La Jornada 9 de marzo de 1998

EN EL PLEBISCITO MORELENSE, 15 A 1 CONTRA CARRILLO OLEA

Francisco Guerrero Garro, corresponsal, Cuernavaca, Mor., 8 de marzo Ť En una proporción de 15 a 1, los morelenses se manifestaron porque el gobernador Jorge Carrillo Olea abandone el cargo. Según los resultados de aproximadamente el 25 por ciento de las casillas contabilizadas, 47 mil 372 votantes (90.8 por ciento) exigen la renuncia, mientras que 3 mil 215 (6.11) que continúe.

Estos resultados de la consulta a que convocó la Coordinadora Morelense de Movimientos Ciudadanos (CMMC) fueron dados a conocer a las 22 horas y se obtuvieron de 233 casillas instaladas en Cuernavaca, Jojutla, Tepoztlán, Ocuituco, Xochitepec, Tlalquitengano, Amacuzac y Temixco.

A nombre de los observadores, Clemente Avila, de Causa Ciudadana de Sonora, dijo que ``fue una gran muestra de conciencia cívica la que nos mostraron los morelenses, y es un ejemplo para el país de cómo la ciudadanía puede mostrar su unidad ante un problema común''.

Por su parte, Carrillo Olea calificó la consulta como ``una mascarada sin sustento legal'' que no le preocupa, y como un acto de ``picaresca política'' ya que no hay autoridad competente que medie entre los votantes y los resultados. Afirmó que muchos de los votantes fueron manipulados ``lamentablemente'' y que las noticias que tenía de la consulta era que ``las ánforas estaban vacías''.

En la CMMC, esta noche se celebraba como ``un gran éxito'' la consulta pública, incluso superior a las expectativas, según afirmó Gerardo Becerra de Hita, uno de los organizadores. Informó que los resultados serán entregados a los 18 diputados de oposición del Congreso del estado y a los diputados federales, cinco del PRD y uno del PAN, el próximo martes en una concentración que ha sido convocada para efectuarse en el zócalo de Cuernavaca.

Hoy, hombres y mujeres, jóvenes y viejos de Morelos le mandaron un claro mensaje al gobernador de la entidad, dijo Becerra de Hita, y si el gobernador Carrillo Olea sabe entender las cosas y la voluntad popular, debería estar ya preparando su renuncia.

Para la consulta se instalaron 903 casillas en los 33 municipios de la entidad, participaron 3 mil 612 voluntarios que hicieron ellos mismos las casillas y las mantas para señalar su ubicación, y se emitieron 200 mil boletas. También vinieron 60 observadores de distintas partes del país para respaldar a las 60 organizaciones ciudadanas y religiosas y partidos políticos organizadores de este acto.

Becerra de Hita informó que hasta esta noche no se había registrado incidente alguno, que todas las casillas, salvo cinco o seis, se habían instalado pacíficamente y que no hubo actos de hostigamiento de ningún tipo. Sólo tuvieron problemas casillas instaladas en centros comerciales, de donde fueron desalojadas, apuntó.

Alma Gómez, de Casa Ciudadana de Cuernavaca, afirmó que desde el cierre de las primeras casillas se comprobó que la participación había sido excelente y masiva, y que en una proporción de 15 contra 1 los morelenses manifestaron su deseo de que Carrillo Olea deje el puesto de gobernador.

Becerra de Hita agregó que desde el inicio de la jornada recibieron reportes desde casillas en distintos puntos de la entidad, en las que se acabaron las boletas y necesitaban más, y que hubo que instalar casillas extras en los zócalos de Cuernavaca y Cuautla, por que la afluencia de votantes era mayor de los que podía atender una sola casilla.

Y esto pasaba en toda la entidad. A la hora de cerrar esta nota, en los centros de cómputo de toda la entidad centenares de personas esperaban su turno para entregar los resultados de las casillas que estuvieron a su cargo.


Blanche Petrich, enviada, Yautepec, Mor., 8 de marzo Ť Don Mario Toribio aleja y acerca su boleta para ajustarla a las necesidades de sus septuagenarios ojos: ``¿Debe Carrillo Olea renunciar a la gubernatura?''. Titubea con la crayola entre el sí y el no. ``Vengo por mi inconformidad --dice--, ¿pero cómo está este asunto?''.

--Léale bien, don Mario.

Relee. Y pasa la prueba de la confusión y vota sí. El pensaba que la cuestión era más sencilla: Carrillo Olea sí o no.

Con su sombrero a la antigüita, el paliacate café bien colocado al cuello, este hombre expone sus razones para detenerse, domingo 8 al filo de las cinco de la tarde, en la mesa de la consulta popular. ``Es que si dejamos que este gobernador siga nos va a acabar. Estos son hombres que toman el puesto para dañar a la nación. Entonces ¿quién nos va a defender? Antes fue Zapata. ¿Qué, acaso los hombres de ahora no tenemos pantalones? ¿qué, las mujeres no tienen pensamiento?''. Mario Toribio, en sus épocas fue comisario ejidal y ahora todavía trabaja sus tierras en Campos de las Paratas. Se despide y se aleja.

Yautepec, una vieja factura

Las misas de 10, los domingos en Yautepec no son como cualquier otra. Decenas de guardaespaldas de gafas oscuras y armas a la vista custodian la iglesia. Adentro están las familias de los dueños de las grandes quintas del municipio: las de Pedro Aspe, Ernesto Alonso, Francisco Labastida, los Balzaretti, algunos familiares y ex miembros del gabinete de Carrillo Olea.

Las quintas de Yautepec, donde el gran tema del diferendo social es el agua. Los bellos jardines y huertas detrás de los grandes muros cubiertos de buganvilias y los pequeños chorros de agua salitrosa en las casas del resto del pueblo.

Eso es lo que está en juego en las 20 casillas que se instalaron en Yautepec. Emilia Valdés no podía faltar. Ella se define como ``luchadora social de tiempo completo'' y da las razones de Yautepec frente a la consulta: ``Como unión rescatamos de las autoridades priístas la administración del agua en 1989. Por vez primera operamos con números negros. Cuando llegó al gobierno Carrillo Olea nos quitó la administración con la intervención de la policía. En esa lucha fue asesinado Pablo Ramírez Lobato. Nacimos como ONG con el nombre de ``En defensa del agua'' y ganamos por votación el derecho de volver a administrar el recurso. En abril, después de sanear las finanzas, nos la tienen que entregar. Cuando empezamos nuestra lucha decíamos: Carrillo-Olea-te-daremos-la-pelea. Ahora decimos: Carrillo-Olea-te-ganamos-la pelea''.

Tepoztlán, la cuestión es más de fondo

Apenas cruzar el artístico arco que corona la entrada del atrio del convento de Tepoztlán --un arco decorado con semillas de café, maíz de distintos colores, colorín, ajonjolí, arroz, de girasol-- el párroco Filiberto González encendió el sonido y empezó a recordarle a los fieles y a los asiduos de la plaza tepozteca que este domingo era día de consulta ciudadana.

Solamente en el kiosko se instalaron tres mesas, muestras del infinito mosaico social que coincidió en la convocatoria para lograr esta consulta. Una de las mujeres tepoztecas, la ONG femenil que el PRI se ha ido ganando, otra de las comunidades de base cristianas que nacieron de la diócesis del antiguo obispo de Cuernavaca, Sergio Méndez Arceo, y que siguen floreciendo por todo el estado, y una más del Comité de Barrios y Colonias de Tepoztlán, puro tepozteco bravo.

Otra mesa más se instala estratégicamente a la entrada del convento, donde hasta los turistas veracruzanos que pasan quieren votar. Lo malo es que sólo se admiten identificaciones de credenciales del IFE y la consulta es --too bad-- sólo para morelenses. Ni siquiera para tepostizos, y en ese punto Victoria Benet, que atiende esa mesa, sí es muy estricta. Ella trae en el morral el libro de su mamá, María Rosas --Tepoztlán, crónica de desacatos y resistencia-- que viene al cuento porque no está de más recordar que el no comunitario al club de golf sigue siendo una piedrita en el zapato del gobernador que nunca se pudo sacar.

Raúl Benet, del antiguo Comité de Unidad Tepozteca, expresa sus previsiones: ``El gobernador se va a burlar de este ejercicio, lo va a subestimar, como siempre. No puede ver que es una parte de un proceso en el que confluyen intereses muy diversos: priístas marginados por el propio Carrillo, panistas, el PRD que como fuerza significativa en el Congreso está en condiciones de negociar, comerciantes, industriales y buena parte del movimiento popular. Pero no están todos los sectores. Muchas ONG, de las más arraigadas y populares, no fueron invitadas''.

También los que no son secuestrables votan sí

Los nahuas tlahuicas de Santa Catalina votan por la tarde, cuando terminan las labores --aún en domingo-- en el campo. Ninguno de los comuneros de este pueblo ha sido secuestrado jamás --para qué si ni lana tienen-- pero tienen otras razones para desear la salida de Carrillo Olea del gobierno, ya que desde que inició esta gubernatura la venta ilegal de los terrenos comunales a los fraccionamientos en expansión de Cuernavaca y el Parque Nacional del Tepozteco se han acelerado sin que ni una sola de las demandas de los catalinenses haya procedido.

Al mediodía la única casilla del pueblo trabaja a marcha lenta. A la sombra del portal y en torno a la urna medio llena los hombres mayores participan en la tertulia.

--Completamente nunca nos hacen justicia.

--Y menos desde que empezó el problema del club de golf. ¿Se dio usted cuenta? Desde entonces no nos consienten en el palacio. Cualquier trámite que uno vaya a hacer le dicen: ¿y usted, de dónde viene? Soy tepozteco. Pues sálgase y espere allá afuerita. Y ahí nos quedamos hasta que nos cansamos. ¿Y nuestras demandas? Ah, pues que no proceden. Le digo.

--Ellos dicen cuando toman protesta de su puesto que si no cumplen el pueblo se los demande. Pero nomás dicen y no lo hacen.