Escasean medicamentos en farmacias del IMSS
Angeles Cruz Ť La falta de medicamentos en las farmacias de clínicas y hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ha sido una constante en los últimos meses, al grado de que para ``garantizar'' lo fundamental, las autoridades diseñaron una lista de ``claves indispensables y prioritarias'' de fármacos para el primer nivel de atención.
De acuerdo con la circular 36/023, enviada por las direcciones Administrativa y de Prestaciones Médicas del instituto a los directores regionales, las claves determinadas como indispensables y prioritarias tendrían que encontrarse en un nivel de existencia superior a 95 por ciento.
Dicha circular --de fecha 8 de agosto de 1997-- tuvo como fin dar a conocer los lineamientos de carácter obligatorio a que deberán sujetarse las direcciones regionales y áreas operativas respectivas, para dar cumplimiento a las políticas de optimización y racionalidad de los recursos destinados al abastecimiento en el Seguro Social.
El problema, sin embargo, es que los derechohabientes no pueden surtir sus recetas, aun cuando se trate de alguno de los 100 medicamentos contenidos en la lista prioritaria. Tan sólo en el Centro Médico Nacional Siglo XXI, hay días en que se reportan 100 fármacos agotados -de un total de 500 del cuadro básico-, así como 161 ``en baja existencia'' o a punto de terminarse.
De acuerdo con información generada por el propio Seguro Social, el pasado 8 de diciembre, cuando faltaban 12 días para el suministro de medicamentos a la farmacia 55 del Centro Médico Nacional Siglo XXI, estaban agotados vitaminas, soluciones para diálisis, antibióticos y algunos psicotrópicos y estupefacientes, entre otros.
En tanto, el mismo día el informe de artículos de baja existencia señala, por ejemplo, que la farmacia contaba con mil 173 cajas de tabletas de ácido acetil salicílico, y se esperaba un consumo, en los siguientes 10 días, de mil 377 cajas, un promedio diario de 138. El documento también dice que faltaban 12 días para el suministro de medicamentos.
La farmacia contaba ese día con cuatro mil 319 cajas de paracetamol (tabletas para el dolor), y se esperaba un consumo de siete mil 803 unidades, con un promedio diario de 659. Esta lista de artículos de baja existencia sumaba, en total, 161 productos.
Por otro lado, el Hospital General de Zona número 8, ubicado en San Angel, reportó el 11 de diciembre pasado un faltante de 99 medicamentos y, de acuerdo con los trabajadores, los informes son similares todos los días.
No ha mejorado la distribución de medicamentos: empleados
Según los propios empleados, es mentira que se haya mejorado el sistema de distribución de los medicamentos. No hay compras directas, como señalan las autoridades, y la entrega de los productos a las farmacias se sigue llevando a cabo por medio del almacén regulador.
Cuando este almacén falla en la entrega de medicamentos, los pacientes acuden a los hospitales o a los centros médicos nacionales; sin embargo, a últimas fechas, ha ocurrido que la farmacia del hospital La Raza ha sido cerrada los domingos ``por falta de medicamentos o para evitar desestabilizar sus reservas''.
Una situación similar ha sido detectada por los trabajadores en el CMN Siglo XXI, pues en las últimas semanas la farmacia ha estado cerrada un par de ocasiones en domingos.
Otro problema denunciado por los empleados del IMSS es la saturación en hospitales, en particular las áreas de urgencias. Es el caso, por ejemplo, del hospital general de la zona 8, que cuenta con 27 camas en urgencias y, en promedio, ingresan todos los días de 40 a 70 enfermos.
También se refirieron a los conflictos que los trabajadores enfrentan con los pacientes que llegan a urgencias sin su credencial o carnet que los acredite como derechohabientes, porque de acuerdo con la nueva ley del IMSS, antes de tener acceso al servicio médico tienen que depositar el 50 por ciento de lo que costará la atención.
Si después acreditan su afiliación se les devuelve su dinero, pero si esto no ocurre, el paciente tiene que pagar el costo total del servicio médico. Anteriormente, explicaron, el enfermo o sus familiares sólo tenían que firmar una carta de obligación de pago.
Los lineamientos contenidos en la circular 36/023 también recomiendan garantizar la continuidad en la prestación de los servicios, aplicando el programa de prescripción razonable. En materia de inventario, destaca que se tendrá que mantener ``el parámetro autorizado de 2.4 meses de consumo como nivel máximo de inversión, 1.4 en el almacén regulador y 1 en las farmacias y unidades de servicio''.