La Jornada 10 de marzo de 1998

Los aeropuertos, primer caso; se crearán sociedades de inversión, explica Werner

Patricia Muñoz Ríos Ť El gobierno federal autorizará este año que las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore) utilicen los recursos de los trabajadores para invertir en el mercado bursátil y tomen parte en la compra de empresas que se privaticen, anunció ayer el subsecretario de Hacienda, Martín Werner.

En el foro México-Unión Europea: perspectivas de una relación equilibrada, el funcionario explicó que el primer caso que se dará será la privatización de los aeropuertos, los cuales se espera poner a la venta mediante el mercado de valores.

A fin de que las Afore participen en la compra de estas empresas y otras más que en el futuro venda el gobierno, próximamente se autorizará el establecimiento de la primera ``sociedad de inversión'' de estas administradoras, figura a través de la cual podrán participar en la compra de las empresas públicas que se enajenen en el mercado de valores.

Werner señaló que los recursos con los cuales contarán las Afore les permitirán formar parte de estas licitaciones, ya que hasta la fecha las cuentas de ahorro de los trabajadores han acumulado 12 mil millones de pesos (mil 500 millones de dólares) y este año se espera totalizar 40 mil millones de pesos.

Incluso, ``para el año 2000 los recursos con que contarán estas administradoras representarán entre 3 y 4 por ciento del producto interno bruto (PIB)'', y tendrán un crecimiento acelerado, agregó.

Aseguró el funcionario que los recursos que van a empezar a manejar estas administradoras ``nos va a permitir tener en el país esos fondos que puedan ser participantes muy importantes en la compra de empresas''.

Expuso que hasta la fecha las Afore todavía no invierten en valores bursátiles ni en acciones, pues han empezado un régimen de inversión muy conservador; sin embargo, ``gran parte de la reforma que se hará en este sentido permitirá que los trabajadores capitalicen las oportunidades que existen en el mercado de valores''.

Ante los empresarios europeos indicó: ``Pensamos en el transcurso de este año autorizar la primera sociedad de inversión de las Afore para que puedan invertir en acciones; creo que esto va a ayudarnos a detonar estos cambios que queremos hacia adelante, para que las ventas de empresas públicas se puedan hacer directamente en el mercado de capitales y sea éste el propietario de estas empresas''.

Desde la perspectiva del sector financiero los cambios son fundamentales: por un lado, buscar que progresivamente el mercado sea un participante importante desde el principio de la privatización y se coloquen en él las empresas públicas y no se queden en manos de los tradicionales grandes consorcios.

En la parte central de su discurso en este foro estableció que en adelante el esquema de privatización cambiará, pues por falta de ``profundidad'' del mercado de capitales, cuando se hablaba de venta de empresas públicas siempre se pensaba en colocar entre los grupos de postores muy identificados.

Sin embargo, ese grupo de lo que se encargaba era de conseguir financiamiento, apalancarse y comprar la empresa y más adelante, después de un periodo en el que ellos operan el negocio, van al mercado de capitales para despalancar esa operación y para colocarla, manteniendo el control.

Ahora se dará un paso diferente en México, y el caso de la venta de aeropuertos servirá de ejemplo, pues se buscará que las empresas se vendan al mercado de valores. Sin embargo, para ello se requiere que el tamaño del mercado crezca, para que la Bolsa Mexicana de Valores pueda absorber los montos de colocaciones que implican las ventas de los activos del Estado.

Insistió en que el caso de los aeropuertos --el cual ``desde la Secretaría de Hacienda hemos empujado para ir detonando que el mercado sea el que compre estas empresas, y hay una reforma muy importante que nos va a ayudar mucho a que esto sea una realidad''-- permitirá poner a prueba la participación de las Afore en la compra de empresas públicas a través del mercado accionario.

En otro aspecto, el funcionario recordó que el esfuerzo de privatización ha reducido a una sexta parte la posesión de empresas que estaban en manos del gobierno e hizo que el peso del Estado --que llegó a ser de 40 por ciento en la economía-- haya bajado a 20.

Para concluir, señaló que el Estado dejó de ser propietario para ser regulador y este cambio ya es irreversible. Ahora estará apoyado por el cambio en el sistema de pensiones que permitirá la participación de los fondos de ahorro en el proceso.