Ningún golpe contra cárteles mayores: Helms, Coverdell y Feinstein
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 3 de marzo Ť Los senadores Jesse Helms, Paul Coverdell y Dianne Feinstein presentaron hoy una resolución para descertificar a México, pero la propuesta permitiría al Ejecutivo no aplicar las sanciones si el presidente Bill Clinton considera que esa decisión está en el ``interés nacional'' de Estados Unidos.
Poco después de haber sido presentada la iniciativa legislativa, un funcionario de la Casa Blanca comentó a La Jornada que el presidente Bill Clinton sigue firme en su decisión de certificar la cooperación de México con los esfuerzos antinarcóticos de Estados Unidos. ``Es una buena relación de trabajo y creemos que amerita la certificación'', afirmó.
El Congreso tiene un plazo de 30 días para revertir la decisión del presidente de certificar a México, pero altas fuentes de las dos cámaras del Congreso opinaron, en entrevistas con este diario, que es poco probable que esta resolución gane la mayoría de dos tercios para ser aprobada y superar un esperado veto presidencial, si llegara a ese punto. No obstante, la resolución presentada hoy en el Senado, junto con una medida parecida en la Cámara de Representantes por el republicano Clay Shaw, enfocará de nuevo la atención del Capitolio sobre los esfuerzos antinarcóticos de México.
De hecho, Thomas Constantine, el administrador de la DEA, insistió que la cooperación entre ambos países era una historia ``mixta''. Los comentarios de Constantine ante el Congreso y la publicación de secciones de un informe secreto de la DEA en que se critica a México, provocaron el disgusto del gobierno mexicano y hoy su embajada en Washington dijo que solicitó formalmente al Departamento de Estado una explicación acerca del informe de la DEA y las declaraciones de esa agencia. ``La embajada subrayó que el contenido del supuesto informe contradice las manifestaciones (de otros altos funcionarios estadunidenses)'', indicó la representación mexicana.
Sin embargo, varios legisladores dijeron hoy que fueron los comentarios de la DEA los que fomentaron su decisión de buscar revertir la decisión presidencial de certificar a México. ``Creo que es cometer una falta de servicio a las poblaciones de ambos países enviar un mensaje de triunfo cuando, de hecho, el mensaje es uno de derrota'', declaró el senador Coverdell al presentar la iniciativa. El republicano por Georgia, presidente del subcomité sobre el Hemisferio Occidental del Senado, citó en particular las recientes declaraciones de la DEA.
``Ninguno de los cárteles mayores ha sido desmantelado ni sus dirigentes arrestados'', agregó después la senadora Dianne Feinstein en su declaración ante el pleno del Senado. La legisladora demócrata de California presentó una lista de 14 narcotraficantes mexicanos buscados por Estados Unidos a los que, dijo, México ha rehusado extraditar: Agustín Vázquez Mendoza, Ramón Arellano Félix, Rafael y Miguel Caro Quintero, Vicente Carrillo Fuentes, Eduardo González Quirarte, Oscar Malherbe, Arturo Páez Martínez, Jaime Ladino Avila, José Gerardo Castro, William Brina Martín, Miguel Angel Martínez Martínez, Antonio Hernández Acosta y Miguel Félix Gallardo.
Funcionarios de la DEA insisten que el gobierno mexicano tiene ubicados a la mayoría de estos individuos, pero se niega a actuar en su contra.
Pero la resolución para desaprobar la certificación de México, que tendría que ser aprobada antes de fines de marzo, tiene pocas posibilidades de lograr la aprobación plena de la legislatura, reiteraron varias fuentes congresionales. ``Creemos que México ha logrado mucho en privado, detrás del escenario'', señaló una fuente republicana cercana al presidente de la Cámara, Newt Gingrich. Otra fuente del Senado dijo: ``simplemente no creo que exista el mismo nivel de preocupación sobre México que había el año pasado''.
Kay Bailey Hutchison, senadora republicana por Texas, está entre quienes apoyan la decisión de Clinton. Hoy discutió públicamente con Constantine. Luego de que Hutchison criticó la posición del jefe de la DEA, éste señaló que ``sí hay pequeños inicios. El año pasado no había nadie con quien pudiéramos compartir legítimamente informaciónÉ (ahora) estamos en una posición para compartir alguna información'', pero agregó que la ``prueba real'' será si México detiene a narcotraficantes conocidos acusados en EU y acepta extraditarlos.