Cubrir la demanda de vivienda, principal esfuerzo presupuestal, señaló
Segunda y última parte Ť El máximo esfuerzo en materia presupuestal por parte del gobierno capitalino estará destinado a satisfacer la demanda de vivienda, que anualmente alcanza la cifra de entre 35 mil y 40 mil casas-habitación, dice el jefe de gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas.
Asegura, además, que los recortes en el presupuesto federal, como consecuencia de la baja en los precios del petróleo, no impactaron de manera definitiva la administración de la ciudad, pues no hubo necesidad de reducir programas de obra significativos.
En su recuento de los cien días de su administración, Cárdenas no advierte momentos díficiles, al menos ninguno inmanejable, y a pesar de quienes no quieren ver los avances en obras y servicios, el gobierno actual no ha interrumpido programas en materia de agua o vivienda. En suma, dice, comenzamos a dar respuestas a los distintos grupos sociales, gracias a que gobierno y habitantes han encontrado las formas para enfrentar, ``exitosamente, diría yo'', los problemas.
P: La oposición afirma que no hay un programa de gobierno concreto. ¿Qué responde al respecto?
R: Hay quien no quiere ver y hay cosas que posiblemente no se vean. Pero el trabajo desarrollado en tres meses de gobierno avanza con un ritmo muy intenso en todas las áreas.
``Por ejemplo, se terminó una fase muy importante del acueducto perimetral del acuaférico, la perforación de un tramo de túnel casi hasta Xochimilco, con lo cual se concluye una etapa que nos permitirá suministrar el agua que el gobierno federal tiene que aportarle a la ciudad. No obstante, aún está pendiente el proyecto para traer agua del río Temazcaltepec. La obra en la materia incluye la detección de fugas y su reparación, que es uno de los programas más importantes para la ciudad y que queremos reforzar porque de esta forma podremos aumentar los volúmenes disponibles de agua''.
Por otra parte, afirma, una de las exigencias más urgentes es la de vivienda: ``Requerimos, según las estimaciones, unas 35 mil o 40 mil casas anuales, más otras 15 o 20 mil en lo que es la zona metropolitana. Si toda la demanda se quisiera contar en la ciudad, tendríamos que construir entre 55 mil y 60 mil viviendas anuales, que tendrían que satisfacerse por acciones de instituciones federales, de los gobiernos del DF y el estado de México, así como de grupos privados''.
Por lo anterior, el máximo esfuerzo en materia presupuestal, asegura el jefe de gobierno, está destinado a la construcción de vivienda: ``Ya comenzamos a adoptar medidas en este sentido, con el propósito de satisfacer la demanda de aquellos que perciben un ingreso de menos de tres salarios mínimos y a quienes, por otra parte, no se les había atendido''.
En tales propósitos, el papel de la iniciativa privada será fundamental, ya que con ella ``atenderemos a otros sectores de escasos recursos, mediante tandas o a través de la aportación de materiales, como es el caso de algunas empresas cementeras. ``De esta manera, pequeños grupos de ciudadanos podrán acceder a la autoconstrucción, con costos relativamente bajos''.
Los adeudos de administraciones anteriores también son atendidos por el actual gobierno capitalino, explica Cárdenas: el objetivo es liberar unidades de vivienda que nos permitan satisfacer la demanda y no tener proyectos parados por adeudos con instituciones financieras, con las cuales estamos negociando para entregarlas ya terminadas, en algunos casos.
P: ¿De qué manera repercute la situación de la economía nacional, afectada por la baja en el precio del petróleo, en las finanzas del gobierno capitalino y de sus programas?
R: Hasta este momento, y en función de los primero recortes que anunció el gobierno federal, las finanzas capitalinas se impactaron en un medio por ciento de su presupuesto total; es decir, tendrán que ajustarse en este porcentaje, que no representa un problema mayor, ya que no implica reducir programas significativos.
``Ahora bien, no sabemos si vengan más recortes y qué impacto puedan tener, pero hasta ahora no se ha informado de algún otro recorte adicional''.
P: ¿Cuáles son las estrategias y programas económicos para el DF?
R: Uno de los renglones económicos más importantes dentro del conjunto de la economía del DF es el turismo, que en mucho ha sido aprovechado, pero que aún ofrece terreno que explotar. Por eso el gobierno capitalino creó la Secretaría de Turismo, la cual nos permitirá aplicar mejores elementos de promoción para la ciudad, en un esfuerzo conjunto con quienes ya participan en esta actividad: hoteleros, restauranteros, líneas aéreas, transportistas, etcétera. Entre los proyectos con los que ya estamos trabajando está el de fortalecer a la capital como destino de grandes convenciones, ya que hasta hace poco tiempo no contaba con espacios para reunir a miles de personas por unos pocos días; ahora se tiene esta capacidad.
Aprovecha el recuento y anuncia: ``En los últimos días de marzo será colocada la primera piedra de un centro de convenciones para la ciudad, ceremonia en la que participará el alcalde de Barcelona, como parte del proyecto en el que participan también una entidad francesa, no sé si París o el gobierno frances, y grupos privados''.
P: ¿Qué garantías exigen los empresarios para invertir en la capital?
R: Muy pocas, afortunadamente, al menos por lo que respecta a aquellos con los que he hablado. Y no es que lo pidan en forma expresa, pero la sensación que uno recoge al hablar con ellos es que piden transparencia en las acciones del gobierno, respuestas claras, directas, y no llevarlos al rincónqué le toca al funcionario en cada uno de los negocios.
``En ese sentido, han tenido respuesta, lo mismo que en la atención para facilitar trámites y el flujo de inversión, que es lo que a la ciudad le interesa, no por el negocio que hagan las personas, sino por el impacto económico para la ciudad. Por otra parte, trataremos que no sea por omisión de la autoridad que no se resuelvan los problemas''.
P: En tres meses de gobierno, ¿cuáles han sido los momentos más difíciles?
R: Afortunadamente, ninguno. Todo se ha podido manejar y hasta ahora no ha habido situaciones que nos llevaran eventualmente a alguna situación de crisis en el gobierno o en las delegaciones.
Cuauhtémoc Cárdenas, sin embargo, acepta que ha habido la necesidad de tomar ``muchas medidas correctivas a lo largo de estos tres meses, para acelerar la ejecución de los programas''. Y advierte: ``No entro en el detalle porque sería un golpe innecesario contra más de una persona y se utilizaría indebidamente. Se trata, simplemente, de medidas administrativas normales en cualquier gobierno''.
P: ¿Ha habido sanciones en algunos casos?
R: Ninguna que yo sepa; puedo no saberlo, desde luego, pero nadie ha sido denunciado por cometer algún acto ilícito.
Refiere, además, el abatimiento de 20 por ciento en las denuncias que llegan a la CDHDF. Dice: ``Ojalá sea una tendencia que podamos consolidar y seguir avanzando en la reducción de las denuncias''.
P: ¿Qué hará con los pagos por indemnización no cubiertos por administraciones antriores y que corresponden a recomendaciones de la CNDH?
R: Estamos revisando esos casos, en función de la disponibilidad presupuestal asignada por la ALF para esa finalidad y, de este modo, se irán haciendo los pagos.
``Desafortunadamente, mucho del presupuesto se ha ido a la creciente deuda pública, lo mismo en el gobierno federal que en los estatales y pretender de un día para otro superar todo lo acumulado no es posible, pero trataremos de atenderlo en función de lo que tenemos por parte de la Asamblea Legislativa''.
Juan Antonio Zúñiga M. Ť Al cerrar las vías de corrupción y evasión fiscal, el gobierno de la ciudad de México pudo disponer en sus primeros 100 días de gestión de recursos para incrementar en 18 por ciento los salarios de sus trabajadores, pagar parte de los gastos que no alcanzó a cubrir la última administración regencial y absorbió la reducción en las participaciones federales --por la caída de los precios petroleros-- sin modificar sus metas.
Habla Antonio Ortiz Salinas, secretario de Finanzas del primer gobierno electo del Distrito Federal: ``Es un manejo financiero a favor de los ciudadanos que votaron por este gobierno y de toda la población capitalina; a ellos es a quienes tenemos que responder y no al gobierno federal. Le puedo decir que nuestras finanzas son sólidas y responsable su manejo como para que podamos resolver ésto y no hayamos hecho recortes''.
--Pero el precio del petróleo mantiene su descenso y por lo menos al 10 de marzo se situaba en 9.60 dólares por barril. ¿Podrán absorber este impacto?
--La reducción en dos dólares, que significó una disminución en las participaciones y en nuestros ingresos, ya se absorbió; encontramos la forma de manejarlo y resolverlo. Ahora debemos esperar a conocer el impacto de esta segunda reducción y hasta entonces sabremos qué medidas adoptar para absorber el costo que nos vaya a representar.
Cien días representan 9.1 por ciento de tres años. Parecen pocos para avaluar los resultados de una gestión, pero son suficientes para delinear las caractarísticas generales de una nueva administración gubernamental. Los enfoques, las prioridades y hasta la forma de enviar las señales son distintas y contienen sus peculiaridades.
Otro hecho del que se ha hablado, pero no ha tenido el impacto suficiente es la reducción del sueldo que hizo el jefe de gobierno y todos los funcionarios de la administración pública del Distrito Federal, comenta el responsable de la administración financiera de la ciudad y afirma:
``Estámos implantando una tónica distinta en el manejo de las finanzas. No es un problema nada más de suficiencia, sino de moralidad y de ética política. De moralidad, porque no se acepta la corrupción y de ética, porque sentimos que el funcionario, el servidor público, debe ser relativamente modesto en sus percepciones. Porque somos un país con muchas carencias y con muchos problemas económicos para la gran mayoría de la población. Entonces no es nada más un problema de eficiencia técnica, es de moralidad y de ética'', añadió.
Sin embargo, el gobierno del Distrito Federal no es una isla, acepta el secretario de Finanzas capitalino. ``Nosotros tenemos consecuencias de lo que hace el gobierno federal, pues el menos crecimiento económico nos significa también una disminución en algunos rubros de recaudación (...). A nosotros nos ha sorprendido que los ingresos petroleros no esten cubiertos (...). Al no cubrirse se está permitiendo que los ingresos fiscales derivados del petróleo sean tan volátiles como los precios del mercado petrolero'', puntualiza.
Hay otro factor de influencia que condiciona, estrecha, limita, el manejo financiero de la ciudad: la deuda. No sólo la heredada por la última administración regencial del DF, sino, más bien, la que fue contratada por aquélla y será pagada en su servicio por el gobierno actual.
Enfatiza al respecto: ``Queremos que quede muy claro a la opinión pública que si la deuda llega a 33 mil millones de pesos (actualmente se ubica en 11 mil 544 millones) es por compromisos que se tomaron con anterioridad''. Sobre la carga que representa, precisa que su servicio representará este año 21.6 por ciento del ingreso disponible del gobierno capitalino.''
En Antonio Ortiz Salinas contrastan la mesura de sus movimientos con la firmeza de sus convicciones y la directriz política del primer gobierno electo del Distrito Federal en materia financiera: ``Sí estamos convencidos en que para que haya alternancia real debe haber viabilidad administrativa. Estamos poniendo las bases en el centro del país para demostrar no sólo lo factible, sino también lo conveniente de la alternancia'', concluye.