La Jornada 22 de diciembre de 1997

Arbitraria y sorpresiva, la nueva tarifa del Metro, consideran usuarios

Bertha Teresa Ramírez Ť El aumento a la tarifa del Metro causó malestar entre los usuarios, quienes consideraron la medida del gobierno capitalino como arbitraria. El incremento de 20 centavos causó sorpresa en muchos pasajeros, pues se enteraron al momento en que hacían filas para comprar boletos.

Varios entrevistados en la estación del Metro Júarez, señalaron que 20 centavos para quienes no cuentan con grandes recursos económicos ``sí es una cantidad importante''.


Más vale apachurrado que tarde.
Foto: J. Guadalupe Pérez

De 10 interrogados tres dijeron que el aumento no es lesivo para los bolsillos de los capitalinos. Una estilista de nombre Graciela Hernández dijo ``que el aumento ya se registraba, pues en muchas ocasiones no se nos regresaba el cambio con la tarifa de 1.30''. En tanto Michel, estudiante de computación, dijo que 20 centavos no es mucho ``igual me lo gasto en otras porquerías''.

Cuando se es obrero 20 centavos pueden significar la diferencia entre subir o no subir al Metro, comprar o no comprar alimentos básicos o medicamentos, señaló el señor Javier Nolasco. Indicó que normalmente los consumidores deben llevar el pago exacto de los mercancías o servicios que quiere adquirir, pues si faltan 20 centavos o hasta 10, los productos o los servicios no se venden. Agregó que la suma de 20 centavos a la semana o al mes representa un gasto que no se compensa con los bajos salarios. ``Yo gasto a la semana 118 pesos por el transporte de dos estudiantes y el mío, esta es una cantidad que para mí es muy alta considerando que mi trabajo no es fijo y dependo de que sean requeridos mis servicios''.

Félix Serrano, empleado, dijo que el aumento es arbitrario y se registra antes de que se den los salariales Juana Manzano, mesera, dijo que a la semana gana 250 pesos y que cualquier incremento en el precio de productos básicos o transportes repercute en su presupuesto.

La pareja de Inocencia Trejo, que trabaja como estilista, y Carlos Santos Sánchez, obrero en una industria metalera, dijo que con el sueldo de los dos reúnen 360 pesos a la semana y gastan en transporte cerca de 150, ya que viven en una zona ``bastante retirada del DF''.

Gilberto Blas, obrero de Bimbo, dijo que el aumento no está mal, ``es cierto que nos molesta pero también debemos comprender que es necesario que este transporte cuente con un buen mantenimiento''.