La Jornada 3 de diciembre de 1997

Aprueban la doble nacionalidad en el Senado; el día 11 comparece Gurría

Andrea Becerril Ť El pleno del Senado de la República aprobó la nueva Ley de Nacionalidad y la comparecencia, el próximo día 11, del canciller José Angel Gurría para que informe a los legisladores sobre la política gubernamental en materia exterior desarrollada en este año.

Durante la visita del titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Acción Nacional insistirá en que el funcionario explique con detalle todo lo relacio- nado con el Tratado de Límites Marítimos y por qué el gobierno no ha tomado la iniciativa para reivindicar uno de los yacimientos petroleros más importantes del mundo, ubicado en la zona de altamar del Golfo de México, precisó el senador panista José Angel Conchello.

En tribuna abordó de nueva cuenta ese tema al advertir que la actual política petrolera es ``suicida'', ya que Petróleos Mexicanos pretende centrarse en una mayor extracción de hidrocarburos más que en la investigación en busca de yacimientos. Conchello pidió incluso la comparecencia inmediata en el Senado del director de la paraestatal, Adrián Lajous.

Por lo que hace a la ley sobre la doble nacionalidad, el proyecto que el Ejecutivo envió al Senado se aprobó por unanimidad pero con más de 40 modificaciones, algunas de ellas de última hora propuestas por el senador panista Luis de los Santos y respaldadas por el priísta Amador Rodríguez Lozano. Las propuestas están encaminadas a establecer los mecanismos para recuperar la nacionalidad en el marco de la Constitución.

La nueva ley posibilita la doble nacionalidad y suprime todas las referencias a la posible pérdida de la nacionalidad mexicana, con lo que permite a aquellos conacionales que tuvieran que emigrar mantener y fortalecer sus vínculos sociales, culturales y jurídicos con el país.

A la par de esa ley se aprobaron las reformas a diversos ordenamientos legales para restringir el acceso a cargos y funciones públicas a quienes poseen la doble nacionalidad.

Una vez leídos los dos dictámenes -uno para expedir la Ley de Nacionalidad y otro para reformar diversos ordenamientos- el panista Luis Santos de la Garza planteó que la legislación propuesta no era congruente con lo establecido en la reforma constitucional del 20 de marzo de 1997, ya que no ofrecía certeza jurídica a quienes se acogieran a la misma.

Precisó que de aprobarse el dictamen en los términos presentados, se dejaría fuera del beneficio de la doble nacionalidad a quienes nacieron antes del 19 de marzo de 1998, fecha en que entrará en vigor la ley.

A partir de tales señalamientos, las comisiones que presentaron el dictamen propusieron una reforma al artículo quinto transitorio para que éste se remitiera al artículo tercero transitorio del decreto que reformó los artículos 30, 32 y 37 de la Constitución.

De esta manera, ``quienes hayan perdido su nacionalidad mexicana por nacimiento al haber adquirido voluntariamente una nacionalidad extranjera, y si se encuentran en pleno goce de sus derechos'', podrán beneficiarse de lo dispuesto en el artículo 37 constitucional, previa solicitud a la SRE dentro de los cinco años siguientes a la entrada en vigor del decreto ayer aprobado.

La senadora del PRD, Rosalbina Garavito, señaló que una adecuación de este tipo era necesaria y urgente ante los graves problemas e injusticias que enfrentan los mexicanos residentes en el extranjero, especialmente en Estados Unnidos.

Adelantó que la fracción parlamentaria de su partido en el Senado presentará próximamente una iniciativa de reformas al artículo segundo transitorio del decreto que ayer se aprobó, para que quienes hayan perdido la nacionalidad mexicana la recuperen sin realizar trámite alguno y sin lapso de tiempo.

Por otra parte, Garavito pidió que se turnara a comisiones su propuesta de que el Senado solicite al Instituto Federal Electoral los avances realizados que permitan el voto de los mexicanos en el extranjero.