La Jornada 4 de febrero de 1998

Alza de 15% en el kilogramo de tortilla; desde hoy se vende a $2.20

Patricia Muñoz, Fabiola Martínez, Angélica Enciso y Alonso Urrutia Ť La Secretaría de Comercio y Fomento Industrial (Secofi) autorizó a partir de hoy un incremento de 15 por ciento en promedio al precio del kilo de tortillas, de 1.90 a 2.20 pesos.

Asimismo, la dependencia determinó aumentar a 42.75 pesos el precio del bulto de 50 kilogramos de masa de maíz, según informó el subsecretario de Comercio Interior, Israel Gutiérrez, quien aseguró que se mantendrá el subsidio a la cadena maíz-tortilla, lo que representará para el gobierno federal una erogación de 5 mil millones de pesos en este año.

En entrevista, el funcionario explicó que el precio por kilogramo de tortilla (sin envoltura) será de 2.20 pesos en la zona centro del país, pero podrá llegar hasta 2.50 pesos en algunas ciudades apartadas, como Cancún, donde los costos de transporte hacen inviable que el precio del básico sea el mismo que en el resto del país.

Sobre el subsidio, puntualizó que se mantendrá sin cambio el esquema del Fideicomiso Liquidador de la Tortilla (Fidelist), del cual se benefician diariamente alrededor de dos millones de familias urbanas de bajos ingresos con un kilogramo de tortilla gratis al día. La erogación del gobierno por este concepto es de alrededor de mil 500 millones de pesos, agregó.

Adicionalmente, el gobierno tiene previsto canalizar un subsidio de alrededor de 2 mil 500 millones de pesos al precio del maíz para apoyar el consumo generalizado de la tortilla. Este apoyo se distribuirá a través de la Compañía Nacional de Subsistencias Populares (Conasupo).

Por conducto de Maíz Industrializado Conasupo (Miconsa) también se dará un apoyo al consumo de tortilla o de maíz por 420 millones de pesos, el cual se canalizará a las zonas rurales del país.

En total, los subsidios que se destinarán al consumo de este alimento sumarán entre 4 mil 800 y 5 mil millones de pesos, explicó el funcionario y argumentó que este apoyo es imprescindible para ``permitir a la población adquirir el alimento básico a un precio accesible''.

Puntualizó que el precio de 2.20 pesos por kilogramo será aplicable a las regiones 1 y 2, conformadas por el Distrito Federal y los estados de México, Aguascalientes, Campeche, Coahuila, Colima, Chiapas, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Jalisco, Michoacán, Morelos, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz, Yucatán y Zacatecas.

En la región 3, integrada por Baja California, Baja California Sur y algunas ciudades de Quintana Roo, el precio será de 2.30 pesos por kilogramo.

El precio máximo de 2.50 pesos corresponderá a la región 4, que incluye a las ciudades de Cancún, Isla Mujeres y Cozumel.

Descontento de productore y líderes del sector obrero

El incremento de 30 centavos al precio de la tortilla fue considerado ``insuficiente'' por productores. El dirigente de la Unión de Productores de Maíz, Abel Castellanos, dijo que lo que se requiere es eliminar el subsidio generalizado para que el producto tenga un precio de mercado y el apoyo se otorgue a las familias que lo necesitan.

En entrevista, mencionó que ese incremento ocasionará que los industriales ``se mantengan en el limbo'', ya que no se resuelve el problema económico de las industrias ni el de las familias sin recursos.

Asimismo, consideró ``absurdo'' que se mantenga el subsidio generalizado a la tortilla y que no deberá pasar de este año para que el gobierno federal se decida a hacer un ajuste a los subsidios. Dijo que los productores han demandado desde hace tiempo un manejo más transparente de los apoyos al sector, pero no han obtenido resultados.

Consideró que para que a los industriales les resulte redituable la producción de tortilla, el precio debería ser de al menos tres pesos por kilo.

Por su parte, el dirigente de la Confederación de Trabajadores de México, Leonardo Rodríguez Alcaine, dijo que de ser necesario solicitarán una reunión con el Presidente de la República para contener el incremento del precio.

Entrevistado luego de recibir el apoyo de varias organizaciones sindicales, Rodríguez Alcaine consideró también la posibilidad de reunirse con las autoridades laborales para discutir el tema.

Poco antes, ante dirigentes sindicales, el jerarca cetemista dijo que será necesario promover una nueva ``embestida'' obrera para pugnar por la recuperación del poder adquisitivo.

Aseveró que buscarán fortalecer la capacidad de negociación en las revisiones salariales contractuales para lograr, a través de incentivos y prestaciones, mejorar las condiciones de los trabajadores.

Por su parte, la presidencia colegiada de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) manifestó su rechazo al incremento del precio de la tortilla y demandó a las autoridades de la Secretaría de Comercio que ``retomen el control de precios de los productos básicos'', pues los constantes aumentos no son congruentes con la política de topes salariales.

Agustín Rodríguez, dirigente de la UNT, llamó a los líderes del Congreso del Trabajo, especialmente al de la Confederación de Trabajadores de México, para formalizar una mesa de concertación política y crear un frente unitario ante la escalada de precios.

La UNT insistió en que es momento de olvidar confrontaciones estériles y la ``declaracionitis'', así como buscar la unión del movimiento obrero para exigir un incremento de emergencia al salario mínimo.