Exige el panista que el Senado asuma su responsabilidad histórica
Andrea Becerril Ť El Senado de la República debe asumir su responsabilidad histórica y exigir que el presidente Ernesto Zedillo informe detalladamente lo negociado con su homólogo Bill Clinton respecto de la zona central del Golfo de México, porque ``todo parece indicar que el gobierno mexicano cedió ya el usufructo de la enorme riqueza petrolera de esa área a las trasnacionales estadunidenses'', sostuvo el senador panista José Angel Conchello.
Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores y uno de los que más han insistido en ese tema, Conchello dijo que esa información sobre el inicio de trabajos de perforación en el golfo, a cargo de la empresa Reading and Bates Corp., confirma su sospecha de que hay una negociación oculta, ``e incluso un convenio secreto para entregar el cuarto yacimiento de petróleo y gas más importante del mundo a la voracidad de la Unión Americana''.
En entrevista, Conchello explicó que es extraño que en su reciente gira a Estados Unidos el presidente Zedillo no haya aludido al tema de las reservas petroleras en el golfo y que tampoco hubiera participado, como lo pidió el Senado, en la ratificación del Tratado de Límites Marítimos.
Sin embargo, sostuvo una reunión de 15 minutos con Clinton, en la que estuvo acompañado del anterior y el actual secretarios de Energía y Minas, Jesús Reyes Heroles -hoy embajador de México ante Estados Unidos- y Luis Téllez, además del subsecretario de Relaciones Exteriores, Juan Rebolledo.
Y, precisó, ``todo parece indicar que en esa reunión se trató el tema del petróleo del Golfo de México. La duda es razonable, porque además se restó importancia a algo fundamental, como fue la ratificación del Tratado de Límites Marítimos''.
Conchello añadió que un día antes llevó a la tribuna del Senado ese punto y habló del descontento y la sensación de inutilidad que tenían los senadores del PAN por esa actitud del Ejecutivo de no haber querido participar en la definición de los límites marítimos en la zona del golfo.
Ello, dijo, habría acabado con la incertidumbre y habría servido de punto inicial para la discusión sobre a quién corresponden los ricos yacimientos petrolíferos que están en el llamado Agujero de Dona.
Molesto, Conchello agregó que ese descontento se tornó indignación. ``Tememos que se haya pactado ya el compromiso de entregar a las trasnacionales petroleras la zona central del Golfo de México''.
El legislador explicó que durante 18 años el Senado de Estados Unidos se negó a ratificar el Tratado de Límites Marítimos suscrito entre ambos países porque sabían de la existencia del Agujero de Dona.
Una vez ratificado el tratado, el gobierno de México tenía que exigir la definición de la zona central en el golfo, donde están los yacimientos, toda vez que geográficamente la parte más grande está del lado mexicano.
``Estados Unidos nunca quiso hacerlo y planteó siempre la exploración y explotación conjunta, cierto de que ellos tienen la técnica y el dinero para llevarse la tajada del león y a nosotros dejarnos la del ratón.''
Eso, añadió, es seguramente lo que se pretende, y por ello ``el Senado tiene que pedir cuentas claras a Zedillo de qué fue lo que negoció al respecto con Clinton''.
Se requiere que la Cámara de Senadores exija un informe pormenorizado de lo tratado por ambos presidentes en la entrevista de 15 minutos a la que asistieron Reyes Heroles y Téllez, ``incluso versiones taquigráficas''.
Además, dijo, la fracción parlamentaria del PAN en el Senado seguirá insistiendo en que se aclare ese punto, y ``por supuesto en que se reivindique esa riqueza petrolera del golfo para nuestro país''.
Son yacimientos de tal importancia, añadió, que de quedar en manos de Estados Unidos, éste ya no tendría que preocuparse por el Golfo Pérsico.
Asimismo, expuso que en todas las ocasiones -``que han sido muchas''- en las que insistió ante autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para que se diera la definición de límites en el caso del Agujero de Dona, la respuesta fue siempre que los yacimientos estaban a gran profundidad y era difícil hacerlo.
``Sin embargo, ahora una empresa de Estados Unidos ya se atrevió a hacerlo y va a invertir para perforar a gran profundidad. ¿Ya le habrán dado el permiso? ¿Hay ya un convenio que los mexicanos no conocemos?''.