``Nunca estuve de acuerdo'' en la participación del Ejército, dice Oscar Levín

Ricardo Olayo y Raúl Llanos Ť El secretario general del PRI-DF, Oscar Levín, dijo que los militares deben retirarse de las tareas de seguridad pública y dedicarse solamente a las funciones que les reserva la Constitución. ``Nunca he estado de acuerdo en que los medios militares intervengan en la policía de la ciudad'', aseveró el también diputado.

Para el presidente de la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa, el priísta Alfonso Rivera, la actuación de los militares en la Secretaría de Seguridad Pública ``ha sido poco afortunada porque no se ha cumplido con las expectativas'' que se crearon a su llegada, de que iban a mejorar la lucha contra la delincuencia.

Por ello, se debe evaluar la continuación de personal del Ejército en esas tareas. El diputado local informó que la comisión especial del caso Buenos Aires se reunirá el lunes en la tarde con el procurador de Justicia del DF, Lorenzo Thomas Torres, a quien pedirán una explicación de las razones por las que no profundizó en las investigaciones, como sí lo hicieron otras instancias que no son responsables directas de las pesquisas.

Ambos priístas cuestionaron el papel de los militares que llegaron en junio de 1996 a la Policía Preventiva, aunque Levín precisó que en su partido hay opiniones divergentes; él a título personal sostuvo que ``como institución, el Ejército Nacional debe mantenerse en los rangos constitucionales para los que ha sido creada; es nuestra institución principal, es la que nos da fe y confianza en la Nación y creo que no hay que meterla en estas cosas''.

De la gestión del regente Oscar Espinosa para resolver el problema de la inseguridad, respondió que ``hizo lo más que pudo, trabajó de la mejor manera posible, buscó que la solución militar ayudara; hoy, por lo que vimos, ayudó, pero también generó nuevos problemas, y creo que éstos no los debemos permitir en nuestro país. Creemos que tenemos que tener mucho más cuidado con el término de la utilización del Ejército Nacional''.

Dijo que no necesariamente de trató de un error político porque se tienen que buscar opciones; ``nosotros pensamos que la alternativa no está del lado militar, sino de la desconcentración de los mandos, de la participación de los ciudadanos y de la creación de una nueva policía''.

Policías de civil

Levín fue entrevistado minutos antes del inicio de una boda colectiva promovida por el PRI en la sede de su partido; ahí, indicó que Espinosa resolvió muchos problemas, pero como legado negativo que se queda al próximo gobierno está el desempleo que, aunque se recuperó en número, no ocurrió lo mismo en el salario y la inseguridad en las calles.

El priísta indicó que el próximo sábado 29 se realizará una marcha hacia la ALDF para exigir que mejore la actuación de la policía, organizada por organismos civiles y que, según dijo, no tiene fines partidistas.

En tanto, el diputado Alfonso Rivera dijo que en las indagatorias de la Procuraduría de Justicia capitalina debe estar incluida la presencia de policías vestidos de civil, quienes pudieron haber recibido órdenes de algún superior para despojarse el uniforme y actuar en la colonia Buenos Aires.

En la reunión con Thomas anticipó que pedirán las pruebas que inculpan a jaguares y zorros, al igual que a los tres mandos militares, así como información respecto de si otros mandos tienen relación en los hechos.

En tanto, el coordinador del Partido del Trabajo (PT) en la Asamblea Legislativa, José Narro Céspedes, rechazó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) intervenga en el caso Buenos Aires, porque ello implicará que la ALDF y la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal estén imposibilitados de seguir el curso de las pesquisas.

En conferencia de prensa, el representante popular manifestó que hasta ahora la presión de estos dos organismos han servido para ir descubriendo las complicidades en la SSP, donde su titular, Enrique Salgado Cordero, actuó con ``negligencia e irresponsabilidad al tratar de encubrir'' a los altos mandos de esta corporación.

Insistió en que el general Salgado deberá renunciar a su cargo y estar sujeto a una investigación profunda para determinar si tuvo responsabilidad en los hechos ocurridos el lunes 8 de septiembre. Quien llegue a la SSP, dijo, deberá ser un civil, de calidad moral reconocida y cuyo nombramiento genere consenso entre los diversos sectores de la ciudad de México.