La Jornada 4 de marzo de 1998

La presencia del Ejército en Chiapas es para ``evitar enfrentamientos'', aseguró Green ante el Parlamento Europeo

Agencias, Bruselas, 3 de marzo Ť El Ejército Mexicano actúa como fuerza de ``interposición'' en Chiapas, y su objetivo es ``evitar que se produzcan enfrentamientos''. Asimismo, los militares no saldrán del estado ``hasta que se desarme a los grupos que están armados'', manifestó ante el Parlamento Europeo la canciller mexicana Rosario Green.

La funcionaria expuso que el gobierno dará una salida política al conflicto y también cumplirá con los acuerdos de San Andrés. ``Quien diga lo contrario falta a la verdad'', expresó en varias ocasiones.

En una larga sesión del órgano legislativo de los 15 países europeos, previa a la ratificación del acuerdo comercial entre México y la UE, y dedicada a la situación mexicana, Green respondió a las preguntas de los eurodiputados centradas en el problema chiapaneco y en la presencia del Ejército federal en esa región.

De entrada, expuso que las fuerzas armadas no saldrán de Chiapas, porque su objetivo es evitar enfrentamientos. Además, dijo, el Ejército Mexicano siempre ha respetado los valores democráticos.

La canciller hizo una larga exposición de la situación económica, política y social de México. Sin embargo, dedicó una gran parte de su intervención al conflicto en Chiapas y a las acciones gubernamentales en relación con la matanza de 45 indígenas en Acteal, el 22 de diciembre de 1997.

El problema chiapaneco ha recibido un tratamiento sin precedente a nivel internacional. Desde los primeros días, el gobierno ordenó el cese del fuego y promovió una ley de amnistía. La actual administración ha seguido como normas el diálogo y la negociación para afrontar el conflicto, dijo.

Green explicó a los legisladores europeos el proceso de negociación y sus primeros resultados: los acuerdos de San Andrés Larráinzar, firmados el 16 de febrero de 1996 entre el gobierno y el EZLN. Los mismos buscan reconocer los derechos económicos, políticos, sociales y culturales de los pueblos indígenas, dentro del marco de la nación mexicana, indicó.

``El gobierno firmó los acuerdos de San Andrés obviamente para cumplirlos. El propio Presidente de la República ha dicho, en reiteradas ocasiones, que honrará ese compromiso. Ese no es el punto de discusión. Quien diga lo contrario falta a la verdad. Se formuló un proyecto de reformas constitucionales por la Cocopa. Este nunca fue aprobado por el gobierno. Nunca nos comprometimos con él. No está firmado. Quien diga lo contrario falta a la verdad'', expresó.

A partir del 15 de marzo, el Ejecutivo presentará al Congreso mexicano una iniciativa de reformas para dar cumplimiento a estos acuerdos, agregó.

Una mala y una buena

Del caso Acteal, hizo un resumen del número de detenidos y los delitos cometidos por los autores materiales, entre ellos homicidio y acopio de armas. La investigación respecto de los grupos civiles armados (paramilitares) sigue una línea que ya cuenta con algunos resultados, a pesar de la complejidad del asunto, mencionó.

``Resumiendo, la mala noticia sobre Chiapas fue que sucedió Acteal. La buena noticia es que se actuó con celeridad y que se trabaja para corregir los problemas que crearon el ambiente para que un acto como ése no vuelva a ocurrir''.

Enseguida, la canciller pasó al tema de las organizaciones no gubernamentales y su trabajo en territorio nacional, principalmente en el estado de Chiapas. ``Frente a la observación nacional e internacional no hay política de ocultamiento'', dijo.

Mucho menos una política de xenofobia: ``Yo misma he declarado a los medios que las ONG internacionales son bienvenidas, siempre y cuando respeten las leyes mexicanas'', remarcó.

Una prueba de ello, afirmó, es que en los últimos meses más de cuatro mil extranjeros han entrado y salido en la zona de conflicto en Chiapas. Estas personas están relacionadas con 276 organizaciones, de las cuales 96 son ONG, 28 fundaciones u organismos internacionales, 64 instituciones académicas, 46 grupos religiosos y 42 instituciones privadas, añadió.

Al concluir la sesión, algunos eurodiputados manifestaron su disposición a ratificar el Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación entre México y la UE.

La socialista Ana Miranda aseguró: ``Me consta que hay un consenso del Parlamento Europeo sobre la importancia de firmar el acuerdo con México''.

Sin embargo, el representante del grupo Izquierda Unida, el español Carlos Carnero, dijo: ``Algunos hemos pedido que el Parlamento congele el procedimiento de ratificación'', tras la matanza de Acteal. El gobierno de México debe mostrar con ejemplos palpables su interés en impedir ``nuevos pasos atrás'', como la masacre de 45 indígenas en Chiapas.

Pronostica Almunia la aprobación del acuerdo México-Unión Europea

Antonio Vázquez S. Ť A pesar de las presiones que han ejercido algunos grupos simpatizantes del EZLN ante el Parlamento español para evitar que se ratifique el acuerdo de cooperación entre México y la Unión Europea, la inmensa mayoría de los partidos y de los parlamentarios se manifestarán en favor de la aprobación, aseguró el secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Joaquín Almunia Amann.

Entrevistado al término de una comida que le ofreció la dirigencia del Consejo Coordinador Empresarial, el político advirtió que en caso de no resolver de una vez por todas ``la incertidumbre política derivada de aquí a la sucesión presidencial del año 2000, se podría poner en peligro la consolidación de este ciclo activo por el que atraviesa la economía mexicana''.


Reuters, Dpa y Afp, Madrid, 3 de marzo Ť El gobierno y partidos opositores españoles condenaron hoy duramente las declaraciones del líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Joaquín Almunia, a quien se atribuye el haber comparado al grupo separatista vasco ETA con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), durante la visita que realiza a México.

El coordinador general del gobernante Partido Popular (PP), Angel Aceves, calificó de ``desafortunadas'' y ``chocantes'' las declaraciones de Almunia, y exhortó al PSOE a dejar ``las contradicciones'' y la ``desorientación''.

A su vez Izquierda Unida (IU) afirmó que el líder socialista ``sigue los pasos'' de su antecesor, Felipe González, a quien esta formación acusó en su época de haber apoyado la postura de ``mano dura'' del gobierno mexicano frente a los zapatistas.

Las críticas también se enfocaron contra Almunia por considerar ``equivocada'' la resolución adoptada por unanimidad en el Parlamento español --con el voto a favor del PSOE-- que condenó la semana pasada la matanza de Acteal, Chiapas, que costó la vida a 45 indígenas y cuya responsabilidad se atribuye a grupos paramilitares vinculados con el PRI.

¿Crisis en el PSOE?

El portavoz del Partido Popular, José María Robles Fraga, fue incluso más allá al afirmar que el líder socialista ``ha abierto una crisis en el seno del PSOE y de su grupo parlamentario, puesto que la labor de éste en el Congreso ha quedado descalificada''.

Por su parte, la alianza comunista IU condenó también las declaraciones de Almunia y sostuvo que los objetivos del EZLN en Chiapas ``son legítimos'', y recordó que ``los zapatistas no disparan un tiro desde 1994. Hacer ese tipo de comparaciones es un grave desconocimiento y una irresponsabilidad, y su apoyo (el de Almunia) a la política del presidente Ernesto Zedillo hace pensar que no tiene ninguna objeción al resurgimiento de grupos paramilitares, al desplazamiento masivo de las poblaciones autóctonas y la protección de terratenientes'', señaló el portavoz de IU en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, José Navas.

Otros partidos de izquierda minoritarios --como Iniciativa per Catalunya-- exigieron al líder del PSOE que rectifique ``sus desgraciadas'' declaraciones y los ``disparates'' que ha dicho.

Por su parte, el Partido Socialista Obrero Español se limitó a confirmar lo dicho por Joaquín Almunia, aunque subrayó que sus palabras ``sólo constatan'''que ese partido ``repudia la violencia''. Rafael Estrella, portavoz adjunto del PSOE, reconoció que su partido votó a favor de la resolución, pero indicó que en ella había ``determinados puntos con los que se puede discrepar'', aunque no señaló cuáles eran éstos.