La Jornada 16 de marzo de 1998

Nuestra propuesta ``no es irreductible'': AN; el PRD reitera apoyo a la de Cocopa

Ciro Pérez Silva y Víctor Ballinas Ť El Partido Acción Nacional (PAN) reiteró ayer en la clausura de los trabajos de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión que su postura relativa a su iniciativa sobre derechos y cultura indígenas ``no es irreductible'' y dijo que está abierto a debatir, razonar y considerar, pues ``nunca hemos apostado al todo o nada''.

El diálogo es el único instrumento válido para llegar a la paz, reiteró el blanquiazul, y añadió que también ha denunciado -en los trabajos de la Comisión Permanente- que el gobierno federal no ha seguido una línea clara y consecuente con su oferta de diálogo, además de que ha sido deshonesto en el manejo del conflicto, en el agravio directo a la justicia y a la vigencia del estado de derecho.

A su vez, al fijar la postura del Partido de la Revolución Democrática, el diputado Jesús Martín del Campo destacó que su partido insistirá en una salida pacífica para Chiapas, y que sea la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) quien concluya sus trabajos. ``A ello nos atendremos y hacia ese camino daremos todos nuestros esfuerzos durante esta 57 Legislatura''.

El perredista reiteró que quien se está negando al diálogo y a una salida pacífica para resolver el conflicto chiapaneco es el Poder Ejecutivo, y ahora ``hay el riesgo incluso de que los partidos representados en el Congreso puedan seguir un camino que en los hechos disuelva a la Cocopa, y este camino nos acerca más a un conflicto peor, a una salida violenta, por la vía armada y no a la salida que tanto pretendemos''.

El PRI, de su lado, destacó que por unanimidad en la Comisión Permanente se aprobó un punto de acuerdo para solicitar a la Cocopa que fortalezca la interlocución con y entre las partes directamente involucradas en el conflicto. Históricamente, señaló, México ha sido capaz de resolver sus problemas internos y en el caso de Chiapas afirmamos que la solución corresponde exclusivamente a los mexicanos.

Señaló el PT la incapacidad del Estado

Al comentar los trabajos de la Comisión Permanente, el Partido del Trabajo (PT) dijo que sobre Chiapas ``denunciamos la incapacidad del Estado mexicano para erradicar los altos niveles de marginación y de concentración de la riqueza que ahí se vive. Hablamos de la intolerancia, la violencia y la horrenda e inadmisible matanza de Acteal y el grado de complicidad y encubrimiento de las autoridades''.

El PT agregó que aunque el tema de Chiapas fue recurrente en los trabajos de la Permanente, ``no avizoramos una solución seria y respetuosa. Lo menos que podemos decir es que reiteramos que la solución al drama chiapaneco la podemos obtener a través de las instancias legalmente reconocidas, la Cocopa y la Comisión Nacional de Intermediación (Conai), aunque también es necesario que las partes en conflicto asuman posturas flexibles y conciliatorias que permitan restablecer el diálogo''.

Chiapas fue el tema predominante en las sesiones de la Comisión Permanente, coincidieron en sus exposiciones PAN, PT y PRD, y que la matanza de Acteal es condenable y exigieron una investigación a fondo. Incluso, en este punto el PRI coincidió con la oposición.

Y todos (PRI, PAN, PRD y PT) plantearon que debe privilegiarse el diálogo en la solución para Chiapas y en el fortalecimiento y apoyo de todos los partidos a la Cocopa, que debe continuar sus trabajos.

PAN, PT y PRD además coincidieron en que es necesario discutir y revisar las atribuciones de la Comisión Permanente, porque si no sólo podrán realizarse trabajos casi burocráticos.

Por el PAN, la senadora María Elena Alvarez de Vicencio destacó que Chiapas fue el tema que ocupó el mayor tiempo de los trabajos de esa comisión. Apuntó que ``en el transcurso de cuatro años de búsqueda de solución, se ha hundido a pueblos enteros en mayor miseria, se ha expulsado de sus hogares a miles de familias, tenemos que lamentar un escándalo internacional que ha ido aumentando y lo más doloroso, hemos sido testigos de la muerte de cientos de hermanos chiapanecos''.

AN, subrayó la legisladora, sostiene que junto con los honestos esfuerzos de muchos hombres y mujeres de buena voluntad, que buscan encontrar la solución en favor de las comunidades indígenas del país, ``también hemos visto la pugna de personas y grupos que anteponen ambiciones e intereses nada generosos en su actuar, y que han impedido el arribo a una solución justa''.

A su vez, el diputado Martín del Campo apuntó que ``sabemos desde hace tiempo que cada partido puede presentar una iniciativa para Chiapas, pero aquí estamos atravesando un conflicto que rebasa las formalidades de quienes pueden iniciar leyes en el Congreso''. El PRD, insistió, seguirá defendiendo a la Cocopa, pues ``por ley se creó esta comisión, para un acercamiento entre las partes, y que a ello contribuya la Cocopa, y que haya una propuesta de convergencia, eso es lo que busca y para ello se creó''.

La Comisión Permanente sesionó 65 horas, en las que subieron a la tribuna 127 legisladores del PRI; 124 del PRD; 73 del PAN y 10 del PT. De 15 sesiones, en 10 se trató el tema de Chiapas, con 165 oradores; la situación política de Morelos se trató en tres sesiones, con 20 oradores; el ajuste presupuestal en dos sesiones, y en otras tantas el presupuesto universitario.


Ciro Pérez Silva y Víctor Ballinas Ť Bajo la tribuna del Palacio Legislativo de San Lázaro, el coordinador perredista, Porfirio Muñoz Ledo, no daba crédito a la manifestación que cinco diputados del PRD habían iniciado para anunciar una huelga de hambre hasta que el Ejecutivo ``retire'' su iniciativa de ley para Chiapas. ``Tú me dijiste que ibas a hacer una huelga de hambre, pero no me dijiste que aquí, eso no me lo dijiste'', le reclamó Muñoz Ledo al diputado Marcelino Díaz de Jesús. ¿Qué vas a cambiar con una huelga de hambre?, insistía.

Habían pasado ya cuatro de los cinco oradores para fijar las posiciones de sus respectivos partidos en el comienzo del segundo periodo ordinario de sesiones de la 57 Legislatura, y todo transcurría sin sobresaltos, no fue hasta que el vicecoordinador priísta, Fidel Herrera Beltrán, subió a la tribuna, cuando el escenario cambió. Desde su curul, Díaz de Jesús pidió la palabra para hacer una pregunta al orador, hecho que le fue negado por no formar parte de los acuerdos parlamentarios signados por los cinco coordinadores para la sesión.

El perredista hizo caso omiso de la advertencia del presidente en turno de la mesa directiva. A gritos, reclamó que la iniciativa presidencial haya sido elaborada unilateralmente, ``sin tomar en cuenta a las partes'' , y sin más, se levantó de su curul y al pie de la tribuna desplegó dos pancartas y una bandera nacional con la leyenda ``Nunca más un México sin nosotros'', acompañado por Fabiola Gallegos, Patria Jiménez, César Lonche y Martín Mora.

Los priístas reaccionaron. Encabezados por Rafael Oceguera, corearon frases de rechazo a los manifestantes. ``Payasos'', ``exhibicionistas'', gritaron insistentemente, mientras Muñoz Ledo iniciaba un diálogo con éstos y el presidente en turno de la mesa directiva, el verde Jorge Emilio González, decretaba un receso hasta que la situación se normalizara.

--Hicimos un esfuerzo bárbaro para conseguir los canales y transmitir las sesiones, nos van a dar para atrás, hay muchos intereses en darnos para atrás con este proyecto. Ahorita nos están viendo tres o cuatro millones de mexicanos, yo creo que no debemos dar pretextos a quienes quieren frenar la posibilidad de transmitir, ojalá no interrumpiéramos a los oradores --decía, suplicaba el coordinador perredista.

--Nosotros vamos a estar aquí pacíficamente, no interrumpiremos a ningún orador, pero este es nuestro derecho a manifestarnos --respondía Díaz de Jesús, mientras reiteraba que los pueblos indios ``ya no pueden esperar más'' una solución, y advertía que la iniciativa presidencial ``sólo va a provocar la guerra''.

--Yo no puedo oponerme a sus decisiones como miembro y compañero de legislatura, yo lo que quiero es que reanudemos la sesión y que lo hagamos de modo ordenado y pacífico, porque ya nos está viendo el país desde el día de hoy --insistió Muñoz Ledo tratando de convencer a Díaz de Jesús, pero éste no escuchó razones.

El coordinador perredista advirtió que de continuar con esa actitud ``se va a armar un desmadre'', y trató de convencer a los manifestantes argumentando que con ninguna de las iniciativas --la del PAN y la del Ejecutivo-- se puede obtener la mayoría necesaria para aprobarla. ``Eso va a ser un problema severo, se va a tardar, yo estoy convencido de que van a tener que regresar a la iniciativa de la Cocopa, porque cuando se reabre un texto que fue encomendado a una instancia negociadora, reabres el conflicto tarde o temprano''.

Pero nadie parecía escucharlo, los manifestantes insistían en su posición. Los priístas amenazaron con abandonar el recinto hasta que los manifestantes regresaran a sus curules. ``Arturo, ya hablé con ellos y van a permitir que Fidel Herrera continúe sin interrupciones'', negociaba Muñoz Ledo con el coordinador priísta. ``No, que se vayan, que se vayan, aquí te dejamos hasta que logres controlar a tu gente'', respondió tajante Núñez Jiménez, mientras panistas y petistas ya habían abandonado el recinto. Al final, los perredistas también salieron del salón de sesiones, visiblemente molestos por la manifestación de cinco de sus compañeros.

Luego de casi dos horas de negociaciones entre los coordinadores, los manifestantes aceptaron retirar sus mantas y regresar a sus lugares, no sin haber obtenido el compromiso de otros perredistas de unirse a la huelga de hambre. Apenas iniciada la sesión, el vicecoordinador perredista, Pablo Gómez Alvarez, pidió la palabra y a nombre de su bancada se disculpó por los ``hechos ocurridos'' y dejó claro que esa manifestación no fue promovida por la fracción parlamentaria.

La paz en Chiapas, el reto

Nuevamente en la tribuna, el priísta Herrera Beltrán invitó a los legisladores a discutir la iniciativa enviada por el Ejecutivo que contiene, afirmó, el espíritu de los acuerdos de San Andrés. ``Encontremos, en el ejercicio de nuestra responsabilidad constitucional y política, la forma de hacer de una vez por todas que el grupo beligerante, el EZLN, se siente a negociar'', demandó el priísta.

Por su parte, Muñoz Ledo hizo un llamado para encaminar los trabajos legislativos no hacia una licitación de leyes o de iniciativas parlamentarias, sino en apoyo a aquella que sea capaz de lograr la paz en Chiapas. ``Pueden presentarse iniciativas distintas y hasta contrarias; sin embargo, el que ha faltado a la verdad, el que no ha respetado su firma ni su palabra, es el gobierno de la República''.

Dijo que la Cocopa logró la confianza de las partes involucradas en el conflicto, así como el apoyo de la opinión pública, convirtiéndose en la instancia natural para llevar dicho proyecto al Congreso.

El coordinador del PAN, Carlos Medina Plascencia, sostuvo que el segundo periodo ordinario de sesiones ``abre una esperanza para la paz'' y pone a prueba al Congreso de la Unión en un debate de cara a la nación, al tiempo que posibilita acordar el inmediato diseño integral de la reforma del Estado, tema recurrente en los últimos años y condición sin la cual la transición mexicana no se consolida.

En este sentido, consideró que el país no puede vivir en permanente estado de transición, por lo que deben ``aterrizarse'' las propuestas para que nadie imponga fórmulas ``ni al proceso de sucesión ni a las instituciones del Estado. Tal reto exige despojarnos de estrictos intereses partidarios.

El vicecoordinador del PT, Ricardo Cantú, dijo que su partido pugnará porque el contenido de las iniciativas que se discutan en el pleno sobre el conflicto en Chiapas esté debidamente consensuado entre las partes involucradas. ``Consideramos que la iniciativa que el gobierno de manera unilateral presentó, vulnera de manera grave el consenso que se había obtenido mediante la Cocopa.''