La Jornada 7 de marzo de 1998

Congela la justicia laboral cuentas del Monte de Piedad en todo el país

Fabiola Martínez Ť La Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) emitió un boletín a todas las instituciones bancarias del país, en el que se ordena el congelamiento de cuentas del Nacional Monte de Piedad (NMP) como una medida para salvaguardar la naturaleza de la huelga que desde el 18 de diciembre iniciaron los trabajadores sindicalizados.

Funcionarios de la JFCA manifestaron que desde esa fecha el patronato ``continúa realizando todas sus actividades (prendarias y financieras), lo que se contrapone con el paro laboral, legalmente calificado''.

En respuesta a la solicitud del Sindicato Nacional de Trabajadores y Empleados del NMP, la JFCA ordenó que en caso de existir depósitos en bancos a favor de la institución ``se abstengan de atender y expedir cheques o cualquier otro título de crédito, mediante los cuales dicha institución continúe sustrayendo dinero que forma parte de su patrimonio''.

El tribunal argumentó que el 8 de enero de 1998 se declaró legalmente existente la huelga, y que ``los créditos de los trabajadores siempre serán preferentes sobre otros créditos'', de acuerdo con los artículos 924 y 113 de la Ley Federal del Trabajo.

Por lo tanto, concluye la JFCA, ``la empresa no podrá disponer del dinero que tiene depositado en las cuentas bancarias, hasta en tanto no se levante la huelga''.

La Junta Federal de Conciliación y Arbitraje dejó también ``a salvo los derechos del sindicato'' para que presente la denuncia correspondiente en contra del Montepío ante la Procuraduría General de la República (PGR), por desvirtuar la naturaleza de la huelga, y de encontrarse los elementos necesarios se ejercite la acción penal que corresponda.

El patronato del NMP consideró que la advertencia de la JFCA a los bancos constituye un ``acto arbitrario'', y ratificó la demanda contra el dictamen del tribunal laboral ante un juzgado de distrito en materia del trabajo.

La dirigencia sindical, que encabeza Eugenio Joel González González, dijo a su vez que el pago de boletas en Bital y la intervención de la Procuraduría Federal del Consumidor ``para comprar los adeudos de los pignorantes constituyen claros actos de coyotaje y acciones rompehuelgas que transgreden la ley''.

Según el sindicato, las cuentas del NMP, depositadas en diversas instituciones bancarias son superiores a los mil 800 millones de pesos; sin embargo, señaló el vocero de la representación sindical, Pablo Medina, ``es sólo una estimación inicial, porque en el Montepío se manejan cantidades millonarias que sólo el patronato conoce con exactitud''.

Agregó que a casi tres meses de declarada la huelga, el patronato sigue empeñado en ``esquirolear'' el conflicto, en el que los más afectados han sido los usuarios al no poder retirar sus prendas empeñadas, aun con el pago previo en Banco Bital.

Dijo que la Profeco ``convalida el convenio leonino'' entre el patronato del NMP y Bital al ofrecer un servicio que prestan los trabajadores en huelga, ``quebrantando además sus propias políticas para combatir el coyotaje en tiempos de actividad normal''.

Los usuarios, asegura el sindicato, han manifestado que no desean vender sus boletas a ningún precio, sino recuperar físicamente sus pertenencias.