La Jornada 17 de marzo de 1998

SRE: deben acatar reglas mexicanas los agentes de la DEA en la frontera

David Aponte Ť Los agentes de la DEA tendrán que cumplir las ``reglas'' mexicanas para desempeñar sus labores en las Fuerzas Bilaterales de Tarea Fronteriza: no tendrán autorización para portar armas, afirmó ayer el subsecretario para América del Norte y Europa de la cancillería, Juan Rebolledo Gout.

A pesar de que los 22 agentes policiacos de Estados Unidos no están ingresando a territorio mexicano, los gobiernos de ambos países comparten reportes de inteligencia. ``Hay muchas formas de mantener el intercambio de información. Estas son las reglas. Es nuestro territorio y se deberá cumplir'', argumentó.

Rebolledo Gout explicó a la prensa que los Bilateral Border Task Force (BTF) continúan con sus labores: ``Simplemente no se ha perfeccionado su integración bilateral, pero eso no quiere decir que no estén interactuando, que no estén intercambiando información. Lo que importa es que estos grupos operen, sirvan al propósito para el que fueron creados y que avancemos en la lucha contra este mal terrible que aqueja a las dos sociedades''.

Desde hace varias semanas, las operaciones de los agentes de la DEA, el FBI y el Servicio de Aduanas en las BTF fueron suspendidas por razones de seguridad y ``sospechas'' de que sus contrapartes, algunos comandantes mexicanos, no son lo suficientemente confiables.

Los agentes estadunidenses dejaron de colaborar en los grupos fronterizos, dejaron de ingresar a territorio de México, porque el gobierno no les ha ofrecido las suficientes garantías de seguridad y sus enlaces mexicanos no tienen ``experiencia'' o algunos podrían tener nexos con los cárteles de la droga, según la DEA.

Las autoridades mexicanas y estadunidenses encargadas de la lucha contra las drogas no han podido llegar a un arreglo sobre los mecanismos de seguridad de sus agentes. Washington ha solicitado la utilización de armas y México no ha aceptado.

El subsecretario Rebolledo dijo que el gobierno mexicano va a mantener su posición y no va a autorizar que agentes extranjeros acreditados en territorio nacional puedan utilizar armas de fuego. Son las reglas y es nuestra jurisdicción territorial, indicó.

De la salida de los agentes de la DEA, consideró que todavía hay un margen muy amplio de cooperación en materia antinarcóticos con las autoridades de Estados Unidos. ``Creo que debemos verlo así y ese es el objetivo: luchar contra estos cánceres de la sociedad, que son los cárteles de los narcotraficantes, pero con respeto a las leyes de cada país''.

Los BTF fueron desmantelados a principios de 1997 luego de la detención del general Jesús Gutiérrez Rebollo, acusado de tener vínculos con el cártel de Juárez, y reinstalados a finales del mismo año en tres ciudades de la zona fronteriza con cinco pequeñas oficinas satélite: Tijuana con enlaces en Mexicali, San Luis Río Colorado y Nogales, y Ciudad Juárez y Monterrey con nexos en Reynosa y Matamoros.

Hace algunas semanas, las agencias antidrogas de Estados Unidos decidieron que sus 22 agentes no participarán en las BTF, hasta que el gobierno de México ofrezca las medidas adecuadas para garantizar la seguridad de los policías estadunidenses.

El subsecretario Rebolledo confirmó que los agentes de la DEA, el FBI y el Servicio de Aduanas no están trabajando en coordinación con sus contrapartes mexicanas.

En relación con el adiestramiento antinarcóticos que reciben militares mexicanos en Estados Unidos y otros países, dijo que los oficiales del Ejército y de la Armada en efecto han tenido cursos de ``especialización'' o de ``posgrado'' en academias extranjeras. Inclusive, México ha firmado convenios con España, Francia, Inglaterra, Israel y también con naciones latinoamericanas, continuó.

Los militares mexicanos reciben su formación en nuestro país y, posteriormente, cursos de capacitación en el exterior, principalmente en mantenimiento de aparatos, aerovías, helicópteros y telecomunicaciones, con el objetivo de estar en la avanzada, manifestó.

``Creo que esto lo hacen todos los ejércitos del mundo, todas las marinas del mundo, y es importante para nosotros mantener estos programas'', dijo.

El funcionario dio a conocer que la SRE enviará al Congreso de la Unión un reporte con los detalles de la cooperación antinarcóticos, que incluirá el tema de la capacitación militar en el exterior.


Rubén Villalpando, corresponsal, Ciudad Juárez, Chih., 16 de marzo Ť A partir de este miércoles, alrededor de 250 funcionarios antinarcóticos de México y Estados Unidos se reunirán en El Paso, Texas, con el propósito de buscar nuevas formas para detener el tráfico de drogas por esta región que es utilizada por todos los cárteles de México.

La delegación estadunidense la encabezará Barry McCaffrey, el zar antidrogas, y se espera que la representación mexicana la presidan el procurador general de la República, Jorge Madrazo Cuéllar, y el fiscal contra los estupefacientes, Mariano Herrán Salvatti.

En la reunión analizarán la versión de James Milford, vocero de la Agencia de Combate a las Drogas, quien asegura que Miami se convirtió en el principal punto de entrada de drogas a Estados Unidos, desplazando a Ciudad Juárez a un segundo lugar.

Luego de Miami y Ciudad Juárez-El Paso, otros corredores importantes de droga son Tijuana-San Diego y Matamoros-Brownsville, puntos que sirven de trampolín en el intento de trasladar drogas de todo tipo.

En las oficinas de la DEA en El Paso se informó que en esta área, durante el año pasado fueron decomisadas 150 toneladas de mariguana, 22 mil kilogramos de cocaína pura, 44 kilogramos de heroína y 50 de anfetaminas.

En el intento de introducir por los puentes internacionales estas drogas fueron detenidas, en promedio, 100 personas cada mes, las cuales fueron puestas a disposición de jueces federales estadunidenses.