La Jornada 29 de octubre de 1997

Ortiz: los efectos de la turbulencia se considerarán en el presupuesto de 98

Antonio Castellanos Ť El secretario de Hacienda y Crédito Público, Guillermo Ortiz Martínez, afirmó ayer que los efectos que provoque la turbulencia bursátil en los mercados financieros serán tomados en cuenta en las proyecciones económicas de 1998. Asimismo hizo un llamado a los inversionistas a mantener la calma y no precipitarse porque actuar en mercados ``revueltos es muy peligroso''.

``Tendremos --aceptó-- alguna afectación y esperamos que no sea demasiada. Estaremos listos para incorporar estas nuevas condiciones en los presupuestos de egresos e ingresos''. Asimismo, subrayó que la autoridad intervendrá si hay problemas en los sistemas de pago y de cotizaciones o dificultades técnicas para hacer liquidaciones en la Bolsa Mexicana de Valores.

Afirmó que se debe evitar que los mecanismos de pago se atoren, que haya problemas técnicos en el piso de remates y procurar que las variables no se disparen una vez que se hayan ``calmado las cosas a nivel mundial''; entonces la autoridad actuará con más probabilidades de éxito, que si lo hace en un ambiente en que las fuerzas del mercado obedecen a fenómenos externos.

El funcionario precisó que la probabilidad de que esta ``corrección mundial de mercados'' afecte a México ``no es muy alta''. ``Lo que estamos viendo ahora en la coyuntura es que vamos a tener mucha volatilidad en los mercados, en el tipo de cambio, en las tasas de interés y en las acciones, pero tenemos que verlo como un fenómeno global''.

Ortiz Martínez insistió: ``Lo importante es ver cómo se asientan los polvos y no ponerse demasiado nerviosos. Esto es algo que obviamente está afectando a todo mundo, pero un principio importante es conservar la calma''. En lo individual, aclaró, los gobiernos poco pueden hacer ante un fenómeno global.

El gobierno federal, dijo, estará atento a la evolución del mercado mexicano en relación con el exterior porque a veces la acción de la autoridad ``es contraproducente. Si nos precipitamos a querer atenuar estos efectos cuando se trata de un fenómeno mundial, el remedio puede resultar peor que la enfermedad, y por ello se tiene que actuar con mucha cautela''.

Luego se refirió al tipo de cambio. No hizo predicciones y sólo aludió a las proyecciones de algunos analistas que lo colocaban hace dos meses en ocho y 8.10 pesos por dólar para finales de 1997. Y aun si quedara en 8.30, recalcó Ortiz, el impacto sobre la inflación y el crecimiento de la economía no sería muy significativo.

El titular de la SHCP, quien participó en un debate en Radio Red, concluyó: ``México tiene hoy condiciones distintas a las que teníamos hace algunos años; la economía está creciendo, la inflación va para abajo, tenemos una cuenta corriente que es la menor entre todos los países importantes de América Latina y la percepción de riesgo-país ha mejorado mucho''.