La Jornada 3 de diciembre de 1997

No se tomó en cuenta en el documento las propuestas de la oposición, asevera el PRD

Antonio Castellanos, Oscar Camacho y Ciro Pérez Silva Ť El Grupo de los cuatro (G-4) en la Cámara de Diputados rechazó ayer el anteproyecto de dictámen de la Ley de Ingresos e insistió en que el impuesto al valor agregado (IVA) debe bajar a 12 por ciento y eliminarse para la renta de servicio telefónico, el consumo de gas y en la energía eléctrica de uso doméstico; sin embargo, el IVA podría quedar en 15 por ciento si el Senado rechaza dos veces reducirlo, advirtió Arturo Núñez, coordinador del grupo parlamentario del PRI.

En conferencia de prensa, Núñez advirtió que ``con la economía no se juega'' y recalcó que el asunto del IVA se ha politizado a partir de propuestas ``populistas, sin decir a los contribuyentes los efectos adversos''. El presidente de la Comisión de Hacienda, Angel Aceves Saucedo, dijo que el PRI no está ``cerrado'' y propone eliminar el impuesto a los activos a las pequeñas y medianas empresas, que representan 90 por ciento de la planta productiva.

``También estudiamos --enfatizó-- bajar las tarifas eléctricas y del consumo de gas doméstico, pero definitivamente no mover a la baja el IVA. No hay cerrazón en el PRI y prueba de ello es que exigimos flexibilidad al Ejecutivo federal, pero en lo que sea razonable''. Anticipó que para la noche de hoy estará listo el dictamen de la miscelánea fiscal que incluye el IVA, el impuesto sobre la renta, el impuesto al activo y el Código Fiscal, para presentarse al pleno este jueves.

En tanto, el coordinador del PRD, Porfirio Muñoz Ledo, afirmó que la propuesta del grupo opositor para bajar el IVA a 12 por ciento es muy sólida, pero ``tengo la impresión de que el gobierno no quiere negociar''. Muñoz Ledo dio por hecho que no habrá acuerdo, pues el PRI ha tomado el lema de ``IVA o muerte'', lo que puede crear ``problemas legales muy complicados y llevarnos a un periodo extraordinario que nosotros no buscamos''.

Aquí, precisó Muñoz Ledo, ``puede haber una jugada de póquer: o el gobierno confunde la tasa del IVA con la virginidad o está blofeando para ver hasta dónde llegamos: está pagando por ver, como se dice en el juego. Si manejan el asunto como una tragedia nacional perjudicarán a las instituciones en su conjunto, y si lo ven como algo normal en un régimen de equilibrio de poderes no habrá desgaste para nadie'', señaló.

Después de conocer el anteproyecto de dictamen, la diputada perredista Dolores Padierna salió de la reunión de la Comisión de Hacienda, en el Palacio Legislativo, y dijo a los reporteros que el grupo de los cuatro rechazaba el documento porque ``contiene sólo la visión del gobierno federal y carece de todas las propuestas que hicimos los distintos partidos de oposición''.

En cuanto al impuesto sobre la renta, agregó la legisladora, ante la carencia de información y dificultades técnicas, ``acordamos posponer esta discusión para el año próximo, para organizar una reunión nacional en la que participen los contribuyentes y puedan dar luz sobre una programación más justa de este gravamen. Por lo pronto se quedaría en 34 por ciento''.

Por la mañana se reunieron los integrantes de la Comisión de Hacienda y el anteproyecto provocó el rechazo de los diputados del grupo opositor. Al respecto, Laura Alicia Garza Galindo, del PRI, expresó: ``Me parece poco serio que no se esperen hasta hacer un análisis completo y que se dé una declaración en el sentido de que se votará en contra de las iniciativas''.

Dijo que todas las propuestas de la oposición se tomaron en cuenta. ``Nosotros --sostuvo-- valoramos lo que le conviene al país, igual que cuando se tuvo que votar el incremento del IVA a 15 por ciento. Está el país de por medio''. Se le preguntó si la economía nacional está en riesgo y respondió: ``No sé. Dependerá de los compañeros de estos partidos''.

``Perverso'', bajar el IVA

Angel Aceves, presidente de la Comisión de Hacienda, afirmó: ``Devolverle a la sociedad excedentes fiscales vía el IVA no solamente es contraproducente, sino perverso''. Si hay excedentes, agregó, deben darse por la vía del impuesto sobre la renta a empresas que reinviertan utilidades y que generen empleos.

Por la tarde, en conferencia de prensa, Arturo Núñez consideró que una disminución del IVA tendría consecuencias directas sobre el gasto social del gobierno y sobre los recursos que reciben las haciendas estatales y municipales, y explicó que 60 por ciento del gasto familiar de las clases más desprotegidas ya se encuentra exento de ese impuesto.

La reforma del sistema de seguridad social, dijo, ya ha beneficiado a los asalariados en seis meses de 1997 y en 1998 lo hará por todo el año. El nuevo sistema, explicó, desgrava los salarios de los trabajadores al reducir sus aportaciones para la seguridad social. Cerca de 95 por ciento de los trabajadores asegurados se benefician con reducciones de sus aportaciones que van de 1.5 al 2.9 por ciento del salario, señaló.

``Este efecto por sí solo es mayor que los beneficios de la reducción del IVA. Es más alto para la mayoría de los trabajadores asalariados que los posibles efectos de la disminución del IVA. Cada punto porcentual de disminución a ese gravamen, representa una disminución de más de 6 mil millones de pesos'', agregó.

Citó ejemplos. Reducir el IVA un punto equivale a: casi tres veces los recursos propuestos para el programa nacional de seguridad pública, poco más de dos veces el programa de empleo temporal rural, el programa de alianza para el campo, el fondo de desastres nacionales y todo el programa de educación, salud y educación (Progresa).

En Guanajuato, estado gobernado por el PAN, equivaldría a reducir a la mitad los apoyos a campesinos del programa Conasupo de subsidio al maíz; en Oaxaca, a reducir 70 por ciento los recursos destinados al sector salud para la construcción, conservación y rehabilitación de 491 clínicas, y en Sinaloa, a eliminar el programa emergente de empleo de la red rural de carreteras (6 mil 877 empleos), concluyó.