura comercial, el presidente Ernesto Zedillo ratificó que su gobierno no dudará en hacer ajustes presupuestarios adicionales si continúa la caída de los precios del petróleo, pero en el mismo mensaje y para tranquilizar a su audiencia, aseguró que ``en 1998, el signo de la economía mexicana seguirá siendo su expansión''.
Día de tomar chicha y de oír mariachi; de obligadas referencias a Pablo Neruda y a Gabriela Mistral, pero que igual trajo en los discursos a Luis Miguel y al grupo roquero La Ley, fueron los toques ciertamente distintivos del primer día oficial de estancia presidencial en Chile, en una serie de encuentros donde se tocaron muchos temas pero sólo uno resaltó: el Tratado de Libre Comercio entre México y Chile.
Ha sido, entonces, una visita de Estado más parecida a un viaje de negocios donde los socios sellan una exitosa transacción. El presidente chileno, Eduardo Frei, lo dejó en claro: ``vivimos una nueva etapa en nuestras relaciones vecinales y regionales marcada por el proceso de democratización de nuestro continente y por cambios económicos que tienden a hacernos cada vez más interdependientes. En este nuevo marco de apertura económica, democratización y fortalecimiento del regionalismo, se hace más necesaria que nunca la complementación e integración económicas''.
Y es que si algo ha caracterizado la estancia del presidente Zedillo en este país --además de las ceremonias protocolarias donde chilenos y mexicanos hacen elogios mutuos de su cultura y sus poetas y se muestran algunas estampas de su folclor-- han sido las insistentes referencias a la conclusión de las negociaciones para la llamada ampliación del TLC entre las dos naciones y que, se informó aquí, será signado en definitiva por los presidentes en abril próximo, una vez que se dé formalidad jurídica al documento.
En la declaración conjunta derivada de la visita, dada a conocer esta mañana, se asegura que el TLC México-Chile tiene como principal objetivo otorgar transparencia y certidumbre a los agentes económicos de ambos países por medio del establecimiento de reglas de origen claras para los productos comerciados; disciplinas para que las normas técnicas, fito y zoosanitarias no se conviertan en barreras al comercio, y reglas para el intercambio de servicios.
Asimismo, el instrumento comercial otorga seguridad jurídica para los inversionistas de ambos países; normas en materia de propiedad intelectual que regulan y protegen el uso de marcas, y un procedimiento de solución de controversias.
El esfuerzo de ampliación, se menciona, tenía amplia justificación sobre todo porque a raíz del primer acuerdo comercial que está vigente desde 1992, el intercambio de bienes entre México y Chile creció casi 600 por ciento, y los flujos de inversión, sobre todo la mexicana en este país, se incrementó 300 por ciento.
Zedillo inició formalmente su visita a Chile este lunes, con una ofrenda floral ante el Altar a la Patria, que aquí está representado por el monumento al libertador Bernardo O'Higgins, y de ahí pasó al Palacio de La Moneda, esa edificación con una historia mucho más grande que sus dimensiones físicas. Con ese sello militarista que los chilenos dan a todas sus ceremonias oficiales, el Presidente mexicano fue recibido en la Plaza de la Constitución por soldados de la Guarnición de Santiago.
Al trasponer la entrada principal de La Moneda, donde una de sus primeras puertas está coronada por una frase en metal que dice ``Por la razón o la fuerza'', el mandatario mexicano fue recibido también por elementos del tristemente célebre Cuerpo de Carabineros, que con voz marcial entonaron el himno ``Sucumbe la mar'', repitieron el nombre del visitante y rindieron los honores del arma.
En uno de los patios de La Moneda y mientras Zedillo y Frei sostenían conversaciones privadas, un joven oficial de carabineros ubicaba físicamente a los visitantes del área bombardeada el 11 de septiembre de 1973, por las fuerzas que dirigía el ahora flamante senador vitalicio Augusto Pinochet para derrocar al presidente Salvador Allende. El provinciano policía tenía, dijo, apenas cuatro meses de nacido cuando se dio el golpe de Estado, pero sabe muy bien que el ataque se dio sobre el ala oriente de La Moneda y donde hoy, ya reconstruido pero con todo bastante deteriorado, están las oficinas de la esposa de Frei, porque él se mudó al ala poniente.
En Chile no hay más policía uniformada que los carabineros. Y la gente los ve con temor. Sabe que con ellos no se juega y que entran en acción lo mismo ante las protestas políticas que concita el general Pinochet, que en los constantes disturbios finsemanales por los partidos de futbol. El reporte de cada lunes, sobre todo si se enfrentaron los archienemigos Colo Colo y la Universidad de Chile, habla siempre de decenas de detenidos por pleitos entre sus barras (porras).
Zedillo y Frei, que atestiguaron la inicialización del TLC ampliado, ratificaron sus expectativas de que con el acuerdo se abrirá ``un nuevo capítulo, más prometedor, más generoso y más productivo de nuestra relación económica'', y que contribuirá ``de manera importante'' en el crecimiento económico, porque ambos países ``están esforzándose con ahínco para combatir la pobreza''.
Al dejar la sede presidencial, Zedillo fue también saludado por gente del pueblo que, bien se sabe, tiene fuertes lazos afectivos con México. Algunos ``vivas'' al mandatario, pero ante todo, para los ``cuates'' y para los ``chilenos chilangos'', acompañaron la partida del convoy presidencial.
Las actividades del Presidente continuaron con un almuerzo con empresarios mexicanos y chilenos de la Sociedad de Fomento Fabril. El presidente chileno, fiel defensor de la apertura comercial, afirmó que el país que se rezaga o que opta por aislarse está condenado al estancamiento y al subdesarrollo; apuntó que el regionalismo ``ha llegado para quedarse'', pero sobre todo advirtió que si los nuevos espacios económicos se convierten en verdaderos bloques comerciales cerrados, sus beneficios ``serán reducidos''.
En su turno, el presidente Zedillo se refirió a las que llama ``profundas transformaciones'' que realiza México y que, dijo, incluyen la consolidación de la democracia. ``La normalidad democrática --indicó-- como forma permanente de convivencia política, constituye un factor de unión nacional, al tiempo que fortalece nuestra soberanía y nuestra presencia en la comunidad internacional''.
Fue ahí cuando ratificó que no habrá dudas si ante la continuación de la caída de los precios del petróleo, su gobierno debe realizar un nuevo recorte presupuestal, y enseguida confió en que con todo, este año se logre crecimiento económico. Ello porque, enfatizó, el notable aumento y diversificación del comercio exterior y el hecho de que el gasto público ya no sea el motor más importante del crecimiento económico, permitirán transitar ``por esta depresión en el mercado petrolero con una economía en franco proceso de expansión''.
En su agenda de este día, el mandatario mexicano incluyó visitas de cortesía a los presidentes del Senado, de la Cámara de Diputados y de la Suprema Corte de Justicia de Chile.
Asimismo, en la municipalidad de Santiago, Zedillo recibió del alcalde Jaime Ravinet el título de huésped distinguido. Por la noche, en una cena en su honor en La Moneda, Zedillo fue condecorado con la Roseta del Gran Collar de la Orden al Mérito de Chile. También ahí, en los discursos de la recepción, el tema del TLC salió a relucir.
Mañana martes, Zedillo y Frei viajarán a la sureña ciudad de Concepción, donde inaugurarán la autopista del Itata, realizada por la constructora mexicana Tribasa. De ahí volará a México y su arribo está previsto para después de las 20 horas.
Reuters, Ap, Notimex, Afp, Pl y Dpa, Cartagena de Indias, 16 de marzo Ť El secretario de Hacienda, José Angel Gurría, dijo hoy que podrían requerirse más recortes presupuestarios para ayudar a su país a soportar los golpes de los disminuidos precios internacionales del petróleo. El funcionario agregó que México realizaría los recortes adicionales necesarios para mantener la estabilidad fiscal.
Por su parte, el subsecretario del Tesoro de Estados Unidos, Lawrence Summers, aseguró que América Latina está ahora en mejores condiciones para enfrentar la crisis financiera de Asia, que hace cuatro años. En un discurso ante la asamblea anual del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el funcionario nombró específicamente a Brasil y Argentina, para ejemplificar a dos países que contrarrestaron exitosamente las turbulencias generadas por el llamado ``efecto dragón'' en sus economías.
En términos similares se expresó el presidente del BID, Enrique Iglesias, quien al participar en la sesión inaugural de la 39 asamblea anual de gobernadores del banco, indicó que América Latina está ahora mejor preparada para reducir los efectos de contagios externos, en especial frente a crisis como la que experimentan algunos países asiáticos. El banquero también se refirió a la redefinición del papel del Estado, ``que es la gran tarea que los países del continente enfrentan este fin de siglo''.
Entrevistado en el marco de la asamblea del BID por Reuters-Tv, Gurría dijo que ``no dudaremos en tomar cualquier decisión que sea necesaria para proteger no sólo la cuenta corriente, sino también los objetivos presupuestarios. Quermos tomar decisiones antes y no después'', indicó luego de señalar que los recortes adicionales al gasto público podrían ser anunciados el mes próximo.
Gurría aseguró que el petróleo crudo representa ahora menos de 10 por ciento de las exportaciones de México. Pero señaló que el sector petrolero sigue generando cerca de un tercio de los ingresos fiscales y la caída de los precios del hidrocarburo ha presionado fuertemente las balanzas presupuestarias y de comercio exterior.
``Si es necesario, tendremos que realizar más ajustes'', advirtió el secretario de Hacienda, quien agregó que México tiene que enfrentar la caída de los precios mundiales del petróleo, ``que ha sido muy empinada'' y no muestra señales de terminar en el corto plazo. El ex canciller ha dicho que espera que el PIB mexicano crezca casi 5.0 por ciento este año, poco menos de los pronósticos iniciales de 5.2 por ciento.
Dijo que si bien ``son bastante difíciles'' las medidas aplicadas en América Latina debido a las repercusiones de la agitación financiera en Asia, éstas han demostrado que la región está ``fundamentalmente sana y lista para enfrentar retos futuros''. Indicó que la región está ``en cierta forma vacunada'' ahora y la crisis en Asia podría atraer nuevos flujos de inversión.