La Jornada 15 de marzo de 1998

Dos funcionarios, con chequera abierta en Israel para el equipo de espionaje

Juan Manuel Venegas y Georgina Saldierna /II Ť Del 23 de abril al 1o. de mayo de 1994, dos funcionarios del gobierno de Campeche realizaron un viaje a Israel. Durante nueve días de estancia en Tel Aviv visitaron diez empresas, todas dedicadas a la venta de equipo de cómputo para rastreo y monitoreo telefónico, así como a la capacitación y adiestramiento de personal dedicado a tareas de inteligencia y contraespionaje.

Los viajeros fueron Valente Quintana González, entonces director de la Academia de Policía y anteriormente agente del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), y Amador Puente Esparza, subprocurador de Justicia del estado de Campeche.

Ambos funcionarios iban con chequera abierta y, por encargo de su jefe, el secretario general de Gobierno, Cruz Manuel Alfaro Isaac, debían adquirir el equipo necesario para el ``centro de inteligencia'' que empezaría a operar unas semanas después.

Del 23 de abril al 1o. de mayo de aquel año, Valente y Amador conocieron, entre otras, las empresas Tele 10, dedicada a la venta de equipo para codificar conversaciones telefónicas; ISPRA, productos lacrimógenos y equipo policiaco antimotines; Beit Alfa Trailer, vehículos de control de tumultos, y Tandu, escuela autorizada para el adiestramiento en labores de inteligencia, investigación e identificación criminal.

La programación del viaje corrió a cargo de GULL, Aviation Consulting and Engineering.

Una bitácora del recorrido de los funcionarios campechanos por Tel Aviv está en poder de La Jornada.

Descubierto el centro de espionaje campechano, hace unos días, estos mismos personajes aparecieron como parte del equipo de veinte personas que, coordinadas por Cruz Manuel Alfaro Isaac, operaban, rastreaban, monitoreaban y registraban llamadas de políticos, funcionarios, ciudadanos comunes y periodistas.

Todos pasaban por su filtro.

Según otro documento hallado en el centro de espionaje, la mayoría de ellos trabajó en el equipo cercano a Jorge Salomón Azar, y algunos siguieron apareciendo en la nómina del actual mandatario estatal, Antonio González Curi.

Por ejemplo, Alfaro Isaac, secretario general de Gobierno en el sexenio azarista, pasó a ser coordinador de asesores de González Curi. Desde el 3 de marzo pasado, cuando el PRD descubrió el centro de espionaje, está prófugo de la justicia.

La pantalla para la compra de equipo

Según el oficio SG/337/94 de la Secretaría de Gobierno del estado de Campeche, el 28 de febrero de 1994 el titular de esa dependencia (Alfaro Isaac) envió una comunicación a la empresa Teletron LTD, representada en México por Samuel Weinberg, para la adquisición de equipo.

De acuerdo con las especificaciones del funcionario estatal al empresario, el material requerido sería utilizado para ``el Centro de Reahabilitación Social'' de la entidad.

En realidad, esa era la pantalla oficial para armar el centro de espionaje.

Con su oficio, Alfaro Isaac pedía lo siguiente:

``Por este medio, le informamos que estamos interesados en adquirir el equipo que a continuación se detalla:

``T.M.S. 20 líneas.

``Monitoreo de fax 10 líneas.

``Tres equipos de monitoreo de fax y teléfono móvil o de campo.

``Equipo de escucha. Para centro de reahabilitación social.''

Al calce, ``Sufragio Efectivo, No Reelección'' con el nombre y firma del secretario de Gobierno de Campeche.

Adjunto al oficio, aparece el ``finiquito de instalación y operación'', que con fecha 12 de diciembre de 1994 giró por su parte Teletron LTD.

``Gobierno del estado de Campeche, México.

``Estimados señores. Por medio de la presente les comunicamos que hemos completado la entrega y/o instalación del equipo, según la cláusula primera del contrato...''

Los viajeros regresaron acompañados

A los pocos días de que Amador y Valente regresaron a México, aparecieron en la ciudad de Campeche cuatro ciudadanos israelitas que se identificaron como turistas. Se hospedaron en la ex hacienda de San Luis Carpizo, del municipio de Champotón y, según versiones de campechanos que los conocieron, aparentemente no hacían nada. Se la pasaban caminando por los parques de la localidad, tomando café y ``haciendo vida social''. El rancho donde se hospedaba, refieren, es propiedad de ``un amigo'' de Alfaro Isaac.

Sin embargo, según los currícula que de cada uno de ellos envió la empresa Tandu al gobierno de Campeche, Asaf Nadel, Uzi Berger, Eyal Dotan y David Nevo fueron entrenados y ``altamente capacitados'' en tareas de espionaje y operativos antimotines y antiguerrilleros. El primero de ellos, inclusive, fue oficial de seguridad de la embajada de su país en Colombia de 1991 a 1993.

Uzi Berger, el más viejo de los ciudadanos israelitas que estuvieron en Campeche (51 años), fue comandante de la Guardia Civil de su país y director del Departamento de Investigaciones en la Jefatura de Policía de Jerusalén (1988-1990). Su expediente lo ubica como ``experto en dirección y mando de misiones complejas de inteligencia''.

Antes de esos cargos, entre 1960 y 1982 tuvo ``varias funciones y cargos en el campo de seguridad y fue responsable de una variedad de misiones clandestinas... y del desarrollo, fabricación, instalaciones y mantenimiento de sistemas operacionales especiales''.

Los otros dos, Dotan y Nevo, son especialistas en la instalación y mantenimiento de equipo de cómputo y electrónico y en el seguimiento, monitoreo y rastreo de llamadas telefónicas.

De acuerdo con la denuncia que la senadora del Partido de la Revolución Democrática Layda Sansores presentó ante la Procuraduría General de la República (PGR), estos extranjeros ``podrían haber sido los responsables de instalar el centro de espionaje y del adiestramiento de las personas que lo operaban''.